Entradas Al Infierno

Capitulo 14

-¡Vete!

David se río de él.

-Vamos dejame pasar.

-¡No! ¡¿Es que no te es suficiente todo lo que me has hecho?!

-Oye yo no tengo la culpa de eso.

-¡¡Para!! -Liam estaba furioso con él y las lágrimas amenazaban con volver a salir pero esta vez iba a contenerlas con fuerza- ¡¿No entiendes que no quiero volver a saber nada de ti?! ¡No sé ni que haces aquí!

-Bueno como te había dicho voy a estudiar el último curso de la universidad aquí así que voy a tener que vivir en algún sitio, no? Nuestros padres me han dicho que venga aquí, era la única opción. Evidentemente no van a pagar dos apartamentos.

David hablaba tan tranquilo pero Liam estaba a punto de estallar. Lo que me faltaba. ¡Ni de coña se queda aquí! Además de odiarle, allí estaba Araziel y no iba a hecharle a la calle ni tampoco iba presentarselo a su hermano.

-¡¿Tu te escuchas?! No me hagas perder más el tiempo y vete de aquí.

-Primero deja de chillarme y segundo a mí no me da ordenes nadie y menos un enfermo mental como tú. Además este apartamento no es tuyo, lo pagan nuestros padres a quiénes por cierto traicionaste.

Liam estalló. Sin pensárselo dos veces le pegó con el puño en la cara con gran fuerza y se la giró. Siempre había tenido ganas de hacer eso y esta vez encontró la oportunidad, se había pasado diciéndole eso. Aunque eso fue un error, físicament David siempre había sido mucho más fuerte, era el típico chico que pasaba largas horas en el gimnasio con tal de impresionar a las chicas con sus musculos pero la verdad es que Liam, a pesar de tener un cuerpo más simple, era mucho más guapo. David agarró a Liam por el cuello con fuerza y lo aplastó contra la pared.

-Jamás vuelvas a ponerme una mano encima, ¿Quién te has creído que eres?

Mientras hablaba clavaba sus uñas de cada vez más fuerte en el cuello de Liam, eso iba a dejarle marca. Liam intentaba volver a golpearle pero no podía quitarselo de encima. Seguía furioso así que optó por escupirle en la cara justo cuando acabó de hablar. Grave error. Eso solo hizo que David se enfureciera más. Lo lanzó al suelo haciendo que Liam se diera un fuerte golpe en la cabeza pero al parecer eso no fue suficiente para su hermano. Tras verlo en el suelo intentando levantarse pero sin fuerzas le dio unas cuantas patadas en el estómago. Araziel lo estaba escuchando todo, los gritos, los golpes... No quería meterse en sus problemas y tampoco quería que es chico se enterara de que Liam estaba ayudando a un Guardián del Infierno, pero no podía soportar seguir escuchando como golpeaba a Liam, no entendía porque. Había oído tantas veces como pegaban a muchos de sus compañeros incluso había visto como los torturaban algunos demonios y nunca había sentido nada, los había ayudado y se había asegurado de que estaban bien (todas las veces que había podido) pero esta vez era distinto. Simplemente no podía soportarlo y decidió intervenir.
Salió de la habitación pero David ni se dio cuenta ya que seguía dándole algunas patas a Liam.

-¡Ey! ¡Déjale! -Le advirtió Araziel-.

Divid se giró y dejó a Liam que seguía en el suelo.

-¿Y tu quién eres? ¿Su novio? -Se río-.

-Vete antes de que decida hacerte callar para siempre -Le advirtió Araziel muy serio, con una expresión aterradora-.

-Jajaja claro que sí -Respondió con ironia- y sino, ¿qué vas a hacerme?

-¡Araziel no! -Le pidió Liam antes que pudiera hacerlo pedazos. No quería más problemas-.

-Vete, no voy a repetirlo otra vez- Le advirtió Araziel-.

-No, ¿Quién te has creído que eres para hecharme de aquí? Además no eres nadie para decirme lo que debo o no debo hacer a mi hermano-.

Dicho esto David le dio una última patada a Liam pero Araziel no aguantó más. Agarró a David por su chaqueta y lo tiró a un lado apartandole de Liam. Pero David se levantó enseguida con la intención de devolversela a Araziel. Justo cuando estaba a punto de darle un golpe con el puño, Araziel con poco esfuerzo lo paró con su magia. No solía luchar con magia, de hecho nunca la utilizaba a para eso pero tampoco podía coger la espada y hacerlo pedazos. Así que tras bloquear sus intentos de atacarle y David sin poder creerse lo que estaba viendo, finalmente Araziel lo empujó fuera del apartamento y le cerró la puerta.
Luego se giró en busca de Liam, estaba en el suelo sin poder levantarse, le dolía todo el cuerpo. Araziel se arrodilló ante el él y al ponerle una mano sobre el brazo Liam levantó un poco la cabeza.

-¿Por que lo has hecho? -Preguntó entre lágrimas- Te dije que no salieras... Ahora... Ahora va a contarselo todo a mis padres y... Yo no...

-Si no hubiera salido ahora mismo ni estarías respirando.

-¡Le has mostrado tu magia! ¿Y si se lo cuenta a todo el mundo?

-Liam olvida eso. Estas sangrando.

Al parecer uno de los golpes de David fue directo en la boca de Liam y le había partido el labio, pero en realidad Liam ni se había dado cuenta de eso. Le dolía más todo lo que su hermano había sido capaz de hacerle y decirle. Sabía que le odiaba pero nunca hubiera creido que sería capaz de llegar hasta tal punto.

-Ven deja que te cure.

Araziel lo ayudó a levantarse del suelo y lo sentó en el sofa. A pesar de que Liam insistiera en que no hacía falta que le curase al final Araziel consiguió curarle la herida. Tras haberle curado, Liam pudo contenerse más y empezó a llorar. Había sido fuerte delante su hermano no quería que lo viera débil. Araziel estaba delante de él y no sabía que hacer.

-¿Liam? -Araziel parecía preocupado (por primera vez)-.

No sabía porque, quizá fuera solo por instinto, acarició el cabello de Liam. Pero este seguía llorando y rápidamente abrazó a Araziel. Lo necesitaba. Necesitaba el abrazo de alguien y tenia tanto que agradecerle... Araziel nunca se había encontrado en una situación como esa y realmente no sabía como reacionar así que optó por repetir el mismo gestó que había hecho Liam enrollando sus brazos al rededor de su cuerpo.
Ese fue el primer abrazo de Araziel.