2016

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-¿Qué paso?-se acerca Federico a su amigo desfallecido

-¡Katia! ¡Katia la ha matado! ¡Federico, la acuchillo! ¡La mato frente a mis ojos! La vi caer y... ¡Tanta sangre...! ¿Recuerdas cuando te dije que no había nada peor que haberla perdido por mi torpeza? ¡Pues no era verdad! ¡Ojalá nunca lo hubiera dicho! Es una revancha del cielo por creerme bendecido ¡Daría lo que fuera por ella! Si con no volver a amarla se curara... lo haría...

-¿Y Alonso...?-sonríe con ánimos Federico

-Está en ese cuarto con ella, intenta salvarla ¡Federico! ¿Qué voy a hacer sin ella?

-¡Estará bien! Alonso es un buen doctor... él, la curara.

-Alonso la ama...

-¿Qué?

-Dijo que la ama... Ama a Tabatha... Pero... ¿Y si la deja morir? ¿Si deja que se muera por rencor de no corresponderle...?

-Alonso no es así...

-El amor nos vuelve mezquinos...

*******

Alonso logro detener la hemorragia, sin embargo, Tabatha aún no ha despertado, ha perdido mucha sangre y se sienta a mirarla...

Acaricia su mejilla y lo rosan las larguísimas pestañas que han quedado descubiertas, a penas cae en cuenta de que en el traslado los lentes se han caído en el césped...

Mira su palidez, los cabellos que se han soltado y el aroma a pesadumbre que invade el aire... la muerte ha engrandecido su belleza, no, pero ¿Qué está pensando? Ella no está muerta...

Pero... ¿Y si lo estuviera...? Alonso no es doctor, es apenas un estudiante de medicina... se encuentra a mitad de la nada, sin mayor herramienta que sus conocimientos básicos, sin un doctor de verdad que pueda tratarla... Si ella muere...

-Tabatha... ¿Sí mueres tú, que voy a hacer yo? ¿A quién voy a amar si no es a ti?

Vuelve a mirarla y sabe que no le queda nada más que hacer que esperar... y se deja cubrir por la madrugada que parece no tener fin...

**********

Katia está encerrada en un cuarto de arriba, es una habitación espaciosa con vista al jardín, se levanta a fingir que puede ver algo a través de la oscuridad...

Escucha pasos afuera de su recamara y se figura que es la policía que viene a buscarla...

-Soy yo- tocan suavemente- Héctor. -Ábreme, quiero hablar contigo.

Katia hace pasar a Héctor y nuevamente cierra.

-¿Miedo?-se burla Héctor

-No estoy para tonterías...

-vale, ya... disculpa, fue un comentario de mal gusto, en realidad vengo a hablarte de negocios...

-¿Negocios?

-No eres la única que ha perdido todo esta noche... ambos perdimos a nuestra tapadera, se han revelado nuestras intenciones verdaderas... podría asegurar que tu perdiste más... no solo al gran amor de tu vida, sino que casi matas a tu mejor amiga...

-Quieres decir que... ¿No está muerta?

-Alonso es un gran doctor- sonríe de nuevo Héctor- utilizo toda su ciencia...

-Alonso la ama

-¡Vaya, vaya! Eso sí que es una sorpresa... ¿Quién diría que el callado doctor padeciera la Friendzone? Pero... es irrelevante para lo que vengo a ofrecerte

-¿Qué puedes ofrecerme? ¿Un buen abogado cuando me metan a la cárcel?

-No te meterán a la cárcel. Tabatha es demasiado noble para permitir que alguien que conoce vaya a parar a la cárcel...

-¿Entonces? ¿Qué quieres?

-Voy a ir directo al grano, Katia, ya vi que no eres una mujer que quiera andarse con rodeos... He ideado un plan que nos beneficiara a ambos...

-¿Qué plan?

-En cuanto despierte Tabatha irás a disculparte... le pedirás perdón, que fue un arranque de locura... ella te perdonará y la dejarás en paz con Antonio...

-¡Que plan tan brillante! ¡Enserio...! ¡No seas idiota! ¿Eso a mí de que me sirve?

-¿Aparte de la posibilidad de no ir a la cárcel...?

-Pues no veo como te beneficie a ti

-Vale, vale. Aún no he contado la mejor parte... bien. Yo llegaré a mi casa, destrozado, diré la verdad, que Sofía es poco más que una prostituta y que me engaño... dejaré enfriar las cosas un mes... ahí es donde entras tú, querida Katia... saldremos al cine y todas esas cursilerías que forman parte del cortejo y después de un mes diremos que somos novios...

-Insisto, no veo las ventajas para mí...

-¡El tiempo, Katia! Dejaremos enfriar las cosas.... Andaremos tres meses, tiempo suficiente para que yo consiga otra tapadera... a cambio, cuando terminemos nuestro fugaz noviazgo, me encargaré de Tabatha...

-¿Encargarte?

-La mataré... bueno, la mandaré a matar... muerta Tabatha, te acercaras a Antonio sin dificultad, lo seducirás y tendrás al gran amor de tu vida...

Katia mira fijamente a Héctor, es increíble que sus planes malvados sean tan perfectos como el reflejo de ser ingeniero... todo sería más fácil si Tabatha no está... su plan podría funcionar...

-¿Cómo se que cumplirás lo que me prometes?

-Soy un hombre de palabra, puedes preguntarle a Sofía si quieres...

-No lo sé....- Katia medita unos instantes, luego el ingeniero le extiende la mano...

-¿Tenemos un trato?- Héctor sonríe con la dentadura de un demonio

-Es un trato...

Katia vuelve a mirar por la ventana... y piensa por instante que ojalá Tabatha no la perdone, que la refunda en la cárcel antes de convertirla en un monstruo aún mayor...

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La casa del locoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora