Alfa Iris: Buscando Mi Otra Mitad

XXXII: ¿Traición?

-Cuídala bien Luz. -comenta la líder de las brujas.

-Claro, que lo hare. - contesta Luz poniendo sus dos patitas juntas haciendo que se vea más tierna, aunque su intención es verse mala.

-Iris... - me llaman todos mientras se acercan.

-Suerte. - desea la madre de Sky.

-Yo no te deseo nada, sé que puedes lograrlo. Pudiste conmigo cuando quería cenarme al lobo, así que puedes con todo el que se te ponga en el medio. - habla esta vez el dragón.

Asiento y miro a las brujas. Dos de ellas asienten en forma de apoyo, para luego irse. La líder acerca su mano a mi cuello tomando el hilo del collar para luego sacar el collar.

-Aurora, nunca pudo encontrarlo. - comenta la bruja mirando el collar. -Siendo una guardiana y teniendo poder, pero tu... estoy segura que estas hecha para esto.

-Lo sé. - respondo con "humildad". -Bueno, me despido. Tengo que ir a casa a preparar por lo menos una mochila. - camino hacia donde Sky que me esta esperando. -Si muero no lloren por mí.

Todos giran sus ojos ante lo que he dicho. Sky se dobla para que pueda montarlo, pero me quedo mirándolo por un minuto. Otra vez volar, eso me pone los pelos de punta.

-Solo hazlo. - manda Luz con actitud.

Suspiro y monto a Sky. Este mira el cielo y estira sus alas. Me agarro de su cuello y cierro mis ojos como si mi vida dependiera de ello. Siento como nos elevamos a toda velocidad, el viento otra vez vuelve a chocar en mi rostro. Tras varios minutos abro mis ojos y noto como nos estamos acercando a mi casa.

Sky baja en picada hacia el monte haciendo que yo aguante un grito. Al tocar suelo tomo un gran bocado de aire. Bajo tambaleándome, pero noto como el grifo tiene una gran rata en sus patas. Miro a Sky sorprendida.

-Lo siento, tengo hambre. - comenta el mismo al ver mi cara.

-Tiene una vista excelente. - lo halago haciendo que alce su cabeza orgulloso.

Camino hacia fuera del monte para ver si hay personas cerca. No quiero ver a mis padres, va a ser algo doloroso. Escucho como la rata hace unos chillidos para que la suelten. Trato de ignorarla ya que no quiero escuchar lo que dice.

-Es mejor si avanzas. - aconseja la luciérnaga haciendo que ruede mis ojos.

Miro a Sky que se comió la rata de un solo bocado. Este me mira a mi atento y se acerca.

-No puedo acompañarte en esta aventura. - comenta Sky con tristeza. -Tal parece que es mejor una luciérnaga que un grifo.

-Claro que es mejor una luciérnaga que un grifo. - responde Luz sin mirarnos, atenta a lo que hay afuera.

-Pero espero verte otra vez junto al lobo de colores. - dice el grifo alejándose de mí, buscando un buen lugar para volar.

-Gracias por todo, Sky. - le agradezco.

-Nos vemos, Iris. - se despide estirando sus alas y se va volando dando por ultimo un chillido característico de los grifos.

-Bueno, ahora solo tú y yo. -comenta Luz moviendo su trasero de la emoción.

-Mm... sí. - le respondo con una sonrisa media falsa.

Me acerco a mi casa con sigilo, en cada árbol que hay paro. Hasta que llego al que está cerca de mi hogar, me quedo mirando varios minutos la casa. No hay nadie en ella y las esencias de mis padres no se sienten. Tal vez no han llegado a casa por lo de ayer.

-Solo sal de aquí, pareces un anormal en estos matorrales Iris. - dice Luz, giro mis ojos ya me tiene cansada.

-Ve y verifica que no haya nadie. - mando haciendo que refunfuña.