Capítulo 39

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Me senté en una silla junto a la piscina mientras veía como los guardias y guaruras sacaban los colchones para lavarlos, y las cosas que habían sido rotas para reemplazarlas por nuevas.

Entrelacé mis manos apoyando mis codos en mis rodillas mientras pensaba.

Él no podía seguir vivo, yo lo maté, yo misma lo hice con mis propias manos, y no solo de me deshice él sino de cada persona en aquella casa, claro, con ayuda pero eso no cambia las cosas. Quemamos todo al salir.

Estaba segura de tres cosas.

1. Maté a Michael, y quemé su cuerpo así que la posibilidad de que fuese él era prácticamente nula.

2. Si es Michael quien está detrás de todo, estaba perdida y estaba segura de que vendría con sed de venganza.

3. Si viene por mí, no podré detenerlo.

-Señorita...- escuché la voz de Anderson y volteé a verlo, a su lado estaba Smith- descubrimos que era aquel olor en su habitación.- sacó algo de una bolsa de plástico que llevaba en su mano. Se trataba de la cabeza de un venado lleno de cosas asquerosas que no podía continuar viendo un segundo más.

-Quemala o algo.- le pedí y vi como se la entregó a Smith y me puse de pie empezando a caminar hasta la orilla de la piscina.

Respiré hondo.

-Tengo miedo.- dije en apenas un susurro pero sabia que me había escuchado cuando lo escuché suspirar.

-No dejaré que nada le pase.

Lo miré y tenía sus manos escondidas en sus bolsillos mientras me miraba serio.

Le sonreí y caminé hasta la casa. Estaba por subir a mi cuarto para ayudar un poco cuando sentí un olor extraño, aparte del que obvio salía de mi cuarto, luego escuché el timbre y caminé hasta la puerta.

Sabía quien era y me daba torticulis saber que siquiera lo vería.

Ithan

-Hola...- sonrió al verme pero no le respondí.- ok, yo... Yo sé que me comporté como un completo idiota, sé que te traté mal y no debí gritarte cuando tu solo querías ayudarme pero todo tiene una explicación.

-¿En serio?- arqueé una ceja.

Ahora todos se comportan como capullos pero luego siempre hay una explicación.

-Si, mira, las cosas que dije de mi padre yo... Lo siento. Durante toda mi vida he lidiado con personas que solo se acercan a mí por mi dinero y algo me decía que tu eras distinta y necesitaba confirmarlo o equivocarme.- respiró hondo.- sé que quizas exageré un poco y te lo digo mil veces más, lo siento y no debí hacer nada de lo que hice.

-Y supongo que aquí es donde te perdono...

-Eso me gustaría- sonrió un poco nervioso.

Negué y vi su cara de derrota pero entonces empecé a reír.

-Está bien. Empecemos de cero.- le extendí mi mano.- soy Samantha Colleman.

Sonrió y la aceptó.

-Soy Ithan Jones.

Luego de un rato Ithan se marchó, las habitaciones aún no estaban listas y para ser sinceros me daba pánico estar encerrada en mi cuarto así que ahora me encontraba sentada en el tejado mirando el bosque.

Si, papá había comprado una casa que estaba prácticamente en medio de la nada, tardábamos al menos 30 minutos en llegar a la ciudad y solía considerarlo relajante o incluso fantástico pero justo ahora me causaba terror, terror el no saber si había alguien entre los árboles, vigilandonos, viendo cada movimiento que hacemos o incluso si me estaban mirando en éste preciso momento... como él solía hacerlo.

La primera vez © [Silentium I]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora