*Narra Anna*
Me levanté perezosamente para ir a clases. Fui al baño y ni rastro de sangre. Llevaba mas de una semana que no me venía la regla y me empezaba a preocupar. Me vestí y fui a desayunar. Cogí la mochila y fui hacia la casa de Jason para ir juntos a la universidad.
-Hola.- Dijo cuando salió de casa.
-Hola.- Respondí.
-¿Te pasa algo?
-No, nada. ¿Por?
-Vamos, Anna. Llevas unos días rara. ¿Que te pasa?
-Llevo una semana que no me ha venido la regla.
-Será un retraso.
-No creo, ya soy mayor para eso.
-¿Que quieres hacer?
-Una prueba de embarazo.
-¿Estás segura?- Yo asentí.- Háblalo primero con Zayn, él te tiene que ayudar en esto.
-Le llamaré esta tarde. Pero me da vergüenza comprarlo.
-Lo compro yo.
-¿No te importa?
-No, yo no soy tan tímido como tú.
-Muchas gracias.- Le di un abrazo. A veces estaba bien tener amigos atrevidos.
Llegamos a la puerta todavía quedaban cinco minutos para entrar. Grace llegó y los demás al rato. Estuvimos hablando animadamente. Jason me había alegrado el día.
Tras unas horas infernales de duro estudio, salimos a la calle.
-Me voy a comprar eso, luego te lo llevo a tu casa.
-Vale, gracias.- Le di un abrazo y él me dio un beso en la mejilla.
Me fui a mi casa y vi una nota en la entrada. «Hija, he ido a hablar con Harry de lo de tu amiga, no me esperes para comer, llegaré tarde» Mi padre había pasado mucho tiempo con Harry estudiando el caso, iban bastante bien. Estaría sola toda la tarde. Fui a comer, no tenía demasiada hambre, estaba demasiado nerviosa como para pensar en comer. Me hice un pequeño sandwitch y me fui al salón a ver la tele. En el momento sonó el timbre, fui a abrir y era Jason.
-¿Qué tal?- Me dijo.
-Mal.
-No te preocupes, seguro que no es nada. Será un retraso, ya está. Toma, hazte la prueba.- Me tendió una caja, asentí y fui al baño.
Me hice la prueba, en las instrucciones ponía que había que esperar para que saliese. Me puse la ropa y salí del baño.
-Toma, te dejo que lo mires tu. No quiero verlo.- Le dije.
Miró la prueba y su cara cambió drásticamente. Me miró a los ojos y me dijo:
-Tienes que llamar a Zayn.
-¿Ha dado positivo?
Él asintió ligeramente. Todo mi cuerpo se desplomó y caí al suelo. Estaba apoyada a la pared, con la cara entre las piernas. Lágrimas y más lágrimas caían de mis ojos.
-Anna, pase lo que pase tienes que ser fuerte.
No le contesté y seguí llorando, esto no podía ser verdad.
Oí como iba a mi habitación y volvía. Se sentó al lado mio. No le veía, pero le escuchaba.
-¿Zayn?... Soy Jason el amigo de Anna... Necesito que vengas... Sí, es urgente... Vale, hasta luego.