El mejor de mis rechazos (#1)

Capítulo 10: ¿Sueños eróticos?

Caminaba junto a Marcus hacia la cafetería, era miércoles y todavía me quedaban un par de clases a las cuales asistir.

Tenía hambre y lo único que quería en ese momento era llegar a la cafetería y comerme las galletas con más azúcar que existieran. Marcus me miraba divertido, al parecer mi estado de hambruna le parecía gracioso.

―Deja de reírte de mí― dije enojada.

―No te enojes pequeña Sid― habló una voz conocida a mis espaldas.

Era absurdo preguntarme quién era cuando la única persona que me llamaba de esa manera era nada más y nada menos que Liam el doctor.

―Hola― dije lanzándome hacia él quien me levantó por los aires.

­―Parece que te alegra verme― obvió Liam entre risas.

―Por supuesto que sí Liam el doctor― dije.

Mi amigo sonrió mientras me dejaba nuevamente en el suelo y enseguida se metió las manos al bolsillo buscando algo.

Lo miré curiosa y casi salté de la felicidad cuando vi que sacó un pequeño paquete de galletitas azucaradas.

―Definitivamente te amo― dije abrazándolo nuevamente.

―Cuidado que me puedo poner celoso― habló Ethan apareciendo de la nada.

Volteé a ver a mi novio y casi se me cae el alma al suelo cuando noté que no venía solo sino que con la rubia que me agradaba tanto o más que Lauren.

―Hola― saludé con una sonrisa fingida.

Vi a Ethan hacer una mueca y noté enseguida que él se había dado cuenta de mi cambio de humor.

Sabía perfectamente que ellos nunca tuvieron nada; ambos me habían explicado que solo hacían eso para molestarme, pero me era imposible no preocuparme al ver a esa rubia despampanante al lado de mi novio.

― ¿Cómo estás? ―preguntó Ethan acercándose a mí y besando mi frente.

Extrañaba sus labios.

―Tengo hambre― respondí mientras abría el paquete de galletas y me comía tres de un bocado.

―Lo supuse― comentó Ethan.

Le di una mirada fastidiada mientras me daba la vuelta y volvía a caminar.

Liam el doctor se apresuró a ponerse a mi lado.

― ¿Por qué estas enojada pequeña Sid? ―preguntó en un susurro.

―No me agrada la rubia que está con Ethan; creo que ella siente algo por él.

―No te preocupes, tu novio solo tiene ojos para ti ¿No has visto acaso la manera en que brillan sus ojos cuando te ve?

Le sonreí escondiendo un sonrojo mientras este pasaba un brazo por mis hombros.

―Aun así, ella no me agrada― dije.

―Tienes que darle una oportunidad; Ellen es agradable― comentó Liam.

― ¿La conoces? ―pregunté.

―Conozco a muchas personas― respondió Liam mirando a otro lado.

― ¿Por qué siento que estas evitando el tema?

―No estoy evitando nada― dijo Liam y enseguida agregó ― ¿Vas a comprar algo?

―Sí, un té y unas galletas de limón― respondí― ¿Desde hace cuánto la conoces?

―Desde hace un par de años.