Ayúdame A Enamorarla [Bradley Steven Perry Y Tú] [Completa]

Capítulo 11: "Mientras él sea feliz, yo lo seré"

Ya había pasado una semana desde el raro almuerzo con los chicos. Las cosas entre Bradley y Sabrina desde ese entonces están de maravillas, incluso avanzo dos fases: la 3 que era que confiara en él, y la 4 que se convirtiera en su mejor amigo. Algo que yo hubiese tardado en hacer un mes o dos.

Recuerdo lo feliz que llegó Bradley ese día, luego de las grabaciones.

*Flashback*

Estaba tranquila viendo la televisión con Violet, cuando comenzaron a tocar insistentemente la puerta. Luego de hacer un rápido juego de piedra, papel o tijera para ver quien iría a abrir, Violet fue.

—Traicionada por el mismo juego que propuse, que suerte la mía— murmuró y se fue a regañadientes a abrir.

Yo solo solté una risita, y en ese instante un saltarín Bradley llegó a mi lado.

—Adivina, adivina, adivina—Dijo sin dejar de saltar.

—¿Qué? ¿Qué? ¿Qué?— Salté sentada en mi lugar en el mueble.

—Te dije que adivines— dejó de saltar y se cruzó de brazos haciendo puchero.

—Alguien comió mucha azúcar— canturreo Violet— O se fumo unas cuantas ¿Que te he dicho de las drogas Bradley?

—Que son malas— respondió como niño pequeño.

—Bien—Violet aplaudió—Toma una galleta— dijo, para luego lanzarle una de las galletas que antes estaba comiendo. Bradley la atajo en el aire y comenzó a comerla,

Mis amigos se tratan y me tratan como perro, pero así nos queremos. Aunque creo que necesitamos uno de verdad.

—¿Han considerado adoptar un perro? Creo que les hace falta.

—¿Pod que lof digces?—Preguntó Bradley con la boca llena de galleta mientras Violet le rascaba la cabeza diciendo: "¿Quien es un buen Bradley? Oh, tu lo eres."

—No, nada— hice una mueca— En fin— dije sacudiendo mi cabeza para dejar de lado mis pensamientos — ¿Por qué tanta felicidad, gordito? ¿Te han dado un nuevo papel en una película o algo?

—Muchisimo mejor que eso.

Levante una ceja—¿Ah si? ¿Entonces qué?

—Hable con Sabrina sin decir ninguna estupidez.

—No exageres, Bradley—Violet se burló —Es imposible que hables sin decir ninguna estupidez.

Reí —Eso.

—Ustedes me hacen bullying, pero eso no me quitará la felicidad que tengo.

—Sin bullying no hay amistad, querido Bradley, y eso lo sabes—sonreí— ¿Y de que hablaste con Sab?

—Mejor dicho ¿De qué no hablé? Ella es fantástica— dijo y casi podía ver los corazones flotando a su alrededor—. Incluso tengo su número.

—Me alegro mucho por ti, Bradley.

—Ay, como crecen de rápido—Violet se limpió una lágrima falsa y todos reímos.

—Y adivinen que —Volvió a saltar.

—¿Hay más?

—Claro que hay más. Mañana iremos a jugar bolos junto a Rowan, Peyton y Corey.

—¿En serio? Que bien, tenia tiempo sin ir a los bolos.

—Oh no, tu no iras. Perdón, pero ella no te mencionó en ningún momento.

Una los ayuda para que estén juntos y luego la dejan de lado. De malagradecidos esta lleno el mundo. Sonreí forzada —Bueno, no importa, iré otro día.

Violet rodeó a Bradley con el brazo —Si, es una tristeza que no nos acompañes, _______.

—Tu tampoco iras, Violet.

Ella se puso una mano en el pecho ofendida— ¿Ah si? Pues al cabo que ni quería ir.

*Fin flashback*

Desde ese entonces no hemos vuelto a verlo, solo sabemos de el por whatsapp. Violet por otro lado, logró conseguir hasta el número del chico al que había visto en el Tacos Bar, tal y como dijo. Se llama Isaak, y la verdad si es muy lindo (Violet lo reclamó suyo, así que mal por mi) además de amigable.

El sonido del timbré me sacó de mis pensamientos, rápidamente me levante y fui a abrir la puerta. Afuera esperaban Violet e Isaak pues íbamos a ver una película, los hice pasar y los tres nos sentamos en el mueble.

—Al final ¿Que película veremos?— preguntó mi castaña amiga.

—El conjuro 2—Respondí.

—Dicen que es buenisima, y tiene una monja fantasma y...—Isaak comenzó a decir pero Violet y yo lo interrumpimos antes de que terminara.

—¡Callate!— dijimos ambas al unísono.

—No me arruines la pelicula, Isaak. No de nuevo—Violet le dio una mala mirada.

—Esta bien, tranquilas —Levanto sus manos en señal de paz—. ¿Y que esperamos? Ya se hace tarde.

—A Bradley, prometió venir— le respondí—. Se supone estaría aquí hace diez minutos— dije mirando mi reloj.

—No creo que venga,_______. El es muy puntual—Violet me miró —. Creo que es mejor que nos vayamos, Isaak tiene razón, se hace tarde.

Suspire triste— Esta bien, iré a buscar mis cosas.

Así había pasado ya varias veces, Bradley decía que vendría y al final nos dejaba plantadas. En parte eso me hace sentir mal, digo, es mi mejor amigo y siempre ha estado ahí, es raro que ahora ya no lo este, al menos no tanto como antes, pero lo bueno es que esta feliz y eso es lo que importa.