MI ÁNGEL OSCURO

CAPÍTULO 33

Bruce

Desde que subimos al avión Alissa se había quedado profundamente dormida. Últimamente el trabajo en las empresas estaba bastante pesado y ella se había encargado completamente de todo, mientras que yo me encargaba de organizar algunos asuntos con la gente a la que veríamos mañana por la noche para cerrar el trato.

- Señor, estamos por aterrizar - Avisó el copiloto

- De acuerdo - Respondí

Pasaron un par de minutos hasta que por fin me avisaron que ya nos esperaba el auto que había mandado a pedir.

- Cariño - Susurré

Alissa se removió pero no abrió los ojos para nada. Ella quería seguir durmiendo.

- Cielo - Hablé nuevamente con voz suave

- ¿Mmm? - Fue su contestación

Sonreí ampliamente, verla dormir era algo maravilloso. Su rostro relajado, su respiración, sus labios. Todo en ella era perfecto.

- ¿Llegamos? - Preguntó sin abrir los ojos

- Si - Sonreí

Abrió los ojos poco a poco y luego me sonrío ampliamente. La ayude a ponerse de pié y luego tomé las maletas para llevarlas al auto.

...........

Me estacione frente al hotel y observé a Allisa que miraba todo maravillada.

- Es precioso - Dijo observando detalladamente el hotel

- Espera a verlo por dentro - Dije

Allisa me volteo a ver por unos segundos con cara de asombro y luego regresó su vista al hotel.

- Deberíamos bajar - Dijo ansiosa

Reí. Me encantaba verla comportarse como una niña pequeña.

- Vamos - Sonreí

Baje del auto y abrí su puerta. Llegamos hasta recepción y nos atendió un señor muy amable de unos 47 años.

- ¿Reservo el último piso, no es así? - Preguntó mientras miraba algo en la computadora

- Asi es - Contesté

Allisa me miró sorprendida y lo entendí perfectamente, reservar un piso completo sólo para nosotros era un poco exagerado, pero había sido por cuestiones de seguridad, no quería que ella corriera peligro en ningún momento y también para que se sintiera cómoda y libre.

- Bien - Dijo el señor mientras buscaba nuestra llave .- Aquí tiene - Me la entregó dedicándome una sonrisa amable

- Muchas gracias - Contesté amable

Alissa y yo caminamos hacia el elevador y presionamos el botón que nos llevaba hacia nuestro piso.

Cuando las puertas del elevador se cerraron, deje caer las maletas y me acerqué lo más posible a ella, estampe mis labios en los suyos para luego sujetar su cabello y tirar de él suavemente hacia atrás y pasar mis labios por su cuello. Sentir como su piel se erizaba ante mi tacto, ers increíble y me hacia sentir que me deseaba tanto como yo a ella. Simplemente inexplicable.

..........

- Listo, acomodé todo - Dijo Alissa mientras se sentaba en la orilla de la cama

- ¿Quieres ir a nadar? - Pregunte y ella asintió rapdiamente

- Me cambiaré - Dijo entrando al baño

Busque sobre nuestras cosas algo que ponerme para nadar y justamente encontré un short de licra. Perfecto para la ocasión.