Caso Parker || L.P ||

Capítulo 3- Ella no es Melanie.

—Esta es la habitación —dijo Liam después de haber puesto las dos grandes maletas de Julie a un lado de la puerta.

—Es linda —dijo Julie recorriendo con la mirada la habitación.

—Dejaré que se instale, Niall y yo estaremos preparando la cena.

Y tras decir aquello, Liam salió de la habitación.

Julie caminó hasta la cama y se sentó. Dejó salir un largo suspiro antes de comenzar a desempacar. No sabía cuánto tiempo estaría en casa del detective Payne, así que había empacado casi todo su closet.

Tomó una de las maletas que Liam había dejado cerca de la puerta y la rodó hasta estar cerca del closet. Comenzó primero con los pantalones.

Mientras colgaba sus pantalones, pensaba en la suerte que había tenido.

No recordaba que había sido de ella en las últimas semanas, su mejor amiga estaría en Madrid por al menos seis meses más, Dereck (su primo y mejor amigo) estaba en Estocolmo por tiempo indefinido y para rematar estaría con un atractivo chico que parecía vomitar cada que la veía.

Se estiró un poco antes de comenzar a acomodar las blusas y playeras en los cajones. Ahora solo le quedaba una maleta más, en donde la mayoría eran zapatos.

Tomó la siguiente maleta y se sentó en el suelo. Comenzó a colocar los zapatos debajo de los pantalones.

Liam y Niall estaban en la cocina preparando la cena. Harían algo sencillo: hamburguesas. Liam no había tenido más que hora y media para arreglar la casa, comprar la despensa y pasar a recoger a Julie a su apartamento.

Desde que el agente especial Tyler le había dicho que Julie se quedaría en su casa, no había dejado de pensar en Melanie. Eran similares.

La recordaba muy bien.

El olor de su cabello por las mañanas después de bañarse, la media sonrisa que hacia cuando estaba pendiente de la mirada de Liam o la frialdad de sus ojos cuando las cosas se ponían serias.

“Te extraño, Melanie”, pensó él mientras rebanaba la verdura.

—Ella no es Melanie, Liam —le dijo Niall como si le hubiera leído la mente.

—¿Qué? —Liam se hizo el desentendido.

—Me entendiste —Niall se volteó dejando una rebanada de carne sobre el plato frente de Liam—. Julie no es Melanie —lo miró directamente a los ojos. Fuera de las oficinas de policía, él no era su jefe y podía ser sincero con él.

Julie estaba bajando las escaleras cuando escuchó la voz de Niall. La había mencionado. “Julie no es Melanie”, se repitió ella en su mente.

¿Quién era Melanie? ¿La estaba comparando?

Se quedó a dos escalones de terminar la escalera, escuchando como hablaban desde la habitación contigua, que era la cocina.

—Son muy parecidas —fue todo lo que Liam dijo en su defensa.

—Solo físicamente. Su personalidad es muy distinta —Niall soltó un suspiro—. Deja de pensar en Julie como Melanie. Deja de torturándote pensando que podría ser ella.

—Pero…

—Nada. ¡No es ella, Liam! —Niall explotó—. Te puedo asegurar, por todo lo que quieras, que sus personalidades no tienen nada en común. Cuando a Melanie le gusta la vainilla, a Julie le gusta el anís.