𝗔𝗴𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗜𝗻𝗳𝗶𝗹𝘁𝗿𝗮𝗱𝗮 / ʲᵃᵐᵉˢ ᵐᵃˢˡᵒʷ

Capítulo 29 | Atrapado

Jadee, paralizada, sudando frió y aterrada. No tengo escapatoria. Estábamos perdidos... todo el esfuerzo en este caso, para acabar así, de esta manera de la que no me siento orgullosa. No moví un musculo, ni mucho menos aparte mi mirada de los ojos verdes del rubio. Su sonrisa era de satisfacción, su rostro mostraba una expresión de locura, que francamente me aterraba.

- Ke-Kendall, por favor. So-solo no le hagas nada. -dije refiriéndome al castaño que se encontraba a mi lado.- Él no tiene nada que ver en esto. -aclare con seriedad, aunque mi voz temblo.

- ¿Segura que no tiene nada que ver en esto? -trague saliva.- Ambos sabemos muy bien la verdad, Park. ¿Sera que... lo dejo vivir? -hizo un gesto tomándose la barbilla, como si estuviera pensando.- No lo sé... ¿Aunque sabes? No me provoca dejar a un posible soplón suelto.

- _____, ¿Qué esta pasando? -pregunto a mi lado.- Kendall, baja el arma... Por favor díganme que sucede. -ni me inmute ante su voz, solo intente ignorarlo. Lagrimas silenciosas deslizándose por mis mejillas... y un fuerte dolor donde se encontraba mi corazón. Él moriría sino hacia nada.

- Schmidt, haré todo lo que quieras o necesites. Cualquier cosa, lo juro... Ahora déjalo libre. -me tomo del brazo fuertemente, tirando de este hasta arrastrarme a su lado aun sin dejar de apuntarle a James con su calibre 25.

- Tu arm... -no lo deje terminar.

- No tengo nada. Y no te miento, no tienes que preocuparte. -suspire resignada.

- Espero no me mientas. -apretó el agarre en mi brazo. Dolía bastante, pero solo me limite a hacer una mueca de dolor.

- ¿¡Qué esta pasando!? ¡_____ por favor! -me miro con desesperación. Nuevamente ese nudo imposibilitandome el habla.

- Ja-James, solo no... no digas nada. -le rogué apenas en un susurro a penas audible.

- ¡No hables! -dijo colocando el arma a la altura de mi cabeza. Cerré los ojos, esperando mi fin...

¡BOOM! Un disparo y ahora nadie me sostenía. Solté un grito ahogado abriendo los ojos de golpe sobresaltada. ¿Una nueva pelea?

- ¡Josh! -celebre al verlo. Reaccione por fin, arrebatandole la pistola a Schmidt y apuntándole de la misma manera que él hizo conmigo- Ahora, -me aclare la garganta.- ¿En que estábamos, Kendall? -le sonreí hipotéticamente, él se mantuvo serio.

- ¡_____ aléjate! -en solo segundos Kendall me había hecho a un lado como si nada, y corría lejos de donde nos localizábamos Josh y yo.- ¡Se escapa! -corrí detrás de el rubio.

- ¡Eh, chico! -detuvieron a mi compañero, no me detuve, solo corrí todo lo que pude sin apartar la mirada de mi presa, que luchaba por escapar.

Un policia en la entrada. Maldije cuando me detuvo, a mi. No a nuestro original sospechoso, tuvo que detenerme a mi.

- ¡Necesito...! ¡Escapa! ¡Muévase! -me queje intentando apartarlo.

- No puedo dejarla pasar, señorita. -dijo prohibiendo mi salida, dándole ventaja a Schmidt. Gruñí impaciente.

- Oficial Banks, déjela pasar, es una de mis mejores agentes. -mi mirada se ilumino al ver a mi jefe. El oficial se hizo a un lado pareciendo inseguro de sus acciones. Cargue el arma para estar preparada, vacía... ¡No! No tenia municiones. Bufe. Observe con atención el cinturón del oficial, aquel aparato eléctrico era mas que suficiente... el taser [abajo explico que es "Taser" sino saben]. Sin pararme a pensarlo dos veces lo arranque de su cinturón y me dispuse a correr tan rápido como mis piernas me dejaran.

No lo veía ya... Esto es por culpa del oficial, pero, aun así no me rendiré. No puedo rendirme. Atrapare a Kendall Schmidt, y lo dejare tras las rejas. Me detuve jadeando... ¿A dónde pudo haber ido? ¿Dónde se escondió? Me tense y actué rápidamente, al escuchar otra respiración agitada. Estaba en aquel callejón, sin salida. No podía correr riesgos... dispare la pistola eléctrica.

Un desgarrador grito de dolor, y luego el sonido de su cuerpo impactando con el suelo.

Era la primera vez que sentía culpa, lastima hacia un... un simple asesino. Mis piernas flanqueaban, mis manos temblaban ante la descarga que salio de la pistola eléctrica. Caí sobre mis rodillas sin poseer control de mi propio cuerpo. Mi respiración era irregular ante el maratón que recorrí para poder llegar a esto. No podía creerlo... Kendall, indefenso, desmayado... inconsciente ante mis ojos. El peligroso Kendall Schmidt, ¿Lo atrape?

Me levante con dificultad, mis piernas aun temblaban y casi jadeaba por aire. No deje de apuntarle con manos temblorosas. No se movió, solo se quedo ahí... tirado en el suelo. Algo indecisa sobre que hacer lo gire, con miedo y sin dejar de apuntarle. Su rostro con algunos raspones por el golpe, sus ojos verdes cerrados... Trague saliva, aun sin creérmelo.

- ¡Schmidt! ¡T-te juro que si estas actuando te...! -nada. Solo permanecía ahí sin moverse y con los ojos cerrados. Mi pulso se acelero mas si es que eso era posible. ¿¡Lo habré matado!? N-no... No moví un musculo, no estaba muerto, su pecho subía y bajaba rápidamente. Pero no despertaba.- Esta desmayado... -acepte en un suspiro.

Su mano se movió levemente. Me levante de su lado exaltada, apuntándole. Murmuro algo. Mi corazón se encogió al entender lo que musito.

- Log... -dijo apenas. Me sente a su lado nuevamente.

"Hasta los asesinos tienen sentimientos"...
Pensé.

- ¡_____! -me sobresalte al oír como mi compañero pronunciaba mi nombre. Corrió hasta mi lado y se lanzo al suelo, esposando al inconsciente rubio que permanecía a mi lado. Luego de esta acción, se giro a verme sorprendido.- ¿Có-cómo...? ¡Lo hiciste! -me abrazo. No dije nada, no le correspondí el abrazo pero aun así no lo rechace.

¿Qué acababa de suceder?

**Taser, un arma de electrochoque o pistola eléctrica. Ni yo lo sabia estuve buscando como loca el arma este.

xMariu