Me acerqué a cerrar la puerta de la habitación y después me senté en la cama. Quería descansar y quitarme este molesto vestido de encima. Tardé en quitar la grandiosa prensa de mi cuerpo y cuando por fin pude hacerlo revisé el reloj. Era las 9:32 pm y todavía no cenaba y sinceramente me daba pena pedir algo pero no me quedaría con el estómago vacío.
Busqué entre los cajones que había, mi pijama. Encontré mi pantalón de dormir y mi polera. El pantalón estaba lleno de pequeñas Hello Kitty's y la polera traía a una Kitty enorme. Me metí al baño de la habitación, la cual ahora era mi habitación y me di una ducha. Saliendo de la ducha acomodé mi pelo sobre mis hombro y por mi espalda, se me hacían pequeños rulos en las puntas ya que me pelo era bastante largo.
Salí de la habitación con algo de miedo pero tuve el valor para hacerlo. Caminé sin hacer ruido ya que traía mis cómodas pantuflas. Bajé a la cocina y todo estaba apagado. Me dio miedo al principio pero después encontré el interruptor.
-¿Qué haces? -Preguntó Harry prendiendo la luz-.
-Gracias... -Agradecí tímida-.
-Vuelvo a preguntarte lo mismo ¿Qué haces aquí? -Preguntó molesto-.
-Yo sólo... Quería leche -Bajé la mirada-.
-Yo te doy las cosas. No quiero que toques absolutamente nada de aquí. Que estemos... -Hizo cara de asco- ...unidos, lo que sea, no significa que esta casa sea tuya también -Advirtió-.
-De acuerdo -Me sentía mal por sus palabras-.
Se acercó al refrigerador y me sirvió un vaso con leche. Agradecí tímida y se colocó su chamarra. Saldría, lo sabía.
-¿A dónde vas? -Pregunté sentándome en el taburete-.
-No te incumbe -Contestó frío-.
Caminó fuera de la cocina y se oyó el sonido de la puerta cerrándose con fuerza. Me sentía sola. Segundos después sentí como lágrimas caían por mis mejillas, esto era algo difícil, lidiar con Harry todos los días sería difícil. Sus palabras me dañaban a cada instante y sólo hemos estado juntos unas horas. Terminé de cenar mi leche y llevé el traste al lava platos. Subí a mi habitación y me encerré ahí.
Me acerqué al buró a lado de mi cama y tomé mi móvil. 'Mensaje de Zayn' decía la pantalla del teléfono. Toqué el collar que traía puesto, el que me había dado Zayn el día de ayer ¡Diablos! No lo vi en todo el día, se me olvidó decirle. Abrí el mensaje.
'Te quiero, nunca lo olvides. ZM xx'
Suspiré y dejé el móvil sobre el mueble de nuevo. Me metí dentro de mis cobijas y prendí el televisor, comencé a ver algunos programas hasta que me quedé dormida.
A la mañana siguiente me desperté lentamente y me estiré sobre la acolchonada cama, era más cómoda que en la que me dormía a diario en mi casa. Me senté y recargué mi respaldo en la cabecera. La TV estaba apagada ¿Que raro? Yo la apagué, oh ya se, tal vez después de determinado tiempo de apaga sola, si eso debe ser.
-Buenos días -Se oyó la voz de una señora-.
-Buenos días -Dije un poco adormilada mientras la observaba preparando el desayuno-.
-Soy Ross, cuido de Harry desde que es un pequeño bebé -Reí bajito-.
-¿Y Harry? -Pregunté en un susurro-.
-Sigue dormido -Negó con la cabeza-.
-Lo suponía ya que ayer salió -Sonreí de lado-.
Solté un leve suspiro y volví a mirar a Ross. Me indicó que me sentara y comencé a desayunar.
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Truly Madly Deeply
Fanfiction"Truly madly crazy deeply in love with you." Disponible en @zayniac.