18. Alianzas secretas

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No les debe resultar una sorpresa, queridos lectores, el revuelo que causó la reaparición de Cristina Daaé sana, salva y completa. Aunque quienes la habían visto notaban que aquel candor e inocencia que caracterizaban a la muchacha, ahora lucían más bien apagadas.

Tampoco a Canelle debió sorprenderle... pero ciertamente le resultó algo molesto todo el barullo en el Palacio justo la mañana en que sufría la primera resaca de su vida.


No estaba muy segura de cómo, pero había terminado bebiéndose media cava de una taberna de mala muerte junto con Cyrano, y recordaba a medias que el dolor en gran parte de su cuerpo fue causado por una riña con un quinteto de borrachos que se habían burlado de la famosa nariz. Sonrió muy a su pesar: salir victoriosa de una pelea dos contra cinco, aunque los habían echado de la taberna (de cualquier manera no pensaba volver) ahora le dolía casi todo lo que le puede doler a alguien físicamente, le resultaba satisfactorio.

-¡Y a puño limpio, además!- exclamó entusiasmada aunque nadie le prestaba atención. Obviamente, una tramoyista golpeada y con resaca no tenía la menor importancia con los acontecimientos de esta mañana.


-Escandalosas notas habían acompañado el regreso de la naciente estrella Cristina Daaé, creando confusión y asombro entre escépticos y creyentes de El Fantasma de la Ópera. Por eso yo, Fleur Blanche, he sido llamada a investigar esta misteriosa reaparición.

-Meow.

-¿Pero era necesario traer a Ayesha, Gabriel?

-¡Claro! Ésta es su casa.

Fleur no había dejado de reclamarle a Gabriel por haber traído al gato. Si le daba la gana volver con su amo, no habría contacto la noche del viernes... y acababa de gastar una fortuna en salmón y caviar.

-¡Además nadie te llamó para investigar! ¡Te enteraste de pura casualidad hace un rato en la pastelería de San Honorato!

-Valiosísimo lugar. Es una pena que esté a punto de la quiebra.


-¿Cómo se ha atrevido a regresar?

-¡Signora! ¡Cristina nunca jamás podrá suplantarle!

-Sólo son un montón de notas de un loco manipulador.

-¿Quién le daría importancia a un sujeto que firma como F.O.?

Fleur y Gabriel se ocultaron para mirar pasar a los administradores, al Vizconde de Chagny y a La Carlota.

-¡Ningún fanfarrón nos dará órdenes!

-Y ningún fanfarrón es más valioso que usted.

-¡Cantará la noche del viernes!

-Esta amenaza de presentar a Cristina Daaé en un papel que le corresponde a usted para evitar una "terrible desgracia" es insignificante.


Uno de las misteriosas notas fue rota en cuatro pedazos y lanzada al suelo, cuando todos los airados reclamos se volvieron casi inaudibles, Fleur se acercó a recogerlo.

-Hum... nuestro Fantasma es muy sugestivo.- Observó Fleur al juntar las piezas de la nota y leerla rápidamente.

-Creo que debemos buscar a alguien más que sepa sobre este espectro, y creo saber quién.

-¿Iremos de nuevo con el jefe de coros loco?

-No, con nuestra vieja conocida la tramoyista acusada de complicidad de asesinato.

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