La lástima fue el comienzo

La fuerza del amor: Draco y Hermione

- Ahora - dijo Hermione limpiándose las lágrimas - tu sorpresa Rose

Ambas caminaron hacia la pared falsa, Hermione le mostró el hechizo para removerla, y Rose estuvo encantada, tal como aquella vez... Hermione sintió un escalofrío y entró con la varita en mano, dejando a Rose detrás de ella

- ¿Por qué la varita? - preguntó Rose sin entender muy bien la actitud de su madre

- Precaución - contestó sin dejar de estar alerta

Comenzaron a escuchar voces, pero no era como aquella vez... esta vez la voz era de Draco... Hermione comenzó a caminar más de prisa, y sintió su corazón latir desbocado cuando lo vio ahí, hablando con Scorpius, vivo... corrió hacia él y se lanzó a sus brazos. Enredó sus piernas en su cintura y comenzó a besarlo repetidamente, Draco no tuvo ocasión ni de decir nada, la recibió en sus brazos sumamente sorprendido y la miró besuquearlo como si estuviera loca... estaban ahí con los chicos... era sumamente inapropiado actuar así, los miró preocupado por el espectáculo que estaban dando, pero la verdad, no estaba seguro quien actuaba más raro...

Nada más entraron, al tiempo que Hermione se lanzaba sobre Draco, Scorpius lo hacía sobre Rose, la cogio de la cintura y la elevó mientras daba vueltas con ella, cuando ya la pelirroja estaba mareada la bajó y comenzó a besuquearla de la misma manera que Hermione lo hacia con Draco, y así una muy incómoda Rose cruzó miradas con un todavía más incómodo Draco

- ¿Qué les pasa a ustedes dos? - preguntó Draco mientras dejaba a Hermione en el suelo

- Le enseñé a Rose el hechizo... de la pared falsa... - dijo Hermione con la voz agitada

- ¿Y? - dijo el rubio muy contrariado

- Ahora viviremos todos juntos... - trató de salvar Scorpius

- ¿Qué no les emociona? - continuó Hermione

- ¡Será genial! - dijo Scorpius

Rose y Draco se miraron y se encogieron de hombros, no podían negar que la idea era emocionante, aunque tampoco que Hermione y Scorpius actuaban raro...

- Hermione, démosle espacio a los chicos - dijo Draco, llevándose a Hermione que parecía hipnotizada por él

En cuanto Draco y Hermione entraron en su habitación, ella volvió a lanzarse sobre él, encajó su cuerpo al suyo y lo besó con toda la fuerza de sus sentimientos, su necesidad de él, sus diferencias uniéndolos, su inexplicable atracción, todo parecía haberlos llevado a ese momento, esa noche donde unieron sus cuerpos sintiendo como si sus corazones latieran como uno sólo...

Hermione siempre había sido la personificación de la propiedad y de lo que es correcto y lo que no. Además, siempre había sido muy dueña de sí misma, de sus acciones, de sus reacciones y de sus comportamientos. Sin embargo, esa noche no... No porque no tenía fuerzas para contenerse más, no porque simplemente no le apetecía hacerlo. Cuando Draco murió sintió el mundo desplomarse sobre ella... había tanto que no habían hecho juntos, años de planes frustrados, más de 20 años que tuvieron que pasar separados, tanto que no le había dicho, tanto que no habían hecho... cuando por fin recuperó sus recuerdos, supo que le debía tantos años a Draco, que esperaba que la vida le concediera vivir más de 100 años para estar con él y ni así serían suficientes para calmar su sed de él, para recuperar todos esos años, que aunque habían valido la pena por que lograron salvar la existencia de sus hijos y dejar a Astoria tener una vida tranquila al lado de Draco, siempre les pesarían a ellos en sus corazones, pues ese viaje alrededor del mundo, esos planes de sexo desenfrenado todos los días, esos dos niños rubios, hijos de ellos, no pudieron ser...