2016

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-¿Cómo estás?-comienza Katia

-Fuera de peligro, lamento romper tus ilusiones y decirte que viviré unos cuantos años más

-Tabatha yo...

-Espera, espera... quiero poner atención, tengo un interés mal sano en averiguar qué tipo de excusas darás al respecto... solo te recuerdo que ya usaste el amor...

-¿Por qué no puedes creer que genuinamente estoy interesada en saber cómo estás?

-Bueno.... En principio tú me acuchillaste...

-¡Tabatha! Ya, ¡Basta de tu ironía! Si, sé que hice mal, pero no creas que ando por la vida acuchillando gente... Mientras tú estabas debatiéndote entre la vida y la muerte yo me encontraba encerrada con mis propias inseguridades... imagina esto ¿Cómo iba a poder mirarme de nuevo al espejo sabiendo que era una asesina? No te pido que perdones, pero sí que comprendas... ¿Cómo te hubieras sentido si hubieras estado en mi lugar? Yo soy más bonita que tu, admitámoslo Tabatha, probablemente somos igual de inteligentes y yo no soy torpe como tú y a pesar de eso... todos parecían preferirte, los maestros: "Deberías aprender a Tabatha, entrego el mejor trabajo de la clase..." mis padres "mira a Tabatha no le causa problemas a sus padres..." nuestros amigos "¿Has visto que guapa se ha puesto Tabatha...?" Mi vida entera giraba en torno a que tú me superabas en todos sentidos, era como estar siempre en una encrucijada en la que tú eras la puerta numero 1 y yo la puerta numero 2 y aunque ambos caminos conducían al mismo sitio todos elegían la puerta numero 1... pero aprendí a vivir con ello, porque sabía que a ti no te interesaba nada, no te importaban los halagos, ni ser popular y renombrada en la escuela, podía tolerarlo, en algún momento nuestros destinos se bifurcarían, tú estabas a punto de descantarte por la filosofía y yo por las letras y así por fin podría llegar a escuchar comentarios que alabaran mis talentos... pero, lo que no pude soportar es que llegarás a quitarme otra cosa, otra cosa más, y esta vez tu ansiabas quedarte con ella ¿Cómo crees que me sentí cuando me enteré que Antonio te había escogido a ti? ¡De nuevo había pasado! La maravillosa y talentosa Tabatha me había arrebatado otra cosa... -Katia comienza a sollozar

-Y-yo... no sabía que te sintieras así ¿Por qué no me dijiste nada?

-¿Y qué ibas a hacer? Evitar ser tan perfecta, no Tabatha, pese a todo, mi envidia ha sido infundada, jamás has querido herirme ¡Y esa es otra cosa que no soporto! Imagínate esto, que hay una persona que te roba todo en la vida y lógicamente ansias odiarla... sin embargo ¿cómo te odiaba a ti, Tabatha? ¡Eras mi amiga! Y además tienes el corazón más noble de todo el universo, y creo que eso fue lo que me enloqueció al punto de querer matarte... que fueras extremadamente perfecta y que fuera incapaz de sentir lo que yo siento, enserio, Tabatha, tu no sientes odio, ni rencor ni remordimientos, eres como la personificación del bien en la Tierra... y yo intente extinguirlo, y tienes razón, quizás no me creas, y estas en todo tu derecho y sé que ya nada volverá a ser igual que antes y que jamás podre mirarte a los ojos, pero alivia mi alma solo un poco, aunque esto no surja de tu corazón, solo dime que me perdonas, solo, regálame la posibilidad de redimirme y la esperanza de convertirme en alguien como tú...

Tabatha abraza a Katia y se ríe mientras le susurra.

-Siempre serás mi mejor amiga.

Katia le devuelve el abrazo, pero no sabe si sentir miedo de los alcances del plan Héctor o preocupación ante la ingenuidad de Tabatha...

************

Antonio levanto del cuello a Héctor y lo estrello en la pared, la verdad es que era una escena típica de las películas de acción, no le hubiera sorprendido al abogado que alguien gritara ¡Corte! La realidad se había fundido con la ficción de una forma que daba miedo...

