-¡Minseok!
Me lancé encima de él, literalmente. Mi pobre hermano apenas le dio tiempo a reaccionar y, por la culpa de mi efusivo abrazo, casi nos vamos los dos al suelo. Menos mal que consiguió mantener el equilibrio y me tomó en brazos como cuando era niño y él me llevaba a la cama cada vez que estaba cansado.
-¿Cómo has estado, mi adorado Kyungsoo?
-Bien. Más que bien... ¡Dichoso los ojos que te ven!
-He terminado mis exámenes, por lo que vine a incordiar. –Comentó bajándome de entre sus brazos- ¿Cierto, mamá?
Mi madre en respuesta solo nos sonrió y nos acarició a ambos las mejillas. Siempre le gustó que fuéramos así de unidos y la verdad es que a mí, ver las relaciones de otros hermanos, ver lo mal que se llevan me resultaba chocante. Si todos tuvieran un Minseok como yo. Al parecer estaban preparando Bibimbap, ¡genial!
Aunque algo faltaba...
El timbre de la puerta hizo que recordara que era lo que faltaba en mi hogar ¡Mi Baekkie!
-¿Ha llegado tu hermano?
-Estoy yo... Ahh, ¿por qué me ignoras? Ni un ''hola'' me das. –Vale, ser adorable no era mi fuerte pero hice un intento de puchero.
Al parecer tan mal no me quedó ya que Baek sonrió y me pellizcó una de mis mejillas, no sin antes desordenar mi cabello.
Serán imaginaciones mías pero algunas veces pienso que a mi amigo le gusta mi hermano. Sí, sí, hombre con hombre. No es nada malo eso pero... es raro. Y asqueroso. Osea, mi hermano. Yo lo quiero mucho pero no me parece alguien atractivo y que tenga novias y mucho menos novio. Uy no.
-¿Me invitas a pasar o me quedaré aquí? –Preguntó dándome un empujón para que le dejara libre el camino.
Será cabrón...
-¡Oh! BaekHyun –Mi hermano hizo acto de presencia.
Y el susodicho se iluminó como un árbol de navidad ocasionando que mis pesquisas tengan más fundamento. Intentando mostrar mi descontento con la situación, me acerqué a ellos con los ojos entre cerrados y me quedé junto a mi hermano. Fui pasando mis brazos alrededor de su cuello y le puse una de mis piernas encima, dejándole claro a mi ''querido amigo'' que mi hermano era mío, de mi, no de tú.
Seguro que Minseok se dio cuenta ya que solo acarició mi cabello. Genial hermanito, eres mío y lo reconoces. Fuck yeah, BaekHyun.
-Cariño, ¿te quedarás a comer? –Mi madre siempre tan educada-. Soo, prepara la mesa cielo.
¿Puedo decir que no? ¡No! Así que más me vale apresurarme e ir a la cocina y colocar todo lo que necesitamos para comer. Mi mamá es muy especial cuando hay invitados en casa, ya que le gusta hacer sentir bien a los demás ¡Aw, tan linda!
Si mi clase no fuera una panda de monos, yo sería tal cual soy ¡UN AMOR!
La cena no tardó en salir. Echaba de menos la comida de mi hermano. Recuerdo vagamente como, cuando mi madre salía a trabajar y llegaba tarde, el cocinaba para ambos como si fuera otro amo de casa. Digamos que él es mi ejemplo a seguir. Siempre tan amable, tan cuidadoso, tan cuidadoso, tan atento. Tan adorablemente odioso.
-¿Cómo les ha ido en los estudios?
Mamá y sus preguntas sobre deberes y escuela y estrés y... ¡uff! Por suerte el inteligente de Minseok comenzó a hablar primero. Y como era de imaginar, todo perfecto. Nos contó que había hecho un bueno amigo en la universidad, al que mamá quiso conocer. Genial, la próxima semana tendríamos visita.
Baek también hizo mención de sus notas. Dejando claro que había algunas que le resultaban algo complicadas pero la misma escuela le recomendó que estudiará con un compañero que comprendiera las asignaturas y por ahora le estaba yendo bastante bien gracias a ello.
