Capítulo 1

3.5K 239 4
                                    


Hoy, como cada día, me despierto apenas a las 6 am., abro mis ojos dejando que se acostumbren a la luz que perciben..

Aparto las sabanas o eso creo, hasta que me levanto de la cama, pero, al intentar empezar a caminar tropecé ya que la tela, maldita al parecer, se había enredado en mi pierna, ¡Vaya manera de iniciar el primer día de clases! Literalmente se me pegaron las sábanas.

Luego de desatarme caminé hacia mi closet con pesar, busqué algo para ponerme y aun adormilada me dirigí al baño. ¿Alguna vez han intentado caminar con los ojos cerrados por tanto sueño que cargan? Pues lo acabo de probar y no es muy lindo, he chocado con cada cosa frente a mi, mi dedito chiquito del pie ya no aguanta otro porrazo contra algo más.

Tomé una ducha de unos 10 minutos. Me enjaboné, lavé mi cabello y enjuagué. Al terminar cerré el grifo y tomé dos toallas, sequé mi cuerpo y seguido envolví mi cabello en una toalla. Caminé hasta el lavamanos donde había dejado mi ropa y me golpeé mentalmente al ver la ropa que mi subconsciente había elegido.
Había tomado un top a cuadros rojos y negros y un pantalón de pijama.

Regresé hasta mi habitación y elegí alguna otra cosa.

Me maquillo un poco, solo lo necesario para cubrir lo poco que había dormido por estar leyendo hasta tarde

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Me maquillo un poco, solo lo necesario para cubrir lo poco que había dormido por estar leyendo hasta tarde. Dejo mi larga cabellera rubial secar por si solo, tomo mi teléfono y mochila y bajo a desayunar.

Al llegar mamá se encontraba sirviendo el desayuno junto Ana.

-Buenos días mamá- le digo a mi madre mientras salto al último escalón como niña pequeña.

-Buenos días, oye ¿y tus hermanas?- cuando estaba apunto de responder las reinas de Roma bajaron...

-Buenos días mamá - dijeron ambas en coro.

Rodé los ojos y me limité a ayudar a servir el desayuno.  Tocino, tostadas, zumo de naranja y frutas. 

Cuando terminamos de desayunar. Nos despedimos de mamá y tomamos rumbo al instituto, solo contábamos con 6 minutos para llegar.

Cada una tomó su auto y puso marcha a la cárcel alias tortura para adolescentes. Y llegué a tiempo y el profesor no me dejo fuera de su clase y no me envió a la dirección. ¿A quién quiero engañar? al querer tomar un atajo casi atropello a un policía que acababa de salir de una tienda de donas con 3 cajas de ellas y con mi extraordinaria suerte iba acompañado de una señora mayor quién al intentar disculparme, por el susto que le causé, me aporreó ya que al dirigirme al policía y pedirle que por favor no me arrestara y que lamentaba mucho casi matar de un infarto a su abuela la señora me pegó con su bolso alegando ser era su madre, y si, me multó.

Finalmente llegué 20 minutos atrasada y me enviaron a la oficina del director donde tuve que esperar otros 20 minutos ya que el anciano pervertido "se encontraba en una reunión" con su secretaria.

La primera vez © [Silentium I]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora