Capitulo 16

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Decidió que sería mejor coger el coche e ir a un lugar un poco más lejos de la zona de la universidad para asegurarse de no encontrar a nadie conocido. Al final llegó a unos grandes jardines donde recordaba haber estado allí al menos una vez.
Era un lugar tranquilo y no había casi nadie por el momento solo habían visto a una pareja de adolescentes que habían mirado mal a los ojos de Araziel pero el parecía no darse cuenta de nada de lo que le rodeaba.
Al final se sentaron en el césped, bueno Liam más bien se acostó allí. No era la primera vez que lo hacía, antes siempre buscaba sitios al aire libre tranquilos donde poder leer y los jardines así solían ser la mejor opción. Voy a guardar este sitio en mi lista de lugares para leer.
El viento empezaba a ser un poco más frío, Araziel se había empeñado en llevar su tunica negra aunque Liam le hubiera advertido mil veces que llamaría demasiado la atención. Pero en ese momento Liam lo envidio, él solo llevaba sus simples vaqueros y una camiseta y estaba empezando a tener frío. Pero en ese momento esto no era lo que estaba pasando por su mente sino su hermano y sus padres.

-Gracias.

-¿Otra vez?

-Si, bueno te debo más que un simple "gracias" pero te estoy muy agradecido.

-Ya, no hace falta me cuentes todo un discurso de lo agradecido que estas.

-Esta bien -Suspiró-.

-¿Era tu hermano?

-Increíble pero sí, era él.

-¿Por qué...

-Y eso se llama curiosidad y es otro sentimiento -Volvió a afirmar Liam recordandole que sí tenía sentimientos-.

-No cambies de tema.

-Bien, mi hermano me odia.

-¡No me digas! Yo creía que lo de ayer eran muestras de amor -Respondió Araziel con ironia-.

-¿Puedes esperar que acabe? -Araziel no añadido nada más y Liam continuo- Creo que después de lo de anoche tienes derecho a saber lo que pasó. Hace tiempo mi hermano y yo nos peleamos y todo porque le confesé que era homosexual.

-Había oído hablar de eso. Por lo que se los humanos consideran eso una enfermedad o algo así, bueno no estoy seguro, pero algo muy malo.

-No todos. No todos los humanos creen eso, solo los más estúpidos y mi hermano es uno de ellos. Me odia muchísimo tan solo por que fui la persona que estaba más unida a él y también el tipo persona que no esperaba que fuera.

-Ves, los sentimientos destruyen las personas por eso no los permitimos.

-No digas estupideces -Suspiró, agachó la cabeza y siguió hablando- Ayer empezo a chillarme "enfermo mental" y no lo pude soportar por eso le pegué pero el es más fuerte que yo y bueno ya pudiste verlo.

-¿"Enfermo mental"? Incluso yo se que eso es cruel.

Liam no podía ni continuar la conversación creía que volvería a hecharse a llorar pero no fue así. Quería ser fuerte.

-¿Como son la relaciones en vuestro mundo? -Si esto fue lo primero que se le paso por la mente en ese momento y ya tenía curiosidad de hacía tiempo-.

-Es algo muy simple. Primero cuándo somos pequeños nos separan de nuestro padres y nos educamos todos por igual así es más fácil eliminar las emociones. Así que podría considerar que todos somos compañeros.

-¿Enserio? Eso debe ser horrible y muy cruel, y si es así ¿como tenéis niños? Es decir, si no os podeis enamorar es imposible.

-No, es fácil. Cada X tiempo se permiten unos dias en los cuales se pueden dejar embarazadas a algunas mujeres y ya esta. Creo que no es necesario que te explique el procesó, no?

-¡No! -Respondió rápidamente- Eso es aún peor, ¿y si no quieres hacerlo? ¿Y si quieres ser ti quien educa a tus hijos? ¿Y si-...

-¿Y si dejas de hacer tantas preguntas? Liam, nuestro mundo funciona así y siempre ha funcionado bien y no hay nada que discutir.

A pesar de morir de ganas por hacer más preguntas paró. Era imposible imaginar un mundo así, sin amor, ni amistad, ni dolor, ni miedo, ni alegría. Sin nada. Aunque por otra parte es una manera más fácil de convivir. Más fácil pero no mejor.
Liam se quedó mirando a Araziel de reojo. Siempre tan serio y misterioso, siempre con la misma expresión. Su cabello negro y liso siempre cubriendo su frente y parte de sus ojos rojos. Imposible que nadie nunca se haya sentido atraido por él.
Además Liam no se esperaba que reacionara tan bien al confesarle que era homosexual pero Liam tenía la costumbre de que todos reacionar como lo hacía su hermano.
Liam abandonó rápidamente el tema de sus problemas y sobre los sentimientos en el mundo de Araziel, había salido para relajarse no para seguir dándole vueltas a todo.

-¿Te apetece comer algo?

Araziel no dijo nada solo le dirigió una mirada a Liam, pero eso fue suficiente. Araziel amaba la comida de este mundo y comería lo que fuera en cualquier momento.
Liam lo llevó a un bar donde hacian helados, le pareció que eso iba a gustarle bastante ya que cada vez que le había hecho algo dulce le había encantado. Así que Liam pidió por los dos después de que la camarera no perdiese de vista los ojos de Araziel.

-¿Qué es esto? -Preguntó Araziel mirando al helado en todos los ángulos posibles-.

-Pruebalo, es dulce.

Tras notar el frío en la lengua Araziel puso una cara de desagradó con la cual Liam no pudo evitar reirse.

-¿Tan malo es? -Preguntó Liam riendose-.

-Bueno... -Volvió a saborear el helado y esta vez puso más buen aspecto tras notar el sabor dulce- Esta bien, pero ¿es necesario que sea tan frio?

-Sino no sería un "helado" -Se río-.

Le encantaba mostrarle estas pequeñas cosas a Araziel. Su reacción siempre le provocaba una sonrisa y bueno, eso siempre era de agradecer sobretodo despues de pasar unos momentos tan malos, aunque Araziel no parecía ser conciente de lo que provocaba en Liam.

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