Estúpidos humanos

II

Mi móvil sonó de repente. Miré quien era, decía "Lobo Estúpido:)" Sonreí.

Yo.- Hola Velkan, ¿Qué pasó?

— Tienes que huir — susurró.

Yo.- ¿Por qué?

— Decebal... Te está buscando — Sonreí. Parece que olvide que Kyle estaba ahí, seguro vio mis colmillos.

Yo.- ¿Para?

— ¡¿Cómo que para qué?! — Seguía susurrando — ¡Para matarte!

Yo.- Vel... Ja, ja. No te preocupes, ya no estoy en Rumania.

— ¿Cómo?

Yo.- Lo que escuchaste.

— Pero... ¿Por qué no me dijiste nada?

Yo.- ¿Para qué? Da igual — Escuché que alguien lle quitó el móvil.

— ¡¿Dónde estás maldita zorra?!

Yo.- Hombre, Decebal. ¡Cuanto tiempo! ¿Te gustó el regalo que te deje? — Decebal es el líder de la manada de los hombres lobo. Yo he matado a los dos  líderes anteriores, los que son líderes siempre le quito la cabeza y la guardo como trofeo. Pero los que no lo son simplemente les quitó un colmillo o los dejó en el suelo para que los animales se los coman. Hace unos días, antes de venir a Estados Unidos, maté a la hermana de Decebal. Le quité la cabeza y las patas y las dejé en la casa de Decebal.

— ¡Juro que cuando te encuentre te voy a...!

Yo.- Sí, ya me sé tu discurso de memoria. Todo el tiempo me dices lo mismo. Sigo preguntándome como es que eres el líder si eres tan estúpido.

Kyle.- Eh... Neulai... Hay viene...

Yo.- Cállate. Estoy en una llamada muy importante.

— ¿Será porque fui el único sobreviviente? Fui el único lobo que no lograste matar. ¿Qué pasa pequeña? ¿Estás perdiendo tu fuerza? — Habló en tono burlón. Decebal ha sido mi mayor enemigo hace tiempo. Siempre que estoy a punto de matarlo sucede algo y no lo logró. Pero juro que el día que lo haga colgaré su cabeza en mi habitación y me haré un collar con sus colmillos.

Yo.- Es mejor que te calles si no quieres terminar como tu hermana. Además, no soy ninguna pequeña. Son sólo dos años de diferencia.

Razvan.- ¡Neulai! ¿Qué estás haciendo? — Colgué de inmediato — ¿Con quién hablabas?

Yo.- Con mi amiga, es que la extraño mucho.

Razvan.- Neulai, no puedes rechazar de esa manera a tu madre.

Yo.- No es mi madre. Nunca lo será. Mi madre murió y ella nunca podrá reemplazarla — Cuando dije que mi madre murió sentí un fuerte dolor en el estómago — ¡Ella sólo es una zorra que quiere qui...! — Sentí su palma de la mano sobre mi mejilla.

Razvan.- ¡No hables así de ella!

Yo.- ¡Yo habló de ella como quiera y no me importa que me pegues, hazlo las veces que quieras!

Kyle.- Eh... Yo... Yo mejor me voy... Mañana paso por mi bicicleta — Se fue corriendo. Yo volví a la casa directo a mi habitación. Me puse los auriculares y escuché música. Vi a mi padre entrar, pero al verme con los auriculares se fue.

Suspiré y me acosté en mi ataúd. La música se detuvo. Miré el móvil, otra vez Velkan.

— ¡Ni pienses que esto se va a quedar así! ¡Juro que te encontraré y te haré pagar la muerte de todos!