Capítulo 39 - Hablemos de Connor.

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Riley Bellamy.

—¿Estás bien?— le pregunté a Connor.

—Si, bien— él respondió serio mientras asentía con la mirada perdida.

—No me mientas.

Su mirada se fijo en mi y entonces sonrió levemente.

—Me siento... — guardó silencio y movió sus manos con brusquedad mientras hacía un ruido como "pff"

—Fue una pelea muy fuerte.

—Oh, como no tienes idea. Llegando a casa seguimos.

—¿Llegaron a algo?

—¿Acerca de quién de los dos se jode? No.

—Vaya forma de decirlo.

—Es la verdad. Yo no puedo obligarla a tener hijos si no los quiere, es su decisión y es su cuerpo. No voy a hacerlo con ella y ponerme un condón que yo mismo perforé con una chincheta. No quiero renunciar a tener hijos pero tampoco quiero renunciar a ella, la amo muchísimo como para hacer eso. No puedo dejarla, Riley. El estar sin ella podría matarme.

Él continuó hablando y yo me perdí. Porque este momento fue crucial para mi.

Cuando Jess y él terminaron, cuando él pasó tiempo conmigo, cuando yo me enamoré de él. Él hablaba de ella, lo hacía seguido y yo se lo pedía porque de cierta forma me gustaba escucharlo, me gustaba imaginar que algún día él podría expresarse así de mi pero no, no lo hizo y tampoco lo hará. Porque su persona es Jess, tal como él me dijo el día de su boda. Pero eso estaba bien para mi. Yo también había encontrado a alguien que me hiciera sentir así, ya había encontrado a mi persona Justo como él hizo hace bastantes años atrás.

—¿Qué harás?

—Por favor no me pidas una respuesta tu también porque ya se lo dije a Jess. No la tengo.

—Lo siento, no es algo fácil de decidir.

—No... Pero es una decisión que debo tomar— él se levantó de la silla, sacó su cartera y dejó más de lo necesario para pagar los cafés en la mesa.

—¿Te vas?

—Necesito estar bien con ella, no estoy cómodo de esta forma

—Suerte.

-Gracias- me abrazó un par de segundos y después besó mi frente.

Lo vi salir después de eso entonces me levanté, fui hasta el baño y decidí hacer una llamada.

-Hola, preciosa. ¿Cómo estás?

-¡Hola!- respondí con una amplia sonrisa -Estoy bien, gracias. ¿Tu qué tal?

-Estoy bien, mejor ahora que has decidido llamar.

-Quería decirte que te amo.

-Y yo te amo a ti- lo escuché reír suavemente y no pude evitar visualizar su hermoso rostro riendo, él lucía absolutamente adorable.

-También quería decirte que quiero casarme contigo.

-¿Si?

-Si.

-¿Estás usando mi anillo?

-No aún, pero cuando llegué lo haré. Quiero que tu me lo pongas.

-Considerarlo hecho.

-De acuerdo- asentí aunque él no pudiera verme.

-¿Qué pasó?

-Estaba con Connor, las cosas entre él y Jess se pusieron muy feas. Necesitaba una amiga y creo que puedo serlo.

Cuando la vida se complicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora