Capitulo 8: Fin de la pesadilla

1.4K 48 0
                                    

Bajé a cenar, obligándome a mí misma a no mirar a los chicos. Esta situación me dolía, y mucho. Vi que Cher, la única chica que me dirigía la palabra, estaba sentada sola, así que decidí ir con ella regalándole una sonrisa. One Direction estaba en la mesa de delante, y al verme, Zayn me guiñó un ojo. Cené apenas una manzana, no tenía hambre, estaba nerviosa por lo que teníamos que hacer mañana. Cuando parecía que mi última noche de martirio acabaría sin ninguna humillación, comenzó a sonar la banda sonora de Pearl Harbor, nuestra película. Liam me buscó con la mirada, pero yo tenía que ser fuerte, quedaba poco, así que dejé la bandeja y subí corriendo a mi habitación.

Me puse el pijama y cogí mi guitarra. Sentí que los chicos llegaron a su cuarto, así que decidí tocar fuerte, y cantar, para que ellos me escucharan, les necesitaba, y esto hacía que me sintiese mucho más cerca de ellos.

Me quedé dormida mientras leía, despertándome abrazada a mi copia de Orgullo y Prejuicio. Todo el mundo se había ido. No sabía dónde estaba Zayn, no le había visto en el desayuno y teníamos que empezar nuestra misión. De camino a la habitación, alguien me cogió del brazo y me arrastró hacia una habitación.

-¡Zayn!- le di un golpe en el brazo- me has hecho daño.

-Perdóname princesa, pero tenemos que empezar ya, hay muchas habitaciones que registrar.

-Y que haremos si lo encontramos- dije mordiéndome las uñas.

-Llamar directamente a Simon. Él sabrá qué hacer.

Quitamos las llaves al conserje sin que se diera cuenta. Fuimos habitación por habitación, registrando todo y dejándolo todo como estaba antes. Pasamos mucha risa, porque algunas estaban desordenadas, y como no, la patosa de Alejandra tropezó unas cuantas veces, y me caí otras más, menos cuando Zayn se daba cuenta y me cogía.

Llegamos a una de las habitaciones compartidas. Era de tres chicas que entraron de chiripa, que se lo tenían muy creído. Siempre estaban intentando acercarse a los chicos, pero estos pasaban. Una de ellas, era la que vi tonteando con Liam el otro día mientras comíamos. Registramos la habitación, tenían un montón de papeles de periódico tirados por el suelo, Zayn y yo nos miramos a la vez, puede que esa fuese la habitación que estábamos buscando.

-¡Mi ordenador!- corrí a cogerlo- Malditas furcias.

-Hay que seguir buscando, el diario tiene que estar por algún lado. ¡Ahí esta¡

-Están todas las fotos. Menos mal- Nos chocamos las manos y nos dimos un abrazo- Hacemos un buen equipo Malik.

-El mejor- me sonrió y volví a abrazarle.

Llamamos con el teléfono de la habitación a recepción, y pronto llego Simon. Dejamos todo en el lugar en el que nos lo encontramos. Llegó e inspeccionó el cuarto. Después, cogió el ordenador y el diario y se dirigió a mi habitación, para recoger los anónimos. Serían expulsadas inmediatamente.

-Se lo tengo que contar a Liam.

Cogí mi teléfono móvil, y abrí la conversación que tenía con Liam, donde todavía seguía ese "Déjame en paz" y todos sus mensajes pidiéndome que hablásemos. Ya había pasado más de una semana, esperaba no llegar tarde. Comencé a escribir:

-Jamás me he sentido tan mal, pero creeme cuando te digo, que todo esto tiene una explicación. Por favor, lee lo que te tengo que decir, y si después de eso quieres dejarme, lo entenderé. Durante esta semana he estado recibiendo amenazas anónimas de parte de algunas chicas de la casa. Me habían robado mi ordenador y mi cuaderno de canciones y recuerdos de Valentina, ya sabes lo importante que es para mí. Me pedían que me separase de ti Liam querían con todas sus fuerzas que rompiéramos, y que me alejase de los chicos. Querían hacer que abandonara el programa, e incluso me incitaron a volver a caer en esos problemas que creía tan olvidados. Gracias a Zayn las hemos descubierto. Me hubiese gustado podértelo haber contado antes, pero temía que te pasase algo. Solo quiero que sepas, que te amo...Eres lo mejor que me ha pasado en esta vida. Que tu sonrisa es mi motor diario, tus caricias mi consuelo, y tus besos mi gasolina... Espero no haber llegado tarde, te quiero, te necesito, necesito verte y abrazarte. Aquí, tu Ale.

