Parte 50

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Semanas después, aquella casa estaba en completa tranquilidad, Yukwon amenazo a todos que si despertaban a Hangil iba a mandarlo a dormir con el culpable y a decir verdad ninguno de ellos quería amanecerse, menos Kyung así que hizo el menor ruido posible cuando salió de su cuarto en dirección a la de Jaehyo. Él le había pedido al castaño desde hace una semana que le prestara unos discos en blanco pero este siempre se olvidaba de dárselos así que Kyung no encontró otra forma que ir por ellos.

Camino en puntillas abriendo la puerta un poco.

-Oye Jaehyo...- susurro asomando su cabeza por la puerta pero la habitación estaba oscura, al parecer el mayor no estaba porque Kyung llamo una y otra vez sin respuesta así que decidió ingresar.

Empezó buscando en los cajones encontrando una barra de chicles de menta que metió a su bolsillo sin pensarlo, luego vio un billete de 5 dólares que también guardo en su bolsillo y luego busco en otros lugares. Kyung estaba seguro que vio esos discos en el mueble de libros que tenía Jaehyo así que también busco por ese lugar distrayéndose con algunas películas que el castaño había comprado. Busco y busco hasta que en una caja de plástico lo encontró, Kyung sonrió satisfecho tomando todo en sus brazos y después volvió a distraerse con los libros que había en ese lugar, especialmente le llamo la atención uno que decía "¿Cómo sobrevivir a un apocalipsis zombie?", el menor se quedó sorprendido.

-Que ridículo- dijo sonriendo –Hemos visto como 50 veces Guerra Mundial Z ¿para esto?- se preguntó sacando el libro pero tan pronto lo hizo vio como un sobre cayó al suelo.

Kyung miro hacia abajo, se quedó quieto unos segundos y después se agacho para tomar aquel sobre, sabía que Jaehyo iba a regañarlo por curiosear en su cuarto pero nadie le dijo que dejara la puerta sin llave.

El menor vio el sobre blanco con un título que decía "Hospital #6" y más abajo "Paciente Ahn Jaehyo", no tenía mucho interés en ver el contenido pero aún así lo hizo, abrió el sobre sacando el papel que contenía dentro y comenzó a leerlo con atención. En realidad no estaba claro al inicio, algunos nombres raros con porcentajes y cosas que no descifraba, siguió bajando hasta el último lugar del papel encontrando por fin el nombre en palabras que podía entender.

"Diagnostico: Leucemia Mieloide Aguda (Nivel 3 de 4)"

Y en ese momento, justo en ese momento Kyung se quedó estático. La expresión relajada de hace unos segundos empezaba a cambiar a preocupación, apretó el papel con fuerza mientras fruncía el ceño, leía una y otra vez para asegurarse de no equivocarse pero el resultado estaba claro.

El sonido de la puerta hizo a Kyung darse la vuelta para ver a Jaehyo ingresando al cuarto, aquel que no se movió cuando vio al menor con el papel en la mano. Ambos se miraron por un tiempo.

-¿Leucemia?- pregunto Kyung sin ser discreto.

A Jaehyo le dio un pequeño susto cuando Kyung hablo en un tono normal así que fue hasta él para quitarle el papel y cerrar la puerta.

-¿Tienes leucemia?- pregunto otra vez el menor.

-¡Shhhh!- El castaño reacciono de nuevo –Kyung por favor-

-Jaehyo estas enfermo-

-¡Baja la voz!- exclamo el mayor en un susurro.

-No... tienes que decirle a los demás, hablare con Yukwon para...- dijo Kyung caminando hasta la puerta pero Jaehyo se lo impidió -¡Jaehyo!- exclamo.

Era la primera vez en años que Kyung estaba dejando salir ese carácter así que el castaño bajo la mirada -Estoy bien...- dijo.

-No, no estás bien, ¿Crees que soy tonto?, he visto demasiadas películas para no saber de qué se trata esa enfermedad- volvió a reclamarle –Jaehyo puedes morir-

-Estoy en tratamiento... de verdad no es para alarmarse- lo calmo.

-Entonces déjame decirle a los demás, te podemos apoyar y...-

-¡No Kyung!- volvio a exclamar en voz baja –No entiendes, si no les he dicho es para no preocuparles-

-Somos como tus hermanos, es normal que nos preocupemos-

Jaehyo respiro hondo –¿Ves lo feliz que esta Taeil con su negocio?, ¿Viste como Yukwon es feliz con su nueva familia?, ¿No te emociona saber que la boda está a un paso?, todos están felices Kyung... decirles esto arruinará muchas cosas-

El menor de los dos no sabía cómo responder, sentía ganas de salir ahora para contarle a Yukwon y Taeil pero ver lo asustado que estaba Jaehyo hacia que se quede a escucharlo.

-Te lo suplico Kyung, no se lo digas a nadie por favor- imploro Jaehyo esta vez al borde de las lágrimas –Enserio me estoy preocupando, voy a salir tan rápido de esto que nadie se dará cuenta-

Kyung lo miro a los ojos unos largos segundos, no estaba de acuerdo, él debía hacer lo correcto pero Jaehyo estaba confiándole algo muy privado.

-Está bien- respondió sin ánimos.

-Júramelo- dijo Jaehyo –Por lo que más amas en esta vida-

-Lo juro-

Y el castaño respiro mejor abriendo los brazos -¿puedo abrazarte?- pregunto y Kyung asintió.

Los dos se reunieron en un abrazo amistoso, solo ese contacto hizo que Jaehyo descargue un poco de su dolor en los hombros de Kyung llorando con fuerza pero sin hacer demasiado ruido. El menor solo se quedó en su posición soltando algunas lágrimas, le dolía la noticia, pensar que podía perder a un hermano otra vez fue como un golpe tan duro en el corazón, quizás no lo sabían o él no lo expresaba pero ellos eran muy importantes en su vida y el podía sacrificar muchas cosas por esa parte importante.

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Sentado en el marco de la ventana estaba Taeil, quien tenía una taza humeante de té mientras miraba la calle, las personas pasar solas o con acompañados, observando el mar mientras el viento jugaba con sus cabellos, el pelinegro tomo un sorbo de su bebida sin quitar la mirada del paisaje frente a él, quizás estaba tan distraído que no se dio cuenta cuando Jihoon se colocó a su lado tomándolo del hombro.

-¿Algo interesante?- pregunto mirando por la ventana para saber que tenía a Taeil tan entretenido.

El mayor negó con la cabeza sin voltear a ver a Jihoon, solo se quedó callado en su misma posición.

-¿Te pasa algo?- volvió a preguntar Jihoon, preocupado por lo raro que estaba el pelinegro.

Taeil solo suspiro, miro el cielo que estaba colocándose gris, pensó que pronto iba a llover.

-No lo sé- hablo en voz baja –pero... de alguna manera me siento triste-

Jihoon frunció el ceño -¿Triste?... ¿por estar aquí?-

-No...- dijo –Solo me siento triste sin razón, no sé qué me pasa-

El castaño dudo un segundo de lo iba a hacer después de esa respuesta, pero luego se acercó a Taeil abrazándolo, lo hizo con cuidado pensando en que quizás iba ser mandado lejos pero al contrario de eso el pelinegro apoyo su cabeza en el pecho de Jihoon.

-¿Puedo hacer algo para que no estés triste?- susurro el más alto.

Otro suspiro no audible salió de los labios de Taeil, era una locura su respuesta pero...

-Quédate aquí- dijo esta vez mirando a Jihoon –aunque me arrepienta luego.

Jihoon también pensó que lo que estaba por hacer era otra cosa de la cual el pelinegro se arrepentiría pero sin importar se inclinó un poco dando un tierno beso en los labios de Taeil, luego lo abrazo y se quedaron así, desde que la lluvia comenzó hasta que el mayor de los dos se quede profundamente dormido en los brazos del castaño.

Devuélveme las alasWhere stories live. Discover now