Orgullo vs Orgullo [Kaisoo]

Capítulo 25

Odie la semana de exámenes y esta vez con más razones que nunca. Antes por lo menos venía a suspender pero ahora... eso no era una opción.

Había tenido a Jongin metido en mi casa, obligándome a estudiar como chino, para alegría de mi madre. No paraba de decir lo orgullosa y feliz que estaba de que su hijo comenzara a estudiar y que el negro de arriba, el negro abajo, el negro esto, el negro lo otro... ¡Ah! Quería gritar pero lo más seguro es que haya acabado con un golpe en la cabeza.

Empezábamos con las pruebas de matemáticas... ¿He dicho que no me gustan las matemáticas? ¡Pues no me gustan! Las detesto y ellas a mí. Siempre me las arreglo para confundirme y hacerlo mal. ¿Tan complicadas son y yo soy muy idiota? Dios mío, dos malditas horas para un examen.

Después de comer del Lunes fue el examen de Inglés. ¿He dicho que no me gusta el Inglés? ¡Pues no me gusta! Tan complicado, tan raro, tan... inglés. ¿Por qué debo aprender un idioma que no utilizaré? Agh, maldito negro y sus ganas de llevarme a Estados Unidos. ¿Qué voy a hacer yo allá? Nada. Comer, si eso es lo que haré. Para ir a un Burger King no necesito el inglés. Con que me sepa los números puedo ir señalando el menú que quiero.

No es de Satán hacer dos exámenes en un día y menos aún haber estudiado para ellos. No recuerdo la última vez que había hecho algo tan seguro de mi mismo.

-No es para tanto, Kyungie. –Me había dicho Jongin en el cambio de clases.

Dejé caer la cabeza sobre mi mesa, agotado mentalmente de todo. Esto me pasa por estar tan desentrenado en eso de utilizar la cabeza.

-Quiero dormir.

-Después te invito a comer, solo si das todo de ti en esta semana.

-Te voy a pedir lo más caro que vea, negro.

Jongin se rió de esa forma que tanto me gustaba. Sí, él era una de las pocas cosas que me gustaban. Él no era una cosa. Él solo era él y creo que por eso... ¡Kyungsoo! ¡Concentración! No te desvíes y piensa en los exámenes que te quedan.

-¿Hoy estudiaremos?

-Mañana tenemos examen de historia así que repasaremos eso... Y si hay tiempo, también literatura.

Matadme. Ahora. Por favor. Que. Alguien. Acabe. Con. Mi. Agonía.

Y así pasaron los días. Entre libros y tinta y papel y... lo único bueno era que había descubierto que un Jongin profesor era muy atractivo. ¡Puedo permitirme desconcentrarme después de horas de memorizar! Y ese tipo de cosas no pueden ser pasadas por alto. Fin.

Lo único malo es que el Viernes llegué tarde a clases. Me quedé dormido después de haber estado entrenando para el examen de resistencia para la clase de deportes. Según Jongin tengo poco aguante. Soy un perezoso.

Bueno, al final el examen... fue un poema, pero de lo triste que era. Seguramente si que voy a suspender la estúpida clases y la que menos sirve para mi futuro. ¿Acaso me servirá de algo aguantar corriendo veinte minutos en la vida? Ni que fuera yo a dedicarme a ser corredor de esos. No que estuviera loco.

-¿Aún no te ha tocado? –Le pregunté a Jongin cuando pude volver a recuperar el aliento después de pasármela corriendo.

El negó con la cabeza y me invitó a sentarme a su lado para que descansara un poco más. Había terminado por fin y estaba feliz de mi mismo. Pero es jamás lo diré en voz alta.

-No sé si hará las pruebas a los que le quedan otro día o... debemos quedarnos.

-Con lo mala persona que es... seguramente de detendrá aquí.