No pude evitar que las lágrimas salieran de mis ojos, Zayn me empezó a acariciar el pelo.

-Tranquila-me susurró al oído- todo va a salir bien.

-¿Desde cuándo te han estado amenazando?- dijo Simon malhumorado- Nunca había pasado esto en este programa.

-Una semana y un par de días más- él asintió y se rascó la cabeza.

-Vete y descansa un rato, en cuanto lleguen, os haré llamar para que vengáis a mi despacho, esto no se va a quedar así.

Liam no me contestó el mensaje, miré su última conexión y sí, lo había leído. Fui a tomar un poco el aire, necesitaba pensar y aclarar mis ideas, pero de repente lo vi, echándose el pelo hacia un lado y mirándome. Había dejado a todos sus amigos en el centro de Londres por venir a verme, me regaló una de sus sonrisas que me dejaban sin respiración. Corrí hacia él y me cogió en brazos.

-Te quiero Ale, no sabes cómo te he echado de menos esta semana. - rozo mi nariz con la suya- Te quiero, te quiero, te quiero tanto.

-Perdonam....

Me calló con un beso, el mejor beso de todo el mundo. Como esa conexión única entre sus labios y los míos. Me bajo y me cogió las manos, me miró a los ojos y dijo:

-Sabía que algo iba mal... ¿Dónde están esas pu...?

-Ya está todo en manos de Simon. ¿Has dejado a tus amigos en Londres?

-No, están en el coche, quieren conocerte.

De repente salieron cinco chicos y dos chicas. Todos eran muy majos, pero se tenían que ir enseguida, reconocí a uno al instante, era el mejor amigo de Liam, Andy. Estuvieron un rato con nosotros hasta que Simon apareció por la puerta para llamarme.

-No dudes que si nos necesitas, aquí nos tienes tu también Alejandra

-Muchas gracias Andy, y a todos, me he alegrado mucho de conoceros, pero llamarme Ale.

Pasamos para adentro. Ya habían llegado las tres brujas, como las apodamos Zayn y yo. Simon las llamó para que fuesen a su despacho, donde ya estábamos Malik y yo. Había que verles las caras cuando entraron y nos vieron ahí sentados, con todo su material encima de la mesa. Empezaron a llorar, diciendo que no sabían lo que hacían, pero Simon no dio su brazo a torcer:

-Recoged vuestras cosas, estáis fueras de "The x Factor".

Todo había acabado, y los chicos me prepararon una fiesta sorpresa, se me abalanzaron encima diciéndome cuanto me querían y cuanto me habían echado de menos.

-Vamos señora perversión- dijo Harry dejando ver sus hoyuelos- Vamos a celebrar que por fin puedes estar con nosotros.

-No sé si os habéis dado cuenta, pero estamos pasando todas las galas- dijo Louis ilusionado- nos estamos acercando a la final.

-Parece que fue ayer cuando os vi llorando porque no pasasteis a la casa de los jueces por individual, pensé que se me venía el mundo encima, solo conocía a Niall y para mí es muy difícil abrirme a la gente. Gracias por haberme acogido a todas horas.

-¿Sabes qué? Creo que, aunque no seas miembro de One Direction, es como si lo fueras- dijo Zayn- Nos has ayudado más que nadie, no sé qué habríamos hecho sin ti.

-Yo sí que habría fallado sin vuestro apoyo, os habeis convertido en mi familia. La mía está a miles de km de distancia, y cuando me siento sola, os veo, y pienso... Estoy en casa.

Empezamos a llorar, no sé porque, quizá pensamos que en la próxima gala, podíamos ser expulsados cualquiera de nosotros, estábamos nominados junto a James, el sueño pronto se podía acabar.

Lover   ||Liam Payne||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora