Fear Of The Dark

Capítulo 25

La metió en el asiento trasero y cerró la puerta con fuerza.
El viaje transcurrió en silencio, Ian observó a Valeria a través del espejo retrovisor claramente furioso. Valeria rompió el contacto visual, Sam se giró hacia ella y le regaló una sonrisa triste que ella no pudo corresponder, se giró y dejó de mirarlos, sintió la mirada de Ian y suspiró cansada.

-Suéltalo...- dijo Valeria mirando por la ventana.

Ian resopló antes de hablar.

-¿Qué quieres que te diga?- preguntó de forma retórica- ¿Que debiste escucharme la primera vez que te dije que esta vida no era para ti? ¿Que debiste hacerme caso cuando te dije que regresaras a casa?- su tono se elevó.

-Soy cazadora, Ian, es mi trabajo- respondió de forma calmada.

Ian agarró el volante fuertemente hasta el punto de que sus nudillos se pusieron de color blanco.

-No, no eres una cazadora Valeria. ¡Sólo eres una maldita cría que no entiende que esta vida es demasiado peligrosa para ella!

-Ha sido mi primera cacería, Ian...

-¡Y mira cómo te ha ido!- calló un momento antes de volver a hablar- ¿Cuánto tiempo llevas entrenando?- preguntó de forma tranquila.

-Unas semanas...-respondió en voz queda.

-¿Qué? No te he oído.

-Unas semanas- dijo más alto.

Ian asintió frunciendo los labios hasta que sólo se formó una línea.

-Unas semanas...- repitió para después reír- ¡¿y te creías preparada?!- volvió a alzar el tono.

-¡Sí!- respondió de la misma forma.

-Ya lo he visto- respondió con una sonrisa falsa-¿En qué pensabas entrando ahí como una suicida?

-Vi algo, y quería saber qué era.

-Debiste haberte quedado en el coche.

-Yo se lo pedí a Jade.

-Ni me la menciones en este momento...- advirtió- La primera regla es no precipitarse y no bajar la guardia, y tú has mandado el reglamento a la basura.

-¡Creí que esa niña era una víctima! ¿No me digas que tú no hubieras caído?

Ian guardó silencio un momento.

-Podrías haber muerto...-dijo lo último dolido.

-Pero no lo he hecho.

-¡Porque conseguimos llegar a tiempo!- vociferó de nuevo enfrentándola con la mirada.

Valeria pudo ver en sus ojos verdes el dolor y la rabia que sentía, el dolor que le hubiese causado su muerte. Además de un arañazo que surcaba su mejilla, eso se lo había hecho Missy, estaba herido por su culpa.

-Lo siento...- susurró tratando de contener el llanto.

Ian respiró hondo y siguió mirando la carretera, intentando ignorar los malos pensamientos.

~ Presente ~

Valeria continuó golpeando el saco de boxeo mientras sollozaba de rabia, no paró hasta que notó un líquido caliente descender por sus manos.
Las miró para comprobar que sus nudillos estaban destrozados. Sintiéndose impotente pegó una patada al saco para después llevarse las manos a la cabeza.

Respiró hondo y soltó el aire lentamente, pestañeó varias veces hasta que las lágrimas desaparecieron. Se encaminó al baño para poder curarse los nudillos, se quitó la gasa donde tenía el zarpazo para cambiarla también ya que notaba que volvía a sangrar.