Capítulo 26

293 30 2
                                    

Ben

Odio esa vista que tiene la gente sobre los grupos de rock, y en rock lo pongo todo, metal, heavy, metalcore, screamo... Todo. Son como eh, si ese es el, alcohólico y mujeriego de AA. Ese es el suicida de Nirvana. Como si solo fuéramos lo que hacemos.

Estaba pensando sobre Ben en mi cama de la caravana. Miraba al techo. Últimamente no hago nada más que pensar en él y estar con él. Ben es perfecto para mi. Siempre me había gustado pero nunca le había conocido. Y ahora que lo hacía no quería separarme de él.

Cada vez que me sonríe mi mundo se ilumina. Cada vez que ríe creo que escucho a un ángel. Cada vez que me mira pierdo la noción del tiempo, cada vez que me besa el mundo se congela y cada vez que me toca mi corazón se sale de mi pecho.

Estoy enamorada de él, me gusta muchísimo. Y no se que hacer. Le podría pedir de ser novios, aunque eso no cambiaría nada. No se que diría... Supongamos que dice que sí... ¿Que haría?

"Sabes que Ben diría que no" dijo algo dentro de mi.

"Y una mierda, él diría que si" dije en respuesta a eso.

Pero también podría decir que no. Es decir, no me conoce. Y yo no le conozco a él. Pero me encantaría conocerlo.

No se que pasaba últimamente con Danny, pero creo que se avecinan problemas, y problemas de los gordos, estaba como demasiado irascible, y borde. Ben no paraba de preocuparse por él y yo le decía que le dejara en paz que ese comportamiento no traía nada de bueno. Pero él como buena persona que es, se preocupaba.

Me levanté de la cama y fui a la sala de estar. No había nadie y sinceramente no se porque. Supongo que estarían por allí divirtiéndose y yo aquí como una loca pensando en Ben. Porque no hacía nada más que eso.

Allí había la play y me puse a jugar al Destiny, porque ya me había aburrido de los otros. En el Fallout ya tenía el nivel 68, y en el The Witcher me había quedado encallada en una misión. Así que...

La campaña de Destiny era bastante chula, la mierda es que habías de pagar por las dos expansiones, La Profunda Oscuridad y El Rey de los Poseídos, y encima el Play Station + , y pues no queria, ya me habían engañado bastante.

Destiny es un juego que se supone que iba a ser El Juego, pero ahora sólo es uno de los muchos que hay. Va sobre un grupo de personajes llamados Guardianes que con la ayuda de los espectros han de vencer a los Vez, a los Caídos y a los Cabal. Tres razas distintas de criaturas de la oscuridad. Los Guardianes son seres de la luz, y la utilizan para matar a los de la oscuridad.

Creo que me estuve como dos o tres horas jugando, a la segunda hora ya me había pasado la campaña. Era demasiado corta, pero intensa.
Tenía música puesta des del móvil para motivarme en el juego. La iba cantando flojo. Ahora había Not The American Average.

- ¡Porque tiene que ser tan malditamente guai esta canción!- dije pensando en alto.

Ahora estaba en la parte que tenía que derrotar al jefe final, que era un dios, pero se transformaba en unos robots raros.

- Rattatatata - dije mientras disparaba en el juego - ¡Y fuera!

Habían dos más, eran tres robots y ya me había cargado a uno. Les tenías que dar en la barriga, ese era su punto débil. Me escondí en una roca, al lado y empezaron a venir robots pequeñitos. El grande era como de tres o cuatro metros con una cosa amarilla en la barriga.

Los pequeños tenían un ojo de color rojo y armas en las manos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Los pequeños tenían un ojo de color rojo y armas en las manos. Eran de color negro.

Acabé con el segundo jefe y sólo me quedaba el último que era el más fuerte

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Acabé con el segundo jefe y sólo me quedaba el último que era el más fuerte.

- ¡Muere!- le grité al juego.

La vida de mi personaje iba bajando a media que el jefe final me iba disparando.

- Mierda... - dije mirando la barrita de color blanco, que ahora era de color rojo por la poca vida que me quedaba.

- ¡Sí! - grité cuando acabe de rematar al jefe final.- ¡Toma ya!

- ¿Como has echo eso? - dijo la voz de Ben en mi oreja.

- ¡Ahhhh! - dije gritando, suelte el mando en el suelo y di un bote. - ¡Joder Ben!

Me giré y vi que su cara estaba roja, segundos después estaba partiéndose de risa, con una mano en la barriga y apoyándose con la otra en el sofá.

- Te vas a enterar - dije levantandome del sofá. Fui hacia él, le cogí del cuello, le miré a los ojos, y le besé.

Ben dejo de reír instantáneamente. Y me siguió el beso. Me puso sus brazos por detrás de la espalda.

Le apreté hacia mi cuerpo, y empuje su cabeza hacia mi, Ben abrió la boca para que pudiera meter mi lengua. Le pase la lengua por sus labios y luego por dentro de su boca, lentamente, abrí y cerré mis labios, formando una beso apasionado. Le mordi el labio, y seguidamente Ben gimió. Me separe de él.

- Ahora quien ríe - le dije susurrando en sus labios. Le di un beso corto en los labios y le miré a los ojos, él acercó su cara a la mía y apoyo su frente en mi frente. Ben me sonrió. Y mi corazón empezó a latir mas fuerte. Paso su dedo por mis labios, mientras de formaba una sonrisa en mi boca.

- ¿Cuanto tiempo llevabas allí? - pregunté a Ben.

Ben se aparto lentamente de mi. Cogió mis manos con las suyas y las apretó fuerte. Puse mi mano en su mejilla y la acaricié. Me acerque a él y le abracé, mi oreja quedaba en su pecho.

- Mucho tiempo. - me dijo en respuesta. - ¿Por?

- ¿Has visto todo lo que hacía? - pregunta te avergonzada. Sentí su cabeza moverse de arriba a bajo. Y escuche su risa. - ¡Que vergüenza!

- Eres adorable cuando juegas a videojuegos - dijo Ben acariciandome el pelo de arriba a bajo.

- No es verdad - dije riendome.

- Sí lo es - dijo Ben como respuesta.

Le miré a los ojos.

- Yo no soy adorable, soy un demonio - dije mientras me hacía los cuernos para parecer un demonio, hice una risa malvada.

- Lo que decía, eres adorable - dijo Ben acariciandome la mejilla.

Le sonreí y volví a mi posición en su pecho.  Su corazón latía rápido. Latía muy rápido. Y latía a la vez que el mío.

- Shey... - dijo Ben de repente nervioso - Yo... Yo... Pues... Quería preguntarte algo...

- Claro Ben, dime - dije sonriendole, le acaricié su pelo y me puse a su altura.

- Shey... Pues verás... yo quería saber... Si... Vale allá voy, Sheila Sykes, ¿Quieres ser mi novia?

Hermana Sykes (Ben Bruce)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora