Prólogo.

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Cierto día, un pequeño joven japonés que había llegado a Rusia por turismo quedó cautivado por una melodía que su memoria se aseguraría de nunca olvidar. Fue un sonido de piano y una voz proveniente de una gran mansión que provocó que se separara de su familia y cual hechizo lo encaminara a avanzar cortos pasos en su dirección... "Sento una voce che piange lontano..." ¿quién cantaba esa dulce melodía? "Anche tu sei stato forse abbandonato..." la voz sonaba a la de un joven como él; quería seguir escuchando pero el sonido se esfumó con un fuerte golpe de esas teclas que ya no hacían resonar nota alguna y la sensación de un profundo vacío y frustración parecía contagiarse. El japonés nunca pudo saciar su curiosidad de quién interpretaba esa hermosa canción, nunca pudo escuchar su continuación y solamente se quedó observando esa gran vivienda que se distanciaba de sus ojos cuando su hermana lo había encontrado y lo alejaba del lugar para regresar con su familia; "Nikiforov" fue lo último que sus brillantes ojos captaron en una placa...

Años después, Katsuki Yuri se convirtió en el patinador japonés más reconocido de su país y con uno de los peores apodos que a él no le agradaba de escuchar, "el príncipe de plata"; la razón de este título era bastante obvio, por más esfuerzo que diera de sí mismo siempre otro competidor le arrebataba el oro en cada competencia y de esa manera la insatisfacción de acariciar esa doraba medalla se le escapaba de sus manos... Solo un sonido lo arropaba a sus posteriores competiciones, una corta melodía sin nombre cuya caja musical artesanal se repetía una y otra vez hasta que lo ayudaba a conciliar el sueño. Siempre tuvo la esperanza de que si algún día pudiera completarla daría la presentación más hermosa que todo el mundo se maravillaría al ver; un sueño frustrado.

"El gran pianista y compositor, Victor Nikiforov, llegó esta mañana a Japón como parte de su gira mundial para dar un concierto..."Las noticias del televisor de sus padres, que se oía a lo lejos, provocó que Katsuki Yuri se despertara como si ese nombre alertara todas las señales de su cerebro. Los recuerdos de su niñez inundaron su mente, un recuerdo que lo acompañó todo este tiempo y "Nikiforov" era parte de eso ¿Acaso esa persona era la intérprete de su más deseada melodía? ¿Podría conocerle? ¿Podría llegar a otorgársela para patinarla? Esto sonaba como si fuese el destino pero las cosas no serían tan fáciles como creía. El destino los haría involucrar más de lo que uno pensaba pero Victor Nikiforov no se ganó su título de "el compositor de hielo" por nada, más allá de haber compuesto diversas canciones para patinadores, su belleza y personalidad fría congelaba a cualquiera que quisiera acercársele y se prometió a sí mismo que NUNCA "Stammi Vicino, Non Te Ne Andare (Stay close to me)" sería terminada.

Dato: La historia tiene como pareja principal a Victuri y como secundaria Otayurio, se entrelazan sus historias.

La Melodía Incompleta. - [ Victuuri / Fanfic ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora