capitulo 11

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Desperté y sentía que alguien me agarraba la cintura, volteo y vi a Rodrigo alado mío, la verdad se veía muy guapo y tierno, Levante la sabana y recordé que sólo traía ropa interior, pero yo no era la unica semi desnuda, el estaba en bóxer pegado calvin klein, su pierna derecha estaba enredada con mi derecha, la verdad estaba disfrutando así que sólo me hice la dormida en su pecho, pero al parecer hice mucho moviendo, ya que despertó, pero yo se como dormida.
-buenos días vida- cada vez me gustaba más ese apodo. -despierta hermosa que hoy iremos a que te enseñe a disparar- sólo lo ignore y seguí como si nada. -bueno si quiere me voy, por que como está muy dormida, me iré a enseñar a disparar a otra necia que el primer día que la conocí me trató de poner celoso, porque bailaba con los otros, y cuando yo se lo pedí me mandó un recado que ese comentario me lo metiera por la cola- no recisti más y comenzó a reír. -ya ve que si despertaba, ya vamonos-
-no, no quiero- dije como niña chiquita, mientras me taba más con la sabana. Me cargo y se dirigió al baño.
-SUELTAME-
-no plebe, no me hiso caso, yo la iba a dejar que se bañara sola, pero me no me dejó otra opción que bañarme contigo-
-no que te pasa Rodrigo, como crees que te dejaré que te bañes conmigo, estas loco-
-pero por ti plebe-
-ya prometo que yo me baño pero ya salte del baño-
-esta bien plebe, pero si no está abajo en 5 min, vengo y la baño yo- dice cerrando la puerta al salir.
Me bañé, todo tranquilo, me puse un jens azul, una camisa guanga blanca, un suerte negro abierto y unas botas café.
-VIDA YA VÁMONOS- y ahí está gritandome.
Voy bajando las escalares, pero con cuidado ya que no se caminar mucho en botas.
-no la chingue plebe le dije que ibamos a ir a enseñarle a disparar, no al rancho, pero bueno como usted quiera, de porci se tardó más de una hora y le dije 5 minutos- me lo decía de una forma que realmente no me agradó, así que me enojé y sólo salí de la casa y me subí a su camioneta sin nada que decir y cerrándole la puerta de un portón.
Subió el y no dijo nada, una que otra vez volteaba a verme, pero yo lo ignoraba, soy de las persona que tengo el orgullo más grande y es difícil que perdone a alguien.
-no piensa decir nada??- dice yo solo lo miro, le alzó una ceja y quedó los ojos, y ago como si no hubiera pasado nada. -pero porque se enoja??- no le contesta, me puse los audífonos y escuche la música que había descargado ayer. -hableme chingaos, parezco pinche ignorado- volte y una vez más había cometido un grave error, se que es una tontería, pero nunca me han gustado los gritos, tan sólo agache la mirada.
Llegamos a el lugar que creo que era ya que tenía un título donde decía "artillería", veo que ya viene a abrir la puerta del coche y yo lo arrebaso y me salgo antes de que la habrá, el sólo queda sorprendido y después de ratito camino y acelero la velocidad hasta llegar conmigo. Me agarró la mano y al principio lo trataba de alejar luego recordé que era parte del plan.
-buenas días, en que le puedo ayudar- dice la secretaria mostrándole sus senos discretamente.
-buenos días venimos a entrenar un poco- dice Rodrigo riendo coquetamente, no se que hacer, estoy enojada con el, pero los celos me matan, que puedo hacer tengo dos ideas, una le coqueteo a Rodrigo para que la olvide o voy con el chavo también trabajador de hay para que me "ayude" según. La dos.
-esta bien mire, aquí está un horario, cuanto tiempo ocupa??-
- 1 hora- me mira y dice -mejor que sean 4 mi amiga es un poco retra...-se rie la chava y yo solo lo fulminó con la mirada- retarda PLEBE-
-que me necesito poner??- no me contesta la chava parece imnotisada - hey te estoy hablando- pero no hace caso, sólo veo que le guiña un ojo Rodrigo.
Suelto de un jalón a Rodrigo y camino meneando las caderas y el chavo no quitaba la mirada de mi.
-hola-
-ho_la- dice el podré tartamudeando.
-disculpa me puede enseñar a utilizar una pistola o decir me que se necesita, por favor- le digo mordiéndome el labio inferior.
-claro mira no sé necesita nada más que un arma y una belleza como tu- dice de una forma según coqueta, pero eso no me gusta, lo he pasado por mucho, así que sólo río como pendejo. -yo tengo tiempo libre, puedo ayudarte- dice emocionado, estoy apunto de decir que si, pero el cabron de Rodrigo se acuerda que traía compañía.
-no te preocupes, yo le ayudo a mi NOVIA- dice agarrándome la cintura, logre lo que quería, pero todavía quiero que pague más.
-novia?? Perdón pero yo soy tu AMIGA, y estoy disponible- le guiño el ojo y el chico rie tímidamente.
-vamonos- dice Rodrigo ya enojado.
-vámonos?? Suena a manada, si te quieres ir, largate por mi no hay  ningún problema, aquí vine a aprender a disparar y lo voy a hacer- digo cruzándome de brazos.
-quieres aprender a disparar??- pregunta el chino y sólo asiento con la cabeza - así se dispara- saca su pistola y le da a la pared que está junto al chavo, pero si le alcanzó a rasguñar, privándole sangrado.
-estas bien- le digo acercándome al chavo.
-si no te preocupes, todo que se pueda arreflar- dice el chavo optimista.
-de verdad lo siento, es más mi nombre es magali, y este es mi número, de verdad si necesitas algo llámame, hasta luego- le doy el número en un papelito y salgo enojada, no sin antes pasar por donde estaba la Secretaría fea y fue tanto me enojo que no supe cómo que sólo la agarre de la camisa donde están los botones y se la rompi.
-huy lo siento, pero velo por el lado positivo ya no tienes que agachar tus bubis para enseñar tus operaciones baratas-.
Digo enojada y sólo salgo de la tienda.

Mi Vida Con El Chino Antax Donde viven las historias. Descúbrelo ahora