#12 perdoname...

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(imagen de laila en galeria)

Narra subaru

Siento un ligero peso sobre mí y unos leves movimientos. Abro mis ojos con pesadez y enarco un bostezo mientras me reincorporo en mi silla para darme cuenta que es cordelia quien me cubre con la manta. Me da una mirada tierna y revuelve mi cabello antes de enderezarse y dirigirse hasta la puerta en la cual se detiene al llegar al marco y me mira

- te traeré un café – yo asiento con los ojos cerrados y sale serrando la puerta detrás de ella. Me estiro levemente acurrucando la manta sobre mí y olvidándome realmente que es lo que hago aquí. Miro mi reloj y marcan las 6:30 de la madrugada. En cuanto lo recuerdo giro mi mirada hacia ella que se halla de costado con una mano montada en su cabeza aun durmiendo. Puedo reflejar tristeza en mi mirada. Ojalá sea capaz de perdonarme. Si hubiese sabido por todo lo que estaba pasando, porque yo no sabía nada me entere cuando la traje a esta clínica, rick me conto todo lo que paso y me hizo sentir terriblemente como una mierda. Tendría que haber estado con ella para apoyarla.

Sus ojos tiemblan y liberando un suspiro profundo abre los ojos enfocando su vista en nada, o lo que creo es en mí, pero parece no percatarse de mi presencia junto a ella.

En mi rostro se forma una sencilla sonrisa. Esta gira sobre su lugar posicionándose boca arriba. Me pongo de pie y me inclino ante su rostro, doy suaves caricias apartando los pocos cabellos que bajaban por su frente.

Como dije necesito de su tacto en mi piel, así que deposito un aplastante beso en su frente haciendo que sus ojos cierren por el calor de mi beso.

Me alejo nuevamente solo unos centímetros y deslizoel dorso de mis dedos por la escalinata de su nariz a lo que ella da variosparpadeos.

Me alejo nuevamente solo unos centímetros y deslizoel dorso de mis dedos por la escalinata de su nariz a lo que ella da variosparpadeos

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Oigo el chillido de la puerta y muy rápidamente me dejo caer en la silla procurando normalidad. Entra cordelia en el preciso momento en que caigo en la silla. Ella se detiene observándome con una mirada sospechosa con el café en la mano. De inmediato me ruborizo y cojo aire repetidas veces desviando mi mirada a cualquier lado. Ella me acerca el café el cual bebo a pequeños sorbos procurando no quemarme. Ella se dirige hasta la ventana y jala el cordel de la persiana dejando ver un patio nevado.

- ha nevado toda la noche. ¿No quieres ir a descansar? Yo te cubriré – niego lentamente con la cabeza. Ella dirige su mirada hacia laila notando que está despabilando, así que se acerca a ella, se recarga en la camilla y acaricia su cabeza repetidas veces – ya despertó...voy a llamar a la doctora – dice cubriéndola hasta el cuello y se dirige hasta el marco de la puerta nada más para llamar a la doctora que rápidamente entra al lugar. Ella saca una pequeña linterna y la enciende acercándose hasta su rostro, y jalando sus ojos solo un poco con los dedos para abrirlos. pasa la linterna en ambos ojos. Bien termina apaga su linterna regresándola al bolsillo de su bata.

- aún no está del todo despierta, esta mareada por la pérdida de sangre que tubo, así que no reconoce nada de su entorno. Hay que dejar que descanse para que recupere un poco de fuerzas –

Rosa Sangrienta #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora