La lástima fue el comienzo

La fuerza del amor: Lily y Scorpius

Cuando Severus Snape completó el hechizo para borrar al patán de James Potter y así asegurar que Lily Evans fuera suya como se supone que debió ser, ocurrió algo terrible. Lord Voldemort se dio cuenta que había una profecía que hablaba de un niño nacido en julio, que podría ser capaz de derrotarlo, tenía que destruir a ese niño y ese niño era el hijo de Lily Evans.

Severus se dio cuenta que borrando a James Potter, borraría a Harry, y por ello la esperanza de que alguien fuera capaz de derrotar a Voldemort. Él era un fiel mortífago, pero lo era por celos, no podía ni pensar en un mundo sin la sangre sucia Lily Evans, y sin un héroe que derrotara a Voldemort, el mundo para Lily Evans sería muy hostil, sería muy peligroso, y él no podía permitirlo. Sin embargo, había una enorme sombra en su cabeza, que le decía que borrara a James, que huyera con Lily, él podría dejar de lado su magia, el mundo que conoció toda su vida, esconderse entre los muggles, dejando el problema llamado lord Voldemort en manos de alguien más, mientras él y Lily vivían una hermosa vida juntos. Severus peleó con la sombra, porque había una posibilidad de que Voldemort conquistara no sólo el mundo mágico, sino el mundo muggle. Odiaba a los muggles que pretendían ser magos, pero aún más a los muggles inútiles que nisiquiera sabían de magia, eran seres inferiores, destinados a ser esclavos, y Severus no podía ni quería imaginar a su Lily Evans siendo esclava de nadie. Por lo tanto, la sombra de los celos en la cabeza de Severus Snape, tenía que ser ignorada, contenida, él debía ignorar su instinto para borrar a Potter y su hijo y la esperanza de destruir a Voldemort. Por tanto Severus peleó, pensando en Lily Evans, expulsó la sombra de celos que había en su cabeza, la encerró en ese diario y enterró ese diario en un lugar donde nadie lo encontrara jamás, donde él mismo olvidara esa posibilidad y sus celos no nublaran su juicio nunca más, porque ahora tenía que ser muy fuerte, debía proteger a Lily y muy a su pesar, su hijo, el héroe destinado a derrotar al lord tenebroso.

Cuando Hermione salió a buscar a Scorpius, Harry fue a buscar a Snape. Como eran vacaciones, todos los directores habían abandonado sus retratos, pero el príncipe mestizo nunca abandonaba Hogwarts, así que se dio a la tarea de buscarlo y cuando lo encontró habló con él. El mismo Severus Snape le contó cómo había expulsado la sombra de celos que se apoderó de su cabeza, pensando en hacer lo correcto por su amor.

Lily luchó, apoyada en su amor por Scorpius, ese amor tan sincero que se había convertido en algo tan terrible, alimentado por sus propios celos, alimentado doblemente por los celos de Snape, contenidos en el diario que Lily leyó. Luchó y triunfó. Lily ahora era la misma chiquilla consentida y soñadora pero inofensiva. No podía ni mirar a Scorpius y a Hermione. Lo que les había hecho no tenía nombre, y aunque Harry y Ginny la reconfortaban asegurandole que Hermione cambiaría el pasado y evitaría la muerte de 3 inocentes. Pero eso no reconfortaba a Lily, que sentía todo el peso de la culpa de lo que había hecho, y que sentía su corazón roto porque ahora sí era una certeza matemática que Scorpius la odiaba.

Tendrían que volver al pasado, raptar a Lily en la fiesta de graduación, convencerla de luchar contra la sombra de celos y expulsarla de ella antes de que acudiera a matar a Draco y Rose al día siguiente.

El encantamiento consistía en ver a Lily expulsar la oscuridad de su mente, el espejo lo captó la primera vez, la magia estaba hecha, cuando Lily lo lograra en el pasado, el pasaje para que Hermione y Scorpius volvieran se abriría, así que debían tener éxito, de lo contrario, estarían atrapados en el pasado con sus otros yo, observando nuevamente morir a sus seres queridos.

— Bien, pues... ¡buena suerte y gracias Hermione! — Dijo Ginny abrazando a Harry y Hermione.

Ellos junto con Scorpius viajarían a la noche de la fiesta de graduación. Raptarían a Lily y la ayudarían a expulsar la sombra de celos que dormía en ella. Todos se despidieron de ellos, Lily se acercó a Scorpius de último momento y quiso hablar con él