-¡Suéltame!-logro gritar Héctor mientras su cara se pintaba de morado. Antonio lo suelta pero lo empuja a una recamara cercana.

-Tienes 5 minutos para explicarte y si no me convences, bueno, no serías el primer acuchillado...

Héctor comienza a narrar mientras se talla el cuello.

-Vale... bueno, yo estaba conmocionado por lo de Sofía... pero, escuchamos ruidos en el jardín, todos bajamos y alcanzamos a ver fragmentos de Alonso llevando a Tabatha inconsciente a...

-Al grano...

-... todos siguieron a Alonso, excepto yo, no es que no me preocupara, pero tampoco podía hacer nada y preferí bajar a la cocina... ahí me encontré con Katia, estaba mirándose las manos, como si no creyera lo que se había atrevido a hacer, pensé en marcharme, no fuera a ser que también me acuchillará a mí, sin embargo, me asusto aún más lo que me dijo: ¡Al fin! ¡Al fin lo hice...! Y no es que yo sea muy valiente, pero preferí quedarme a ver si me decía otra cosa... tardo como 5 minutos en darse cuenta de que estaba ahí y cuando me vio me sonrío...

Antonio estaba a punto de perder la paciencia, pero necesitaba saber el resto de la historia, si Tabatha enserio estaba en peligro, bueno, lo mejor era tener todos los detalles...

-...Entonces- continuo Héctor- se acerco a mí y puso sus brazos alrededor de mi cuello y se río... y me dijo "Vaya, al parecer no soy la única persona que ha perdido todo..." yo me desconcerté, después de todo, yo tenía mi cerebro saturado, ni siquiera me sentía capaz de procesarlo todo, pero en ese momento me desperece y comencé a entender, le pregunte a Katia a que se refería y beso mi mejilla... "Héctor, sabes bien a que me refiero... pero, ahora que lo pienso no todo está perdido" y fue entonces cuando me conto su plan...

-¡Qué plan! Ya llevas más de 5 minutos contándome tonterías...- Antonio va a mirarse pero, Héctor le grita

-Está bien, no es mi novia a la que van a matar...

Antonio regresa y mira a Héctor

-vale, continua...

-Bueno, Katia me ofreció un trato... ella sabía que yo estaba desesperado, necesitaba con urgencia una novia y ella se propuso para ocupar ese lugar... Katia me dijo que me daba un plazo, tres meses en los que sería mi novia, el tiempo suficiente para que yo encontrara otra sustituta y cumplido el plazo yo me encargaría de mandar a alguien que matara a Tabatha...

-¡Pero porque!

-Bueno, así estarías solo... en realidad se le ocurrió dadas nuestras circunstancias, yo llegaría a mi casa destrozado diciendo que fui traicionado por Sofía y ella haría lo mismo al respecto de Héctor, entonces de nuestro dolor común haría posible el amor...

-Porque... ¿Por qué me dices esto?

-Antonio, no quiero morir y tampoco deseo ir a prisión ¿Tú crees que voy a ensuciarme las manos por algo tan tonto como un pleito de niñas de secundaria? No es por menospreciar a tu novia... pero...

-¿Qué le dijiste a Katia?

-Acepte el trato sin embargo eso no significa que vaya a cumplirlo, no haré nada que perjudique a Tabatha...

-¿Y qué pasa si en 3 meses ella te pide que cumplas con...?

-Diré que tú tienes sospechas y que no podemos arriesgarnos.

-¡Pero porque aceptaste!

-¿Preferías que le dijera que no? ¿Y qué tal si ella intenta hacerle algo a Tabatha? Cuando menos así puedo tener la seguridad de que Katia no hará nada...

-¿En qué momento se convirtió la vida en algo tan complicado?

-Bueno... supongo que en instante en que decidimos cumplir 20 años...

Antonio sale de la habitación y baja a la cocina con una sensación de pesadumbre que antes no tenía, Héctor sale después y se encuentra con Katia en el pasillo.

-Tenías razón- le dice ella- tu plan está funcionando.

Héctor le sonríe feliz.

-No sabes cuánto, mejor de lo que esperaba...

XR^8

La casa del locoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora