Anahí le sostuvo la mirada.
Alfonso dejó caer el hacha y cogió su chaqueta con capucha. Saliendo al balcón, Anahi gritó:
- Disculpe. No era mi intención molestar.
- Sin embargo, sólo que lo hizo - dijo Alfonso, que llevaba el escudo de nuevo a ella.
- Disculpe. Voy a otro lugar.
Alfonso suspiró, deseando dar la vuelta y mirar a los ojos.
- No quiero sentir como que necesita para alejarse de donde estoy.
- Pero eso es exactamente lo que quiere. Más bien yo no estuviera aquí, ¿verdad? - Ella vio que sus hombros se ponen rígidos. - Lo menos que podemos hacer es ser honesto con los demás.
Alfonso frunció los labios, suspirando de nuevo.
- Es verdad. Pero les puedo asegurar que no te importa no tener más la casa para mí.
- No hay necesidad de ocultar.
- No oculto. Elegí este estilo de vida, señorita. Puente, y en los últimos cuatro años he aprendido que la mejor manera de vivir.
- Quiero decir, más fácil.
- Nada es fácil para mí, señorita.
- ¿Qué hay de su hija? Ella espera encontrar a su padre. Es necesario calidez y confort. Perdió a su madre.
Alfonso de pecho se tensó ante la idea de Kelly tristeza, y cómo deseo de consolarla.
- Es por eso que contraté señorita. Puente.
- Y usted no se preocupan por ella?
¿Cómo podría decirle Anahi que para conocer la existencia de su hija, hace unas semanas, se sintió la ira de la madre de Kelly, para abandonarla, lleva en su seno el bebé era suyo, no le dará la oportunidad de conocer al niño antes para quitar todo lo que tenía. El amor por la mujer desapareció cuando ella se apartó de él cuando más se necesita, lo que condena a prisión y aislamiento. ¿Cómo podría olvidar el pasado?
- A mi me importa. Muy. Pero apenas tuvo tiempo para acostumbrarse a la idea de que un padre. - Comenzó a caminar hacia el garaje.
- Es bueno para acostumbrarse - Anahi disparó, mientras se alejaba. - A partir de mañana ella estará aquí, con ganas de verlo, y cómo puedo explicar que el padre no quería encontrarse con ella?
- Decir la verdad - respondió sin dejar de caminar. - Que el padre o no ser una fuente de pesadillas para ella.
La respuesta la dejó indefensa, y antes de que pudiera pensar en qué decir, se había ido. Se volvió y miró a Dewey.
- Creo que las cosas no van muy bien, ¿verdad?
Dewey la observó detenidamente, como si la evaluación de todos los detalles, y Anahi no podía decir cuál era la impresión de que el hombre, ya que su expresión se mantuvo impenetrable.
- No señora.
- Soy Anahi Puente.
- Sr. Alfonso me dijo.
- Y ¿qué otra cosa que me dijo?
La expresión de Dewey se mantuvo inescrutable, y se volvió a guardar las pilas de madera. Ciertamente, los necesitan para calentarse en las noches de tormenta, imaginó Anahi, pensando cómo el castillo de piedra iba a ser frío en invierno.
- Todo el mundo en la ciudad tiene una imagen equivocada de él. Pero usted ya debe saber que, ¿verdad? - Ella admiraba el hecho de fabricación casera a preservar el secreto de Alfonso, incluso expuesto a la curiosidad de todos.
Dewey distribuido en una pila.
- ¿Podría al menos dime cómo su rutina? Así que puedo conseguir fuera del camino.
Dewey sacó el tapón mirándola por un momento antes de hablar:
- No.
- ¿Qué? - No podía creer lo que oía.
- Sr. Alfonso no sigue las rutinas, hacer lo que quiera. Si usted encuentra que más tendrá que hacer frente a la situación.
- Gracias por tu ayuda. - Anahi se cruzó de brazos, mirándolo directamente. - Prefiero verlo ocultar o fuera de contacto para saber la hija?
Él no respondió, y estaba claro que Anahi cómo era leal al jefe. Pero cuando él llevó a cabo el hacha, listo para comenzar el trabajo que Alfonso se había detenido, ella lo detuvo, sosteniendo su brazo de levantamiento.
- No me iré hasta que esté seguro de que Kelly tiene todo el cuidado y atención que merece. Has comprendido el Sr. Halette?
Sus ojos brillaron, aunque su expresión se mantuvo sin cambios.
- Si señora. Y usted me puede llamar Dewey, señora.
- Anahi - corrigió ella, volviéndose a la casa y añadiendo: - Estoy esperando que entregan las compras. Por lo tanto, yo sustituyo mejor que la expresión seria en su rostro. Después de todo, es lo que todo el mundo espera, ¿verdad?
Dewey veía alejarse, tratando de ocultar una sonrisa.
- Si señora.
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El Bello y la Bestia •AyA• (Versión en español)
RomanceElla se enamoró de un hombre cuyo rostro no podía ver ... Convocado como criada para servir al rey, Anahi Puente fue contratado para trabajar como niñera de una hija de Alfonso Herrera. Los rumores sobre el hombre que vivía en reclusión no asustan...