5 años después.
Ted.
Corro como un loco por los pasillos del hospital pero sin dejar de sonreír como estúpido. Hoy nace mi hijo. Cuando nos enteramos de que Lucia estaba embarazada nos tomó por sorpresa, estábamos en una fiesta de la empresa y mi esposa se desvaneció en pleno salón de baile, cuando la lleve al hospital no me pude poner mas feliz por la noticia.
Flashback.
— ¿Que pasa, doctor? ¿Que tiene mi esposa?— pregunto preocupado.
No dejo de sostener la mano de mi esposa quien esta aun recostada en la camilla con todo vestido de fiesta.
— No es nada grave, señor Grey.— sonríe.— Felicidades. Su esposa esta embarazada.
¿Que? No puedo responder, estoy mudo. ¿Embarazada?
— Ted...— mi esposa me sacude un poco. Cuando vuelvo en si. El doctor ya no esta.— Juro que me he cuidado.— susurra y yo frunzo el ceño.— ¿Estas molesto?— pregunta con miedo.
— ¿Que? ¡No!— sonrio y mis ojos se cristalizan. Mierda me estoy volviendo un sentimental.— Estoy feliz, es la noticia mas hermosa que he sabido.— me acerco y la beso.— Seremos padres otra vez.— río y ella sonríe por primera vez después de lo que pasó. — ¡Un hermano para Liz!— digo efusivo y la vuelvo a besar. Acaricio su vientre plano.— Hola...soy papá, estoy muy feliz que estés con nosotros. Te esperaremos muy ansiosos. Todavía no te conozco y ya te amo. Ya quiero tenerte en mis brazos.
El doctor entra en la habitación diciendo que le hará un ecógrafo para ver si el bebe esta bien.
Fin del flashback.
Cuando llego al pasillo de maternidad, encuentro a mis padres ahí.
— Mamá.— me acerco.— ¿Donde esta?— pregunto desesperado.
— Esta en la sala de operaciones.— me dice con una pequeña sonrisa.— Ve. Tu esposa te necesita.— sonríe una vez mas y besa mi mejilla. Miro a papá unos segundos y luego sin decir nada corro con mi esposa.
Una enfermera me detiene y me dice que tengo que colocarme el traje para poder entrar, cuando ya estoy listo corro al lado de mi esposa. Esta vez dará parto natural y creo que eso es lo que mas desesperado me tiene. Le preguntaron si quería cesaría o parto natural a lo que ella decidio hacerlo por ella misma. No estaba de acuerdo, pero no iba a contradecirle a una embarazada. Ya me paso con Elizabeth y no termino nada bien.
— Ted.— susurra Lucia llena de sudor.
— Aquí estoy, mi amor.— beso sus labios por un momento.
— Por fin.— sonríe con los ojos llenos de lágrimas.
— Si cariño, por fin estará con nosotros.
— Tengo miedo.— su voz tiembla y por un momento me siento culpable por hacerla pasar por esto.
— No tienes porque, cariño. Estoy contigo.— sus uñas presionan mis manos cuando una nueva contracción llega pero no me importa en este momento.
— Duele.— susurra solloza.
— Todo valdrá la pena. Nuestro hijo va a nacer.— le digo con cariño y ella sonríe.
— Si. Es lo mejor de todo.— el doctor llama nuestra atención y yo me pongo tenso.— No te pongas así, Ted. Me trasmites tu miedo.— me relajo porque no quiero que ella tenga miedo.
Cuando el doctor le dice a Lucía que puje ella lo hace, veo sus ganas y a mi me entran los nervios. Tranquilo Grey. Lucia sigue cada indicación del doctor. Lo hace cada vez mas fuerte. Se ve cansada.