-¿Y a ti como te va, hijo?
Chan, chan, chaaaan. La temida pregunta y la que no quería responder.
-Bien.
Genial Kyungsoo, te ha temblado la voz y ahora te miran como si hubieras cometido un crimen. No me gusta estudiar, ¿qué tiene eso de malo? Y comenzó la charla de mi madre. Primero comenzó un sutil regaño por su parte, ya que tenía que mantener las formas por mi amigo aquí presenta ¡Ay, mi querido Baek! Para algo me has servido el día de hoy.
Lo que siguió después fue peor. O por Dios... sí que fue peor. Comenzaron a hablar de infancia. Desde que era bebé hasta que comencé la secundaria. Baekhyun no podía reírse más de mí porque se comportaba con mi madre presente.
¡Bendito timbre! Te amo, gracias por sonar en el momento justo.
Y, cómo alma que lleva al diablo, salí corriendo en dirección a la puerta, dejando que ellos se rían de a mi costa.
-Hola vecino. ¿Me has extrañado?
-Oye, negro. Acabo de verte, ¿no será que tú me extrañas?
Jongin se rió ¿He dicho ya que su risa me pone de los nervios? Uy, lo golpearía. Siento que él también se mofa de mí.
-No me has dicho que me largara o me callara. Comienzo a romper tu barrera.
¿Y ahora de qué barreras habla? Está loco.
-¿Hola?
Minseok se encontraba a mis espaldas, mirando curioso a Jongin que lo saludó con una sonrisa diferente a las demás. Era educada y sin rastro de burla. Era bonita... ¿en qué demonios pienso?
-Hola, soy amigo de Kyungie... ¿Usted?
-Minseok, su hermano ¿Por qué no invitas a pasar a tu amigo, Kyungie?
Mi cara en ese momento debió de ser un poema. ¿Mi querido hermano también me ha llamado de esa forma? Mátenme. Y encima la garrapata entraba en mi casa ¡El colmo!
Mi hermano presentó al negrito como si se conocieran de toda la vida. ¿Tan rápido se comienzan a llevar bien? ¿Era el único quién no lo soportaba? Seguramente, todo en la escuela parecían embrujados bajo una especia de hechizo que los hacían estar tan al pendiente de Jongin.
Y ahí estuvo mi madre, encantada también con el pequeño invitado. ¡Oh! ¿En serio? Sí, Kyungsoo. Algo falla contigo, eres el único que lo odia.
-¿Y cómo te va en la escuela, Jongin?
-Pues muy bien. Jamás había quedado primero en un examen pero este año parecer ser el mío. Y además, el cambio de escuela me ha sentado bien.
Tú síguemelo restregando, déjame mal enfrente de mi madre. Acabo de recordar por qué te odio: eres exasperante.
-¡Oh! Pues mi Kyungsoo está teniendo dificultades ¿No podrías ayudarlo a subir un poco sus notas?
...
Díganme que no he oído lo que he oído ¿¡Está hablando en serio!? ¿Por qué siento que todo está yendo en mi contra?
Seguramente mi madre vio la expresión de mi cara ya que en seguida se cruzó de brazos en una clara actitud de que no se podía discutir con ella. Lo había decidido.
-Claro, con gusto lo ayudaré. Nos llevamos bien, ¿verdad, Kyungie?
Okey,ahora incluso Baek se reía del ridículo sobrenombre. Si no soporto a Don Perfecto en clase, tenerlo en casa todo el día sería peligroso. Seguramente acabaría por matarlo.
U&ME♡ -HyunA
ESTÁS LEYENDO
Orgullo vs Orgullo [Kaisoo]
Fiksi Penggemar¿Sabéis qué es lo que más odio? Que me quiten lo que es mío, lo que tanto me costó conseguir. ¿Pero qué es lo qué odio más? ¿Qué es lo que más me molesta por encima de todo? ¡Él! Sí, Kim Jongin... un negro poseedor de una sonrisa tan estúpidamente p...