12.-Radioactivo

18 3 0
                                    

Solo quedaban unos pocos días para que al fin entrara a la universidad, las cosas mejoraban, pero, Silene había tenido la grandiosa idea de hacer una fiesta. En realidad, solo era pretexto para que los chicos vinieran a la casa y ella pudiera ver a Dante, ya que hoy no tocaban. Pero el rumor se había extendido y ahora la casa estaba repleta de gente que no conocía. 

-Vamos no te cortes, la fiesta esta divertida. -Era Francis. -

-En realidad a los únicos que conozco son ustedes. Y es un poco incómodo que allá tanta gente. -Me queje un poco con una de las pocas personas que conocía. -

-Pero es tu fiesta. -Dijo girándose un poco a mí, con lo que le permitía el sillón. -

-Bueno en realidad, no lo parece. Preferiría estar en otro lado. -Dije recordando mis tardes con Frank. - por cierto no ha venido Redmond?

-Dijo que estaría trabajando.

-Pero hoy no tenía turno en la cafetería. -Recordé. -

-Es otro de sus trabajos. -Comento como si nada. -

-¿Cuantos tiene? -La curiosidad había hablado por mí-

-Bueno tiene tres, pero, además, de vez en cuando hace algunos trabajos simples de uno o dos días.

-¿Para qué quiere tantos trabajos? -De nuevo la curiosidad pudo más conmigo. -

-Redmond trabaja desde los trece años por lo que se, cuando llegaron al país solo eran él y su madre y siempre la ayudo. Entro a la universidad, pero al final se tuvo que salir porque no podía pagarla, aunque él siempre te dirá que fue porque no era para él, después entro a clases de música estuvo en muchas clases y lugares. La verdad no se en que se ha gastado tanto dinero si las clases las dejo hace mucho y su padrastro ahora se encarga de su madre. Tal vez solo no quiere depender de los demás.

-Bueno me hace tener otra imagen de Redmond.

-¿Qué dicen de mí? -Una voz tras nosotros nos hizo brincar en nuestros asientos. Era obvio que Redmond estaba escuchando. -

-Pensamos que no vendrías, Francis dijo que tenías trabajo. -Explique un poco nerviosa. -

-Pude salir antes, por cierto ¿quiénes son todas estas personas?

-Son amigos de alguien. -Contesto Francis. -

-¿Dónde está tu habitación? -Me miro con las manos en los bolsillos y la mirada en el balcón, había gente bailando fuera.-

-¿Quieres ir a mi habitación?

-Oh señorita pensaba que una dama no podía invitar a muchachos a su recamara, la gente podría pensar mal de usted, pero para que su dignidad no se pierda aceptare. -Tomo mi mano y comenzó a caminar, no sabía si reír o golpearlo por lo que había dicho. Era obvio que conocía donde dormía, Silene los habría invitado muchas veces a su casa. -

Mi recamara estaba cerrada, después de haber encontrado a una pareja besándose en mi cama, cuando quise cambiarme la blusa llena de alguna sustancia rara, los corrí y puse un letrero donde decía "ocupado". Red me lanzo una mirada y yo solo abrí la puerta.

No había nadie como esperaba.

-¿Para qué querías venir?

-Sabes tu cuarto no es como lo pensaba. -Tomo de uno de los estantes mi tasa con la foto de la forma del estado de Texas. -

-¿Por qué pensabas en mi cuarto?

-Bueno conocí a la chica, la que era compañera de Silene. Cuando supe que dormías aquí fue raro imaginar el cuarto diferente. -Siguió viendo mis estantes. Hasta que tomo mi taza del estado de San Francisco. - ¿Coleccionas tasas de los estados?

Sonreí mirando mis pies.

-La primera vez que vine al país me quede en Texas, después me mude a San francisco no colecciono tazas de los lugares a los que viajo si no de los que me marcan. Tenía algunas de México, pero se quedaron en casa de mi tío tenía miedo que se rompieran en el viaje.

-¿Piensas conseguir una de aquí?

-Dije que no conseguía tazas de los lugares a los que viajo sino de los que me marcan. Cuando pase algo aquí entonces comprare una taza.

-Bueno sé que la fiesta es para ti -Cambio de tema mientras se giraba para verme. - no sabía si tendría que traer algún regalo, pero ten. -Me extendió un paquetito azul con un moño rosa. - espero te guste. -Dijo con una pequeña sonrisa, raro en el por qué no sonreía. -

-¿Puedo abrirlo? -pregunte contenta por la sorpresa.-

Redmond se acercó a mí, ambos estábamos en medio de la habitación, la puerta cerrada y el ruido de la fiesta se escuchaba muy lejano.

-Es algo que pensé te podría servir.

Era un pequeño estuche con cinco plumas decoradas con pequeñas muñequitas vestidas de enfermeras en la parte superior de la pluma. A pesar de que era algo infantil era muy bonito.

-Es hermoso. -Dije tomando una. -

-Tu eres hermosa.

No me había fijado en lo cerca que estábamos, el ambiente en el que nos encontrábamos. Era justo el momento, el momento de salir corriendo porque no podía soportar que algo pasara. Mis pies no respondían y la cercanía con Redmond era cada vez más, nuestros labios se tocaron un poco y fue cuando reaccione. Me aleje de él como si fuera radioactivo, como si su toque fuera hacer que en el interior de mi todo explotara. 

-No...-susurre suplicando porque, esto no podía pasar. Redmond tal vez me estaba tomando el pelo porque sabía que en realidad no le gustaba.-


No sé si se fijaron pero hice unos cambios después de la metida de pata que hice x.x Troye Sivan es Francis y Pepe Toth es Kurt.

x Troye Sivan es Francis y Pepe Toth es Kurt

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mi reflejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora