XXVIII

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Anteriormente

Neulai le enseñó a volar a Kyle. Él estaba muy nervioso, pero conforme pasaban los minutos se fue tranquilizando.

Ella le prometió que estaría siempre con él. Kyle se emocionó un poco, pensaba que ella se estaba declarando, pero en el fondo sabía que eso jamás pasaría. Son totalmente diferentes, Neulai jamás se enamoraría de un humanos.

Mientras tanto Ruxandra y Skender pensaban en cómo podían convencer a Neulai para que sigan siendo amigos. Pensaron que la mejor manera era usar a todos los demás "amigos" que también estaban con ella por interés...


Neulai

Días después

Todos estos días he tenido que fingir con Razvan. Fingir que me cae genial para que piense que la poción que me dio hizo efecto. Sé que no voy a durar mucho así, en cualquier momento me enojaré y le voy a reclamar. Por eso prefiero pasar todo el día fuera con Kyle y Traian. Son molestos, pero prefiero pasar tiempo con ellos que estar con Razvan.

He pensado en decirle a Kyle que me deje vivir con él el tiempo que me quede, pero Razvan seguramente sospecharía demasiado.

Traian.- ¡Feliz cumpleaños!

Yo.- ¿Qué?

Traian.- Hoy es tu cumpleaños, ¿no?

Yo.- No... Es mañana.

Traian.- Demonios... Pensé que era hoy...

Kyle.- ¿Qué harás mañana?

Yo.- En un rato me voy a Transilvania. Quiero ver a mis amigos.

Traian.- ¿Y tú Kyle?

Kyle.- Pues no sé. Supongo que nada. Realmente yo no suelo hacer fiestas ni nada parecido en mi cumpleaños. Antes quienes me hacían fiesta eran mis amigos, pero después de lo que paso no lo volví a festejar.

Traian.- ¿En serio? - asintió - Eso no puede ser. Te juro que yo te haré una fiesta espec... Bueno, te invitaré a algún lugar. A tomar algo o a bailar, porque realmente no tengo dinero para una fiesta... Además, también podría ser una noche de chicos. Aprovechando que ella no va a estar...

Yo.- Mejor busca algún lugar donde hagan carreras de autos. Seguro le encantará... Bueno, yo ya me voy. Tengo que conseguir dinero.

Los dejé solos. Fui a mi casa a buscar el dinero que había juntado para ir a Transilvania. Tenía muchas ganas a mis amigos. Sentía que había pasado una eternidad de que no los veía. También extrañaba poder volar sin tener que preocuparme de que alguien me vea. Correr por todos lados...

Horas después

Al fin había llegado a Transilvania. Me puso tan feliz bajar del avión. De alguna manera me sentía libre.

Fui lo más rápido que pude a la casa que vivíamos. Subí a la habitación que tenía y me quede ahí un buen rato. Tenía ese olor a sangre que tanto me gustaba. Todavía tenía algo de ropa, dibujos y tonterías ahí. Realmente extrañaba estar en esa habitación. Me traía buenos recuerdos.

Después fui al lugar donde siempre me juntaba con mis amigos. Antes de entrar puse escuchar que estaban ahí y escuché que mencionaron mi nombre.

Decidí quedarme fuera para escuchar lo que decían.

- ¿Estás segura?

Ruxandra.- Por supuesto - identifiqué de inmediato la voz de Ruxandra - Ella confía demasiado en ustedes. Seguramente los extrañará y vendrá mañana. Tienen que estar listos para que no se dé cuenta.

Estúpidos humanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora