Scorpius había escuchado horrorizado lo que había pasado... los centauros se habían llevado a Rose como su prisionera... y por más que él había intentado luchar contra el hechizo, fue en vano y no era capaz de moverse. Pasaron horas y horas en las que él estaba muriendo de angustia. Eventualmente comenzó a recuperar la movilidad, pero ya estaba oscureciendo cuando fue capaz de moverse. Volvió lo más rápido que pudo al castillo y cuando estuvo cerca pudo comenzar a correr, tenía que encontrar a McGonagall...
Sin embargo no la localizó en su despacho, y por la información que logró obtener de su jefe de casa, ella había salido a atender una diligencia, al parecer habían encontrado a una alumna en el bosque prohibido... él había tratado de obtener información sobre si ella estaba bien, y al parecer así era, pero aún así se quedó sumamente preocupado.
Volvió a su sala común sólo porque lo obligaron, cuando llegó, le contó a Albus toda la verdad, lo que había ocurrido en el bosque
— Ella debe estar bien, es sólo que... no entiendo, ¿por qué te petrificó y te ocultó?
— No lo sé... pero no aguanto esta angustia, debo hacer algo... debo ir a preguntar si ya volvió
— ¡No! Espera, si sales ahora te castigarán o algo peor, creo que ella estaba protegiéndote y si tu haces que te expulsen pagarás muy mal su sacrificio
— ¿Tu crees que la expulsen? — preguntó al borde de la histeria
— Por supuesto que no, su mamá es ministro de magia ¿recuerdas? Mi tía arreglará el problema con los centauros de seguro y quizá Rose tenga un castigo pero no creo que sea tan grave
— Ay Al... ¿qué hice? Yo sólo quería ayudarla y mira todo el desastre que cause...
— Todo se arreglará ya verás, duerme un poco y mañana buscamos a McGonagall a primera hora, lo prometo
— No creo poder dormir...
— Inténtalo...
Ambos amigos se acomodaron en sus camas, pero la realidad es que ninguno pudo conciliar el sueño
A primera hora de la mañana salieron de las mazmorras y se encaminaron a buscar a McGonagall. No tuvieron suerte y decidieron probar en la torre de Gryffindor. Esperaron a que saliera alguien para preguntar por ella, nadie la había visto, Scorpius estaba al borde del colapso. Por fin Lily salió de la torre
— ¡Lily! ¿Ya trajeron a Rose?
— Buenos días para ti también hermanito
— Lily... esto es importante
— Si, ya regresó, sólo que fue muy muy tarde y ahora está durmiendo
— ¿Pero está bien? — preguntó Scorpius sin poder disimular su ansiedad
— Si, bien, ¿quieren ir a desayunar?
— Vamos, debe descansar — le dijo Albus a su amigo y lo jalo de la túnica
Scorpius caminó en silencio sumido en sus pensamientos, Lily notó su estado de ánimo y le hizo revolver el estómago el saberlo muerto de preocupación por ella.
Rose no salió en toda la mañana, Scorpius siguió a los Gryffindor a todas las clases esperando ver si ella aparecía, casi estaba perdiendo la esperanza cuando en la última clase, que era la que compartían Gryffindor y Slytherin, de repente se abrió la puerta y Rose entró al salón. Scorpius tuvo que usar todo su autocontrol para no lanzársele en ese momento y sólo lo hizo porque la clase ya había empezado... y porque Albus lo detuvo.
Estuvo nervioso toda la clase, no le quitó la vista ni un momento, en cuanto la clase se terminó, se levantó y fue hacia ella
— Rose, ¿estás bien? Estuve muy preocupado
ESTÁS LEYENDO
La lástima fue el comienzo
FanfictionPrecuela de Descifrando el pasado. Aquí se encuentra la historia del triángulo amoroso entre Lily, Rose y Scorpius, esa que inició todo, aunque la realidad es que efectivamente, la lástima fue el comienzo...