Capítulo 9

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Kate

—¿Falta mucho?

—¡¿Puedes por favor callarte de una vez?!
¡Por todas es la milésima vez que lo preguntas!—le respondió a Jake un poco fastidiada.

Llevaban horas de horas en sus kleindragles, después del amistoso encuentro con los Nekroi.
Todos tenían más que claro que no podían parar en algún pueblo cercano, debían alejarse todo lo que pudieran, considerando lo rápido que podían moverse los nekroi.

—Oigan... ¿tienen idea de cuánto f...

—¡YA CÁLLATE JAKE! Es suficiente, si vuelves a abrir el pico juro que te mato.—Ingrid sonaba irritada y tal vez un poco cansada, pero Kate entendía por qué. No habían dormido mucho el día anterior y hasta ella estaba mareada de volar por tantas horas.

—¿Abrir el pico? ¿Pero qué clase de insulto es ese?

—Ughhh, ¡todos ustedes nunca entienden nada! ¿Qué les cuesta saber las cosas del mundo normal?—Ingrid estaba llegando a su límite de paciencia.

—A ver, no nos metas a todos en esto, señorita "Lo sé todo por que vengo de Tërragârd".—Adam habló tratando de calmar la situación.

—¡Cállate idiota!

—¡Hey cálmate chica! Él no te está haciendo nada para que lo trates así, y solo yo lo puedo llamar idiota.—salió al rescate, defendiendo a su novio.

—Oigan...—La voz de Angela fue apenas audible entre el griterío que se estaba llevando a cabo.

—Kate no tienes porqué defenderme, yo puedo solo.—Al parecer el cansancio también se le metió a Adam en la cabeza, haciendo que Kate empezara a enfurecerse.

—¿Disculpa? Perdón por defenderte.—Respondió de la forma más sarcástica posible.

—Chicos creo que...—volvió a hablar la chica del cabello blanco, intentado otra vez obtener la atención de todos. Pero todos la seguían ignorando.

—Uuuy ¿problemas en el paraíso?—preguntó Jake con una sonrisa, como si todo le causara gracia.

—Ja, que irónico ¿no Jake?—volvió a meterse Ingrid, empeorando las cosas—Porque creo que a ya sabes quién le gustaría saber que...

—Vuelves a mencionar eso una vez más y juro que no sales viva.—Los ojos de Jake brillaron con tal intensidad que hizo que Kate se cuestionará a qué se refería la grosera chica de los ojos ámbar.

—¡CHICOS! ¡BASTA!—gritó Angela ya desesperada de que se pasaran peleando todo el camino.

Todos se callaron y se dieron cuenta que sus kleindragels estaban descendiendo, ya habían llegado y no se habían percatado de ello.
Estaban en un pueblo y como no podía faltar... era aún más raro que el anterior.

—Chicos, bienvenidos a Dällöl.

***

Lo primero que hicieron apenas desmontaron a sus pájaros-dragón, fue dividirse en grupos.
Ella se juntó con Adam, esperando que pudieran ir los dos solos, pero como Jake no soportaba a Ingrid se fue con Angela, dejándoles a la chica con ellos.

A Kate no le caía mal Ingrid, de hecho su actitud grosera, le recordaba un poco a como solía ser antes de Adam.
Agarró la mano del rubio mientras avanzaban recordando lo que había pasado en el último año. Desde que usó el 'Espíritu Dragón' los 'flashbacks' no volvieron, y no podía estar más feliz por ello.

Sí, había tenido que pagar un gran precio... Perdió a su hermana, y las cicatrices de sus tiempos como esclava aún permanecían. Pero a veces la única forma de avanzar en el futuro es dejando el pasado atrás. Eso lo entendió cuando su hermana murió defendiéndola, gracias a ello pudo usar el espíritu dragón y proteger a sus amigos.

"Shey murió como una heroína y eso es lo que importa."

—¿Estás bien?—Adam la miró con sus ojos verdes cargados de preocupación.

—Solo estaba pensando, no te preocupes.—Besó su mejilla y sonrío asegurándole que estaba bien.

—Dejen eso para después—Ingrid rodó los ojos.—¿Qué se supone que estamos buscando? Este pueblo parece más vacío que una bolsa de Doritos.

Kate no sabia que eran los Doritos, pero ignoró a Ingrid mirando alrededor. El pueblo era pequeño y solo se veían como máximo seis personas caminado, de las cuales la mayoría eran ancianos.

Se acercaron a uno para pedir indicaciones y saber si había algún lugar donde pudieran alojarse. Sorpresivamente, este fue amable y les dijo que había unas cuantas casas desocupadas girando a la derecha.

Siguieron sus instrucciones y llegaron a un lugar aún más despoblado.
De las pocas casas que había, una llamó la atención de Kate. Esta era negra a diferencia del resto y tenía un misterioso signo colgado que decía "Fürø".
A lo que tradujo como "Futuro"

—Entremos—Dijo Kate señalando la casa, empezando a caminar hacia ella.

—¿Estás loca? Apuesto a que nos encontramos a otra señora loca como Jertrudis.—Miró a Ingrid tratando de averiguar quién era Jertrudis, estaba apunto de responderle pero Adam se le adelantó.

—No seas tan amargada, si Kate quiere ir. Iremos...

Empujaron la puerta ya que no había ningún timbre y al tocar nadie respondió. Inmediatamente estuvieron dentro, las luces se apagaron dejándolos a oscuras. "¿Qué Dhångës?"

—¿Hay alguien aquí?—Se encendió una luz azul, dándole un brillo espectral a la sala. La luz iluminaba a una señora que aparentaba unos sesenta años, estaba sentada en un escritorio y en sus manos sujetaba la típica bola de cristal de las adivinas.

—Se los dije.—Murmuró Ingrid a lo que Kate respondió mirándola de mala forma.

—chicas... creo que este lugar me da un poco de miedo—dijo Adam pegado a la puerta, así en cualquier momento podría salir.

—No seas idiota Adam.—susurró cogiendo su mano y atrayéndolo hacia ella.

—Los estaba esperando...—La señora abrió sus ojos mirándolos fijamente.

"Bueno no fijamente porque al parecer es ciega, pero entonces ¿cómo sabe que estamos aquí?"

Como si le leyera el pensamiento, Ingrid preguntó por ella.—¿A qué te refieres con que nos estabas esperando?

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Lamento el cap tan corto, prometo que el siguiente será más largo.

Doble pregunta del día:
1 ¿Cómo describirían mi personalidad?

2 ¿Cómo creen que soy fisicamente?



El Secreto de los DragonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora