Ayúdame A Enamorarla [Bradley Steven Perry Y Tú] [Completa]

Capítulo 54: Un mes después.

—Yo... Se que quizás no ha pasado mucho tiempo—Lo miré confundida—Y te parecerá raro y toda la cosa.

—Habla ya, Jake ¿Me dejarás con la duda?

—Yo me preguntaba si..—Se rascó la nuca, completamente nervioso—Me preguntaba si...—Tomó aire—. ¿Quieres ser mi novia, _____?

—¿Qué?—Exclamé.

—No, nada. M-mejor olvidalo—Tartamudeo.

—Te escuché la primera vez, sólo quería confirmar que era cierto.

El suspiró—Lo es, te estoy pidiendo ser mi novia. Pero si no quieres, no hay problema—Atajó, antes de que yo pudiera decir algo, y sonrió algo decepcionado.

—Todavía no he dicho nada—Reí.

—¿Entonces es un sí?

Lo pensé por un momento, esto era lo que había estado esperando desde hace tres años atrás, pero... Mis sentimientos ya no son los mismos, o al menos eso creo. Todo sigue igual de confuso.

De reojo pude observar a Bradley y Sabrina, se veían tan felices juntos. Y para que negarlo, también muy bien. Hacen una bonita pareja.

Una bonita pareja que posiblemente no termine nunca.

¿Y yo qué? Si me sigo aferrando a mis sentimientos por Bradley, quedaré con el corazón roto y sola. Y si hay algo a lo que todos temen, es a un corazón roto.

¿Debía aceptar a Jake o no? ¿Esperaría por Bradley todo el tiempo posible? ¿Qué es exactamente lo que siento?

Aún así, con esas y un millón de dudas más, decidí darle mi respuesta.

—Si, Jake. Acepto ser tu novia.

[...]

Un mes pasó y todo iba de maravilla. Mi mala suerte al parecer se había acabado.

Ya las grabaciones habían comenzado, al igual que veía clases con tutores todas las tardes luego de llegar de estas. Los fines de semana salía con los chicos y en eso se resumía mi vida.

Hoy tenía el día libre, y los chicos decidieron venir a mi casa a charlar un rato, al llegar del instituto.

Veía televisión tranquila cuando el timbre sonó a eso de las tres y media, seguramente eran ellos.

Fui a abrir, y en efecto, lo eran, todos ellos aún utilizaban el uniforme—Aunque no tan prolijo como al salir de casa—. Y al verme me saludaron y entraron.

Violet, tan dramática como siempre se me lanzó encima a abrazarme—. Te extraño demasiado ¡Ya no tengo con quien hablar durante las clases a través del whatpaper!—Reí al escuchar el nombre que le habíamos dado hace algún tiempo a las notitas que nos pasábamos durante las clases, y Noah, Isaak y Angie exclamaron un "Oye" al unísono—Ay, es cierto. Cada vez que les escribo me ignoran.

—A mi nunca me has escrito—Noah levantó la mano.

—Ay no, tu fastidias mucho, Noah. Después hasta nos pueden sacar de clases por tu culpa.

Él la miró ofendido, y todos reímos para luego ir al sofá. Noah e Isaak se sentaron en la alfombra—Aunque el primero estaba más bien acostado en ella—. Y nosotras tres en el sofá.

—¿Qué tal todo?—Les pregunté, refiriéndome a las clases.

—Las clases de biología siguen iguales de aburridas—Violet se quejó—El día que el profesor Warren se vaya, posiblemente haré una fiesta.

—Ay, a mi me cae bien—Angie defendió—Sólo no soporto educación física ¡50 vueltas por todo el gimnasio es demasiado para mi cuerpo!—Exclamó.