La Joven sin Voz | Negan (2017)

Capítulo 29. La Colonia Hilltop

"Un dolor... un dolor incesante comenzaría por apoderarse de mí a partir del día en que perdí mi mano izquierda. Era evidente que ya nada jamás volvería a ser lo mismo para mí. Un nuevo día había surgido y yo estaría ahí para luchar por superar cualquier barrera, pese a que ese dolor me atormentaría durante largo tiempo, un dolor fantasma del cual no puedo despegarme".

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La joven abrió los ojos con esfuerzo...

...y cuando lo hizo, se dio cuenta de que no había despertado en su habitación. Ésta se hallaba a sí misma mirando hacia los lados, examinando el lugar en busca de alguna clase de explicación que le hiciera comprender cuál era ahora el motivo por el cual se volvía a encontrar en la cama donde había reposado aquella vez que sufriera el desmayo. Por desgracia, no había nadie junto a ella que pudiera aclarar sus dudas; así permaneció durante los próximos quince minutos hasta que la puerta se abrió de repente. Le sorprendió ver que se trataba de Negan, el cual se adentraba en la sala en dirección hacia ella, mostrando una expresión de firme seriedad y acompañado por el doctor que la había atendido la última vez.

La muchacha, cuyo rostro se había vuelto más pálido, saludó con la mirada:

-¿Cómo te encuentras, jovencita?-preguntó el doctor con una tierna sonrisa.

-Sí, doctor... pero, ¿por qué estoy hoy aquí?-se limitó a preguntar a la vez que pudo percibir un ligero mareo.

Negan se sentó juntó a ella con evidente aire de preocupación, lo cual a ella le extrañó.

-¿Nadie me va a contestar?-arqueó una ceja.

-¿Es que acaso no recuerdas nada de lo que ha sucedido, Dasha?.-preguntó el doctor seriamente.

Ella negó con la cabeza convencida insistiendo en solucionar el enigma.

-¿No recuerdas haber sido mordida siquiera?

Ante tal respuesta, Dasha sintió como si le hubieran pegado una patada en todo el estómago y un nudo se apoderó de su garganta. Trató de asumir la pregunta y se esforzó por comprender la situación. A decir verdad, no supo por qué... pero empezó a notar un ligero cosquilleo procedente de su mano izquierda; sin embargo, cuando hizo ademán de levantar el brazo, se percató de que se le hacía muy pesado, le costaba levantarlo y por otra parte, su mano izquierda no respondía a las órdenes que le eran enviadas por su cerebro.

-Siento la mano izquierda muy dormida...

Negan abrió mucho los ojos ante la inesperada afirmación.

-¿Es eso posible, doctor?-preguntó éste anonadado como si le estuvieron tomando el pelo de malos modos.

-Es absolutamente normal, señor Negan.-respondió asintiendo con la cabeza.-Y será así durante largo tiempo. Se trata de un síndrome que de denomina 'Síndrome del Miembro Fantasma', esto es, la percepción de sensaciones de que un miembro amputado todavía está conectado al cuerpo y está funcionando con el resto de éste; el recuerdo de un dolor que ya no existe cuando una parte de tu cuerpo ha sido amputada...

-¿¡Qué!?-interrumpió ella incrédula tras escuchar la palabra "amputada". El doctor se aproximó a ella para lograr calmar su nerviosismo. Dasha, hallando la valentía suficiente para erguir su brazo, se percató de que se hallaba totalmente vendado por la parte de la muñeca y no parecía existir indicios de lo que se suponía que una vez había sido mano izquierda.

Sus mejillas se inundaron de abundantes lágrimas al descubrir lo sucedido. Aquello no podía ni debía ser real. ¿Qué es lo que haría ella a partir de ahora al no disponer de una de sus manos? 

-Dasha, debes procurar descansar...-aconsejó el doctor.-Negan se quedará cuidando de ti durante el tiempo en que necesites reposar.

El mismo asentía con la cabeza mostrando una preocupación poco habitual en él. Tanto la joven como él, se miraron a los ojos durante un largo instante, el cual le parecía eterno. Ella, entre lágrimas no podía borrar la tristeza que ahora yacía dibujada en su rostro y él, todavía transmitía un estado de shock recién experimentado y que tras varios años no pudo haber siquiera imaginado volver a revivir.