El mejor de mis rechazos (#1)

Capítulo 14: Discusiones

Lauren miraba de Ethan a mí tratando de entender qué hacía él con otra chica.

Sentí la necesidad de tomar a Ethan de la mano para dejarle claro a ella que él estaba conmigo ahora. Pero me arrepentí porque no quería tensionar más el momento.

Salí abruptamente de mis pensamientos cuando sentí la mano de Ethan tomar con fuerza la mía, dándome una mirada que hizo que mi corazón prácticamente se detuviera.

Estaba confundido, pero podía ver que me miraba con amor a mí, no a ella.

―Ethan― pronunció Lauren con voz dulce.

Le observé ahora a ella y pude notar que miraba fijamente nuestras manos.

― ¿Qué haces aquí Lauren? ―preguntó Ethan― Pensé que estabas fuera del país.

Lauren negó con la cabeza y se acercó un paso hacia nosotros. Sentí que Ethan me apretó con más fuerza la mano y lo miré asustada.

―Volví hace unos días­― explicó―. No había tenido tiempo de venir a hablar contigo.

Se miraron a los ojos por varios segundos sin decir nada y tuve miedo de que ella compartiera la misma conexión que yo tenía con él. Tuve miedo de perder a Ethan, de sufrir otro rechazo, de sufrir un rechazo que estaba segura no podría sobrellevar.

― ¿Quién es ella? ―preguntó Lauren mirándome.

Le devolví la mirada también, con ojos curiosos y pude ver que ella me miraba de la misma manera y eso me molestó de sobremanera. No detectaba celos ni fastidio de parte de ella y eso me impedía pensar que era una perra por haberse aparecido frente a la puerta del departamento de mi novio; su ex.

―Es Isidora Scott; mi novia― respondió.

Me sentí alegre porque a pesar de que Ethan se veía confundido en ningún momento me había dado una verdadera razón para asustarme más que mis estúpidas inseguridades.

―Hola Isidora― me saludó ella acercándose a mí ―Soy Lauren.

Le devolví el saludo con una sonrisa inconsciente que salió de mis labios. No podía evitarlo, la ex de Ethan me agradaba.

― ¿Hace cuánto son novios? ―preguntó Lauren.

―Poco más de un mes― respondí.

Ethan soltó un suspiro de resignación y enseguida abrió la puerta de su departamento dejándonos entrar a ambas. Podía ver que no entendía el motivo de la visita de Lauren y lo entendí porque yo también tenía la misma maldita duda.

Una vez sentados y con un vaso de jugo en nuestras manos Ethan soltó la pregunta que yo también quería hacer.

― ¿A qué viniste?

Lauren nos miró a ambos como debatiéndose entre decir la verdad o mentir. Finalmente decidió explicar.

―Llegué hace una semana, estuve haciendo unos trámites para convalidar mis estudios en el extranjero, pensé en visitarte antes pero simplemente no pude. Quería volver contigo, pero llego aquí y te encuentro con otra chica― dijo.

Si lo hubiera dicho otra persona estoy segura de que mi cara sería peor que la de un perro pitbul listo para atacar, pero ella lo había dicho sin la intención de herirme.

Al ver que Ethan arrugó el cejo por sus palabras se apresuró a hablar.

―No estoy sacándote en cara nada― dijo―. Solo no me esperaba que estuvieras saliendo con alguien y me alegro y también quiero que sepas que no pienso intervenir en tu relación.