Vampiros Mellizos (Corrigiendo)

cap 21

1 semana después

Estoy en la cascada y veo a Fer a unos metros de distancia esta de espalda y le iba a gritar, cuando él voltea y comienza a correr para donde yo estoy, entonces yo también comienzo a correr para darle un abrazo y de pronto chocamos con una pared invisible entonces me levanto del piso y comienzo a golpear la pared invisible que no me deja estar con Fer.

-¡¡Fer!! - grito.

-Amor tranquila. - me dice y el también comienza a golpear la pared pero sin ningún efecto.

-Vamos a golpear entre los dos. - me dice y los dos comenzamos a golpear, entonces golpeamos y ya no estaba la pared como si fuera desaparecido, luego los dos nos vamos a abrazar nos jalan para atrás quedando lejos, me vuelvo a levantar y voy a hacia donde esta él, le voy a dar la mano y me vuelven a jalar, él iba a hacer lo mismo que yo, pero también lo jalan para atrás, es como si no quieren que estemos juntos.

-Fer, te quiero. - le digo.

-Yo también te quiero, pero no te rindas hay que luchar por estar juntos, así el viento este en nuestra contra... - me dice.

*********

Me despierto sobresaltada y me llevo la mano a mi corazón que está acelerado, veo a mi lado y es temprano porque Triz sigue dormida y el sol no está muy fuerte debe de ser como las 7 o 8 de la mañana, me levanto y me acuerdo que hoy es domingo y voy a salir con Fer... Pero porque soñé eso, sólo debe de ser una pesadilla, no tengo que preocuparme, nadie nos puede separar, esta semana todo fue bien salía todo el tiempo con Fer a pesar de las malas caras de mi padre, Adrián habló con mi padre y el por fin acepto a Triz, ya tenemos todas nuestras cosas aquí, es raro no haces nada, todo lo hacen por ti, por una parte es bien no tenemos que hacer nada, pero por otra parte no estoy acostumbrada a esto. Busco mi toalla y voy al baño, me doy una ducha para despejar mi mente de esa pesadilla, luego me cepillo los dientes, salgo y voy al closet que parece más como una habitación es muy grande, busco un shorts negro, una camisa holgada morada y mis conversé negras, a mi tía no le gusta cómo me visto, pero yo no le hago caso, yo prefiero los colores oscuros y no los colores claros de princesa, después salgo de mi habitación y voy a la cocina.

-Buenos días. - le digo a los cocineros.

-Buenos días princesa. - me dice Cecy una de las cocineras con las que me llevo bien.

-Cecy, tu sabes que no me gusta que me digas princesa, dime Adri - le digo.

-Ok, señorita Adri. - me dice por lo menos no me dice princesa.

-¿Ya está listo el desayuno? - le pregunto.

-Vaya al comedor, haya están sus padres, también esperando el desayuno ahora se lo llevamos. - me dice Cecy.

-Ok Cecy, gracias. - le digo, me voy al comedor y ahí están mis padres.

-Buenos días mamá y papá. - les digo.

-Buenos días, hija. - me dicen al unísono y yo me siento al lado de mi madre.

-¿Cómo están? - pregunto.

-Bien hija ¿y tu ? - me pregunta mi madre con una sonrisa y yo le sonrió la extrañaba mucho.

-Bien ¿y hoy vas a salir con el lobo ese? - me pregunta mi padre.

-Sí. - le digo con una sonrisa.

-Deberías de alejarte de ese chico, no es bueno para ti. - me dice.

-Papá dejemos esto para después sí, no quiero pelear y además todavía ni siquiera he desayunado. - le digo.

-Pero luego tendremos esta conversación. - me dice.