𝗔𝗴𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗜𝗻𝗳𝗶𝗹𝘁𝗿𝗮𝗱𝗮 / ʲᵃᵐᵉˢ ᵐᵃˢˡᵒʷ

Capítulo 13 | Fired

Narra _______

¿Por qué? Me preguntaba a mi misma. ¿Por qué no eran capaces de resolver sus problemas sin golpes ni peleas? Aunque, analizándolo un rato me di cuenta de algo: ¡Son hombres! 

Era de imaginarse que se pelearían por una chica, es decir, por mi. 

Baje la mirada y suspire. Carlos había golpeado bastante fuerte a James, lo había noqueado de un golpe. Y pensar que casi me golpea a mi, solo por sus celos... Y James, era un héroe, me había salvado a mi dejando que el golpe le llegara a él.

Levante la mirada cuando la enfermera me llamo, había estado esperando para poder entrar a verlo desde hace unas horas, en las que había recibido un par de noticias buenas y malas de parte del director que luego le contaría a James.

Finalmente entre siguiendo los pasos de la enfermera, y lo mire.

Ahí estaba él, tan perfecto como siempre a pesar de sus notables heridas. Porque, a pesar de solo 'seguirle el juego' por el plan, tenia que aceptar que este chico es guapo.

En su rostro pude darme cuenta de que parecía algo estresado, y hasta fastidiado. ¿Pero quien no lo estaría estando en la enfermería? Pero al verme su rostro se ilumino y una sonrisa apareció en sus labios, le devolví la sonrisa.

Lo estaba logrando, ya le gustaba, solo tenia que seguir con esto unos días más. Atraparé a Henderson y se lo presumiré a Redmond tal y como él hace luego de resolver algún caso.

Me acerque hasta quedar a su lado, nadie hablaba solo intercambiábamos miradas mientras la enfermera hacia su trabajo. 

Cuando finalmente termino salio de la habitación, y por fin estuve a solas con James. Necesitaba contarle lo que me había dicho el director. Pero en cuanto abrí la boca la volví a cerrar, el mismísimo director entro en la sala.

—Director: puede retirarse señorita Ryan -asentí y en contra de mi voluntad salí de aquella habitación. 

Otro suspiro de mi parte. James suspendido... Carlos sin posibilidades de acercarse a menos de 100 metros de la universidad. No se si sentirme libre y feliz, o triste y abandonada. 

No tendría a James para seguir adelantándome con el plan, perdería tiempo valioso. Necesitaba idear algo para acabar con el Caso Henderson lo mas pronto posible, porque, a pesar de estar bastante adelantada con el plan tenia que terminarlo de una vez, ya han pasado tres años desde que empezó todo, y aun no lo atrapo.

Mi teléfono comenzó a sonar, y no dude en contestar.

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(Horas más tarde...)

¿Como se habían enterado? Ese no era mi principal problema, pero estaba en el top 10.

La Agencia sabia sobre la pelea de Carlos y James, y como consecuencia yo quede sin asistente. Carlos quedo despedido, si, así de duro eran en esta Agencia... Todo sea por proteger nuestras identidades de espías.

¿Qué haría ahora? Sin él fracasare. Eramos geniales trabajando juntos, no por nada yo era la mejor espía de la agencia.

Me senté en la silla frente al gran escritorio de mi gran oficina, la cual nunca uso. Me recosté del espaldar de la silla y eche la cabeza hacia atrás, mirando al techo intentando pensar las maneras de resolver todos mis problemas actuales. 

Cerré mis ojos aun metida en mis pensamientos... una voz me hizo sobresaltar. Abrí mis ojos de golpe y la mire.

—_______: ¿Brooks?

Alexa Brooks, la eficaz asistente de mi jefe, el Sr. Belt. Era una chica tímida, siempre concentrada en su trabajo y a pesar de ser una chica bastante agradable no habíamos cruzado muchas palabras.

—Alexa: señorita Park, lamento la molestia. Solo venia a avisarle que yo seré su asistente mientras buscan a un reemplazo.   

—_______: ¿Qué? Pero, el Sr. Belt... -no me dejo continuar.

—Alexa: el Sr. Belt no estará en la Agencia por un tiempo, y me pidió venir a suplir a Pena como su asistente, Sr. Park.

—_______: ¿Qué? ¿El Sr. Belt dijo eso? -ella asintió-. Le debo de agradecer por eso... -dije más para mi misma que para ella.- Cuando hable con él por favor dele las gracias de mi parte, cuando regrese se las daré personalmente.

—Alexa: por supuesto, Sr. Park. Yo... iré a arreglar mis cosas en el viejo lugar de Pena. -dijo tímidamente. Asentí y ella salio de mi oficina.

Tome mi bolso y camine hasta la puerta, deseando salir a dar un paseo. Ya había resuelto un problema, faltaba otro. Hoy pensaría en las maneras de resolverlo.

Cuando me dispuse a salir, alguien entro imposibilitando mi salida de aquel lugar. Me quede paralizada al verlo. Me alegra ser buena actriz. 

En su rostro podían verse a la perfección todas las heridas. Había quedado peor que James, o eso pienso yo. Un ojo morado, labio roto, camisa casi por completo destrozada... en cambio James, apenas si se notaban algunos moretones.

El moreno se acerco a paso lento a mi, hasta estar a centímetros de distancia.

—Carlos: tu y yo necesitamos hablar.

—_______: no, hazme el favor de irte ahora mismo. Tu ya no trabajas aquí. -dije con frialdad.  

—Carlos: no, _______. No me iré hasta saber que estas a salvo.

—_______: sé cuidarme sola. No entiendo a lo que te refieres. 

—Carlos: sabes cuidarte físicamente, pero él te lastimara, te usara y luego romperá tu corazón.

—_______: mira, Carlos, -hice una pausa.- si el hace eso o no, es problema mio no tuyo. Tu ya no eres mi amigo, eso se acabo, Pena. Retírate de mi oficina ahora mismo.

—Carlos: TN_____ ¿Qué paso con nuestra amistad? ¿La tiraras por la borda solo por tu obsesión por ese niño mimado? -bufe y me cruce de brazos.

—_______: si, Carlos... ¡Lo amo tanto! -exclame con sarcasmo.- Como siempre mezclo mis sentimientos con el trabajo, no como tu. -continué.

—Carlos: como quieras, pero cuando busques consuelo... -lo interrumpí.

—_______: ¿Qué? ¿Qué no lo busque contigo? ¿Cuando tu me haz consolado? 

—Carlos: yo... -suspiro bajando la mirada.- Jamas me imagine que fueras tan fácil. Nunca me aceptaste a mi ¿Por qué? ¿Por qué soy moreno y bajo? ¿Por qué no soy el prototipo de hombre perfecto? Nunca se paso por mi mente el pensamiento de que fueras una mujer tan fácil, hasta ahora, -quise responderle, insultarlo, pero no me dejo siquiera abrir la boca.- Me voy. -dijo antes de desaparecer tras la puerta.