Orgullo vs Orgullo [Kaisoo]

Capítulo 18

Nunca me había vestido tan rápido en mi vida, pero la adrenalina del momento solo me empujó a darme prisa en ello. Los abuelos de Jongin, benditos sean ellos, habían llegado por lo que todo calentón se había esfumado de la misma forma en la que vino. ¡Ah! ¿Qué estuvimos a punto de hacer? ¿En serio? ¿Ahora te das cuenta de a lo que llevaron tus acciones? De verdad, Kyungsoo, no tienes remedio.

-Quédate aquí. No hace falta que salgas, Kyungie.

-¿Cuántas veces voy a tener que decirte que no me llames así?

-El día en que deje de molestarte, me plantearé el dejar de llamarte así. Antes no.

Si yo tenía razón, solo lo hace para molestarme. De todas formas decidí no decir nada al respecto y simplemente me quedé callado en mi sitio y sin hacer movimientos que pudieran dar señales de que había otra persona en la habitación. No quería tener que mentir y preparar una excusa que seguro sonaría falsa pues lo sucedido hace unos minutos aún siguen presentes en mi cabeza. Jongin salió a recibir a sus abuelos y yo me quedé sentado en su cama intentando analizar todo lo que acababa de suceder así por las buenas. Me gustaría mantener el mismo auto control sobre mí mismo, ya que la Garrapata parecía de lo más tranquilo cuando salió por la puerta. Injusta la vida.

Me quedé mirando las cuatro paredes en las que estaba, parándome unos segundos a observar desde mi sitio, una foto pegada a la lámpara de noche que estaba sobre su desordenado escritorio. Eran él, Yeol y Taemin. Parecía que era mucho antes ya que, aparte de tener rostros más aniñados, parecían más cercanos, amigos. Sabía que ellos tres en algún momento había compartido amistad pero lo que ahora me preguntaba qué fue lo que los llevó a distanciarse de tal forma. Como si ese Taemin los odiara, bueno, en todo caso, ellos fueron quienes le hicieron algo, ¿no?

-Es de hace dos años la foto.

No me sobresalté cuando oí la voz de Jongin. No sé en qué momento entró de nuevo en el cuarto pero como no estaba haciendo nada malo, no había motivos para asustarse. Si no quería que viera la foto, no la hubiera puesto ahí.

-Es una foto divertida.

Volví a mirarlo y sin poder evitarlo, tomé su mano y lo obligué a sentarse a mí lado, sobre su cama, mientras entrelazaba nuestros dedos y nos sumíamos en el silencio. Ni siquiera se escuchaba lo que sucedía fuera de la habitación pero tampoco me incomodó el hecho de no hablar, es más, fue relajante ya que no había necesidad de decir nada, ni tenía tampoco nada más que hablarle y, creo, que a Jongin tampoco le importó.

Cuando volví a mi casa, no pude evitar el hecho de pasar de largo sin mirar en dirección hacia mi vecino. Las imágenes de Taemin y Baekhyun besándose de aquella manera no se iban de mi memoria, como si quisiesen torturarme con ello. ¿Quién te mandó a mirar? Nadie así que no tienes derecho a hablar. Sí, tienes razón.

No había nadie dentro de mi casa por lo que me sentí solo, bastante solo he de añadir y me fui a mi habitación a encerrarme y a acostarme. Mala idea... ¡Dios mío! ¿¡Qué mal hice para que tú me hagas esto!?

Salí corriendo, despavorido, hacia el salón en un intento de acallar los golpes en mi pared y los sonidos extraños que provenían de la otra habitación, de la otra casa. De Baekhyun. ¡No! ¡No! ¡No! Por lo menos dame la escapatoria a esto... ¡Mis audífonos! Salvado.

-Tuvieron que ponerse a hacer esas cosas ahora. Que asqueroso.

Te recuerdo que si no hubiera sido por la interrupción tú estarías así también pero una planta más abajo. ¡Te dije que no tenías derecho a opinar! Ya sé, pero igualmente. ¿No te da cosa? Sí, es mejor no oír. Si... ¡Jugar a la Play estaría mejor!