Stripped Fur ||Narry|| Ziam||AU||

Capítulo 13: Las artes orales de Malik para lograr lo que quiere

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Era difícil caminar con la nieve, y Liam ya se suponía que con los retrasos que había habido para salir del edificio no lograría llegar al metro.

Un coche negro frenó junto a él.

-¡Liam! Sube, nieva mucho.

Liam se giró y le dedicó al señor Malik la mirada más gélida de su repertorio.

-Gracias pero me arreglo –dijo peleando contra las placas de hielo para no resbalar.

-Por favor, sube. Además tenemos que hablar.

-No te importó que saliera de tu cama de madrugada y bajo cero, no pretendas que hoy te importa.

Zayn encajó el golpe. No es que pudiera defenderse o negarlo.

-Por favor...

-He dicho que n...

Liam apenas tuvo tiempo a reaccionar, Zayn le había distraído y no había visto esa placa de hielo. Y ahora estaba en el suelo. Y dolía como su puta madre.

-¡Liam!

Zayn bajó del coche y trató de ayudarle a levantarse, pero cuando lo hizo el tobillo le falló a Liam.

-Mierda... creo que tengo un esguince.

-Sube al puto coche, vamos.

Liam se sentó pesadamente en los asientos de cuero traseros del coche. Zayn se puso a su lado.

-Vamos a mi casa, llamaré al médico de mi familia.

-No hace falta que te tomes tantas molestias por un empleado.

-Liam, para. Lo siento. De verdad, lo siento mucho. Cuando estemos tranquilos, te lo explicaré todo.

-Explícalo ahora.

-Tengo ciertos problemas al dormir. Hago ruidos, tengo pesadillas y me muevo mucho...

-Pudiste haberlo dicho.

-Me da inseguridad ese tema.

Liam volvió a mirar a ese hombre de aspecto duro.

-¿Inseguridad, tú?

-Sí, inseguridad.

Liam no habló en todo el resto del camino al apartamento de Zayn. El pie le estaba doliendo muchísimo y tuvo que apoyarse en él para caminar. Zayn le acomodó en el sofá y llamó a su médico.

El hombre llegó apurado por la nieve. Tras una observación y palpárselo levemente confirmó la impresión de que era un esguince.

-Debería guardar reposo, le voy a poner una venda ligera, no cargue pesos contra el pie en unos días, tome ibuprofeno si lo necesita y no cambie de forma estos días.

-¿Que no haga qué?

Zayn tosió y le dio la mano al doctor.

-Gracias, es que se llevó un golpe bastante feo.

-Mejor que no se mueva mucho estos días.

Zayn no pudo respirar tranquilo hasta que el hombre se fue. Cerró la puerta y con un mando a distancia encendió la chimenea. Luego se acercó a Liam.

-Zayn, ¿qué ha dicho acerca de cambiar de forma?

-No le hagas caso –dijo sentándose a su lado.

-Lo dijo tan serio que...

Zayn usó la medida desesperada del beso. Liam jadeó al sentir su lengua casi en la garganta.

-Aún no hemos hablado...

-Lo que tienes que hacer es olvidar el dolor, déjame ayudarte –Zayn le bajó la cremallera de los pantalones.

-Bueno, pero aún sigo un poco enfada...

Zayn agachó la cabeza, y se metió de una vez el pene en su boca. Liam se agarró al sofá y gimió al notar la presión del interior de su boca, la suavidad de sus labios y el roce de su barba contra la base de su pene.

-Pero menos enfadado –dijo al fin.

Zayn no le respondió. Siguió chupando con una asombrosa destreza, mientras con la mano derecha le acariciaba y estimulaba los testículos. Liam jadeó, y Zayn hizo presión con sus mejillas, sacándose el miembro muy despacio de la boca para comenzar a lamerle las bolas, sin dejar de atender su pene con caricias, usando el dedo pulgar para masajear la punta de la erección mientras le besaba allí abajo. Cuando lo consideró, devolvió la atención a su polla. Acarició la punta con los labios repetidas veces hasta que tomó la decisión de volver a meterla en su boca del todo. Uso la lengua para estimular a la vez que chupaba. Notó el pene de Liam vibrar fuerte contra su garganta y le mantuvo en su interior. Las vibraciones se convirtieron en espasmos con su corrida y sintió su boca llenarse de su líquido y bajar por su garganta. Levantó la cara con aún semen resbalando por sus labios.

-¿Más tranquilo?

Liam cerró los ojos tratando de respirar. Su respiración fue haciéndose lenta y Zayn le cubrió con la manta, sonriendo.

Niall había preparado la cena favorita de Alana. La niña aún estaba un poco impresionada por el susto. Harry (Bigotes, se repitió Niall a si mismo) lo notaba y la cuidaba, estaba acostado a su lado.

Después de bañarse y cenar, Niall puso el televisor y dejó a Alana acostarse en el sofá. Puso la película favorita de la niña, El Rey León, y la vieron juntos, con Harry entre ambos.

Cuando acabó la película Alana aún estaba despierta. Puso Barbie en el Castillo de Hielo y a mitad de la película la niña se durmió.

La levantó en brazos y la acostó. Después de arroparla, fue al baño. Y luego, a su cuarto.

Era la hora de acostarse y Alana dormiría al menos ocho horas.

Harry entró y le miró fijamente. Niall le mantuvo la mirada.

-¿Y si te transformas y cierras la puerta?