Puse la radio para escuchar algo mientras pintábamos.
-Bueno Elena. ¿Has hablado más con los chicos?- Preguntó Lucía
-Sí, ayer hablé con todos.
-¿Vendrán a verte?- Preguntó Irene.
-Sí pero no se cuando.
-Oh my god. ¿Nos los presentarás?- Dijo Lucía ilusionada.
-No, no quiero que os acerqueis a ellos.- Dije de broma.
-Vamos, que sí.- Dijo Irene.
-Claro.- Dije.
-¿Has hablado con Louis?- Preguntó Lucía.
-No, no creo que nos volvamos a hablar.- Dije ocultando mi tristeza.
-Lo siento mucho Elena.- Dijo Irene acercándose a mi.
-No pasa nada.
Irene me pasó la brocha de pintura por toda la cara dejándome una línea morada.
-Yo te mato.- Dije corriendo hacia ella pasando el rodillo por todo su brazo.
-Lucía, tu no te salvas.- Dijo Irene. La pintó toda la frente. Acabamos todas con pintura por todo el cuerpo. Ya acabamos nuestro trozo de pared. Cuando íbamos a pintar la otra pared que quedaba vimos que no quedaba pintura en ningún bote.
-No queda pintura.- Dijo Lucía.
-¿En serio? No me había dado cuenta. Gracias por la aclaración.- Dije sarcásticamente.
Todas reímos.
Fui a avisar a mi padre, él dijo que ya no había más pintura. Que ya iríamos a comprar mas.
Volví a la habitación.
-Chicas, ¿no bañamos y así nos quitamos la pintura?
-Yo lo veo un poco difícil con la escayola.
-Y no hemos traído bañador.
-Lo del bañador no importa, os dejo uno. Lo de la escayola te ponemos una bolsa en la pierna y te mojamos con la manguera.
-Me parece bien.- Dijo Irene.
-A mí también.- Dijo Lucía.
-Voy a por los bañadores.
Ya nos habíamos puesto los bañadores. Seguíamos llenas de pintura. Salimos al patio y saqué una bolsa de basura grande, se la pusimos en la pierna a Lucía.
Encendí la manguera y enchufé a Irene, haciendo que gotease color morado por su cuerpo, la mojé bien para que se le quitase la pintura.
Estuvimos una hora en el patio mojándonos unas a otras.
Mi madre dio el aviso de que ibamos a comer dentro de poco, así que fuimos a vestirnos y a comer. Después de comer Lucía se tenía que ir. Irene se quedó conmigo. Fuimos a mi habitación.
-¿Qué va a pasar contigo y con Louis?
-Me intentaré olvidar de él.
-Lo tienes difícil si salen todos los días en la radio y tienes pósters por toda tu habitación.
-Los voy a quitar. Y bueno, no es olvidarme de él, es olvidarme de lo que pasó entre el y yo.
-Eso es complicado, lo sabes, ¿no?
-Sí, pero bueno. Dentro de un mes empezamos las clases, estaré más distraída.
-Supongo. Espero que nos toque en la misma clase.
-Sí, sería lo mejor.
-Ya ves.
-¿Quieres que mire en skype a ver si alguno de los chicos están conectados?
-Sí por favor.
Encendí el ordenador. Me metí en Skype y no había nadie.
-No están.
-Joo. ¡Mira se ha conectado alguien!
-Es Anna, ¿quieres hablar con ella? Es muy maja. Solo que hay que hablar en inglés.
-No hay problema, dale.
Le avisé para que pusiese la cámara y empezamos una video llamada.
-Hola Anna.
-Hola Elena y...
-Irene.- Dijo ella.-Encantada.
-Igualmente.- Dijo Anna.
-¿Sabes qué es de los chicos?
-Sí, están en una entrevista.
-Espero que no digan nada de nosotras.- Dije.
-¿Por qué no?- Me preguntó Irene.
-No me gustaría ser acosada.
-A mi tampoco, pero creo que no van a hablar del campamento.- Dijo Anna.
-Me gustaría ver la entrevista, hace tiempo que no veo nada de ellos.- Dijo Irene.
-Sale esta tarde. A las 6:00 de aquí.
-¿Pero sale en la tele?
-No, la suben a youtube.
-Ya la veré.
Estuvimos una hora hablando, Irene y Anna se llevaron muy bien. Irene ya se tenía que ir y colgamos. Nos despedimos y se fue.
