Narra Hoseok
Fer y Celeste, ambas eran muy distintas. Obviamente a Celeste la odiaba. Esa niña caprichosa y mimada.
Y Fer, Fer le hacía frente a lo que sea.
Pero era mi mejor amiga y estaba con ese imbécil.
Y yo siempre ahí cuidandola, aunque a veces no me sentía necesario. Ya que sus peleas con el idiota eran normalmente mi culpa.
Normalmente, eran por que yo lo había golpeado, normalmente el me respondia los golpes y Fer se enojaba con ambos. No se como la contentaba el, pero yo le llevaba chocolate con leche de su cafetería favorita, una película y mi sincera disculpa.
A cambio recibía un morete nuevo, pero eso me gustaba, ella no tardaba en perdonarme. Por más hijo de . . . Que yo me comportará con su novio o con ella. Debía de dejar de pensar en eso. ¿Que hacia pensando en Celeste en primer lugar.
-Maldito estré. . .
-¡No Papá!
Ese grito lo reconocería donde esa, muchas veces iban dirigidos a mi. Me escondí detrás de la pared, no quería ser parte de una pelea familiar.
-¡Si lo sé!
-¡Hija por favor!
-¡No! ¡Ya basta!
-¡ESTA DECIDIDO Y NO NECESITO TU OPINIÓN!
-Pero yo. . .
-¡Nos vemos en la cena de esta noche!
Oí pasos fuertes viniendo hacia mi, camine un poco hacia atrás y volví, no quería que se enterasen que andaba de Fisgón.
-Buenos días.
Susurre a penas al señor que pasó por mi lado. Me echó un vistazo despectivo, hizo una señal con su cabeza y siguió su apurado camino.
Seguí mis pasos, entonces la ví allí sentada en el piso aferrada a sus rodillas. Vaya, la niña caprichosa estaba mal.
-Oye Azul. Levantate el ensayo ya empezará.
-Soy. . . Ce. . . Celeste.
-¿Tienes algo?
-No te interesa.
-Lo sé. Pero podría ayudarte. Además que te ves fea llorando.
-¿Tú que sabes de belleza?
-Tushe nena. Vamos ven.
La jale de ambas manos para hacerla parar. Limpie con mis pulgares sus mejillas, le di mi sonrisa más sincera y la abracé. No quería hacerlo, sólo recordé como de pequeño mi madre me daba abrazos para reconfortarme. Ella se resistió unos segundos después se aferró a mi polera y comenzó a llorar en silencio. Alguien debía sostenerla.
-No creas que esto cambia algo.
Dijo ella entre sollozos.
-No lo creería posible.
Dije sonríendo, creó que estoy completamente loco o enfermó. Si, estoy enfermo.
-Entremos. Se hace tarde.
Narra __________
-Bueno Estudiantes. Sabemos que están aquí por distintas cosas. Tengo una lista y pasaran al frente cuando diga su nombre.
Estaba muy nerviosa. En nuestra presentación Jin y Yo habíamos echo una mezcla entre clasico y contemporáneo. Salió muy bien. Pero en ese momento yo tenía a Jin, para apoyarme, pero, ahora me sentía algo triste y sola. Esa chica me tenía mal. ¿Como es que Nam se repuso tan rápido? Claro no esperaba que cumpliera la promesa de esperarme. Pero lo quería conmigo. Como mi amigo. El chico que le ponía sobrenombres ridículos a los maestros, sólo para hacerme reír.
-Señorita _______ por favor muestre su talento.
-Oh. Si.
Pase adelante y la cara de burla de Rosario me alteró. Necesitaba ser mejor que ella. Aunque en verdad no sabía en que área entraría ella.
Baile lo mejor que pude, Jin me había enseñado un poco de todo.
-Muy Bien.
Dijo aplaudiendo el maestro.
-Me encantó. La mezcla es buena, tan sólo arreglaremos algunos saltos que hace y será perfecto, sientese.
-Joven Jin.
El se paró simplemente, algo lo tenía molesto. El baile le salió algo rudo para una canción tan sencilla. Pero al maestro le parecían brillar los ojos.
-Joven Kim, mis respetos. Ustedes dos son una pareja nata, por favor sigan asi y sientense juntos más a la derecha serán la primera pareja.
Jin sonrió se veía tan apuesto. Vino hacia mi, me ofreció su mano la tome me ayudó a pararme y me besó.
-Ahora entiendo su buena química en baile. Sigan asi.
Pensé se molestaría, pero parecía alegrarle. En cambio Nam tenía la mirada triste. "Perdóname Nam"
Narra Celeste
Bueno tenía un punto, armar parejas para actuar como un equipo.
Pero ¿por que me tenía que tocar con el más tarado de todos?
-Soy Tae y ¿tu?
-Celeste.
-Bien, bonito nombre.
-Gracias.
-Mira, si trabajaremos en equipo debemos llevarnos bien. Haré todo lo posible, para no molestarte. . .
-Sólo mantente callado y no te me acerques demasiado ¿bien?
-Bien. Pero será imposible. Canto y baile. Es demasiado tiempo juntos. . .
-Lo sé. Tengo tiempo de sobre. . .
-Para ahí, yo tengo una novia y esta justo allá.
El chico raro señaló a la chica que estaba junto a Hoseok. Genial al menos tendría a alguien con novio. . . ¿Qué? ¡Nooooooooooooo estoy loca!
-Y el chico junto a ella es su mejor amigo y no me agrada que pasen tiempo juntos.
-¿Por que si es su amigo?
-Por. . .
-Hola.
La chica se había parado junto al tal Tae y me veía como si quisiera matarme.
-Sólo te diré esto una vez. No te le acerques demasiado, es mio. Si lo haces te mató ¿entendiste?
-Ni loca lo haría, el esta loco. Tu también.
-Gracias, pero sigue pensando asi. Por que se donde vives y como discutes con tu familia. Si desapareces se darían cuenta en meses.
-¿Como. . .?
-Como lo sé no importa. Asi que, ya sabes.
Beso a su novio en la mejilla y se fue.
-¿No es un amor?
-Lo es. Pero esta loca.
-No, sólo es muy celosa. Igual que yo. Por eso nos amamos.
Estaba loca y este chico estaba aún peor por estar con ella y no tenerle miedo.
Dios mío estaba rodeada.
Al ver a la chica toda feliz junto a Hoseok, me di cuenta que era algo que yo también quería, alguien que sintiera celos por mi y también algún amigo que me defendiera de los demás. Eso quería, pero no confiaba lo suficiente y me sentía vulnerable ante las emociones. No quería entregar aún mi corazón.
Ni en amistad y menos amor.
No quiero nada. Supongo que aún no.
O nadie especial a llegado para mi.
