Se encontraban en lo alto de una colina alejada de la ciudad, con unas vistas preciosas. Valeria e Ian estaban apoyados en el capó del coche. El cielo nocturno ya se había cernido sobre ellos y la ligera brisa primaveral mecía las hojas como si de un susurro se tratase. Ambos miraban al frente, hacía varios minutos que un silencio sepulcral había caído sobre ello tras haber dejado atrás la casa.
-¿Por qué estamos aquí?- habló tras un rato Valeria con voz ronca debido al llanto.
-Pensé que te vendría bien despejarte un poco- se encogió de hombros.
-¿Pero por qué aquí?- su nariz estaba roja al igual que sus ojos.
-Me gusta venir aquí cuando algo va mal, ver el paisaje nocturno y las estrellas es muy relajante.
-No me imaginaba que te gustaran esas cosas.
Ian rió débilmente.
-Tienes una idea muy equivocada acerca de mí- la miró de reojo mientras observaba el cielo nocturno.
Valeria agachó la cabeza en silencio.
-¿Estás mejor?
-La verdad es que no...- negó mientras trataba de retener las lágrimas, dejó que su melena cubriera su cara para que no la viese así- Toda mi vida...No puedo recordar nada de mi pasado... Y lo que me hace ver mi padre, que resulta que no es mi padre es la forma en la que me encontró- intentó que su voz no se elevara demasiado, Ian la observaba dolido- Toda mi vida es una mentira ¡Es una maldita mentira!
-Eso no es así...- murmuró Ian- Que tus padres te adoptaran es uno de los mayores gestos de amor que he podido comprobar. Que no sean tus padres biológicos no implican que no puedan serlo, han sido tu familia, Valeria.
-Lo sé...- sorbió por su nariz- Los quiero, pero saber que mi padre ha muerto...
-Duele.- finalizó él- Sé muy bien cómo te sientes, pequeña. Sé que quieres tirar al mundo por la borda y maldecir hasta quedarte sin voz, pero esa no es la solución.
-¿Sabes qué es lo que pienso?- preguntó retóricamente- Ojalá no me hubiese encontrado. Sólo traigo la desgracia a aquellos que me rodean.
Ian la tomó de los brazos e hizo que lo mirara.
-No digas eso,- dijo con dureza- no te quiero volver a escuchar decir esas palabras, ¿me has oído?
La abrazó, para después separarse para plantar un tierno beso en su frente.
-Gracias- murmuró Valeria.
Ian sonrió con ternura. Ambos continuaron observando las estrellas.
-A veces desearía que todo esto fuese un sueño- Ian la miró atento- despertar en mi casa con mis seres queridos, amigos, con todos mis recuerdos. No más monstruos, no más miedo...¿No querrías eso?
-No existe esa vida para nosotros- murmuró Ian.
-¿Cómo estás tan seguro?
-Porque intenté recuperarla y todo salió mal...- evitó mirarla- Seguro que ya lo sabrás por Sammy, pero yo no he sido siempre el chico que tienes ante ti. Antes era como tú, aplicado, estudioso... Me quedaba poco para terminar la carrera de medicina, pero todo se torció.
-¿Qué sucedió?- lo miró atenta.
-Lo sobrenatural te acaba encontrando. Y lo peor es que acabó con toda mi promoción el día en el que debía dar una charla para los nuevos alumnos. Eran unos chiquillos...
-No tuviste la culpa- puso su mano en su hombro para reconfortarlo.
-Me lo advirtieron, pero no escuché. Sólo quería salir de este infierno por una vez, parece que fui demasiado ambicioso.
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Fear Of The Dark
ParanormalOscuridad, ¿alguna vez os habéis preguntado por qué cuando somos pequeños nos aterra estar envueltos en ella? Valeria Grey, una joven de diecisiete años tiene a la oscuridad presente en su día a día. Vive continuamente la incertidumbre de no poder d...