Begin Again; bm.

30.

–¿Crees que si no hubiera llegado Jos lo hubieran hecho?–cuestionó Frida.

–Ay, la verdad no se–me senté en nuestra mesa–Creo que aún no estoy lista para eso..

–Dejémoslo en que solo te dejaste llevar por el momento–por fin, había hablado Aby.

–Más bien y de plano a Bryan cada día le cae peor Jos–me encogí de brazos, al decir eso.

–Y Jos, cada vez se acerca más a ti ¿Te has dado cuenta?–no podía ser verdad–Desde la semana pasada a estado sentándose con nosotros y siempre pregunta por ti, no hay día en que no lo haga.

–¿En serio?–pregunte un tanto sorprendida.

–Te lo juro, ¿verdad Aby?–ella solo asintió–Y que decirte, siento que toda vía te ama.

Escupí el trago de jugo, que me acababa de llevar a la boca.

–¿El amarme?–reí sarcásticamente–Lo dudo amiga.

–Créeme Estefanía–me miró fijamente a los ojos–Claro que lo hace, no soy tonta.

–No lo eres, pero no te creo Frida.

–Y tú, aún lo amas–volví a escupir el jugo.

–No, estás loca.

–Yo sé que si, no puedes eliminar el amor que tenías por el..

–Claro que si y ya lo he hecho.

–Aunque ahora estés con Bryan, sé que aún hay amor por el.

Cuando, estaba a punto de responder llegaron los cuatro, evitando que pudiera decir algo más.

–Fanny, hola–me dio un beso–¿Como estás?

Era muy amigable para mi gusto.

–Bien, supongo–sonreí–Y ¿Tu?

–Bien, ahora que te veo aquí–agg cállate.

–¿Pequeña Leyva, qué haces aquí?

–Comiendo con ustedes, pequeño Villal–le enseñe mi lengua.

–¿donde dejaste a Bryan?–pregunto ahora mi hermano.

–Está con sus amigos–intenté sonreír.

En realidad, no sabía nada de el.

–Me alegro que estés aquí, con nosotros–tomó asiento a lado de mi–Con tus amigos–acaricio mi mano.

–Uhm si–por cinco segundos, me había sentido incomoda–Pero que yo recuerde, tu ya no estábamos con ellos en descanso.

–Me aleje un tiempo, pero aquí estoy de nuevo con estos idiotas.

–Ah.

Observe a mi primo y el solo, miraba con el ceño fruncido a Jos, tal vez se habían peleado pero no quise preguntar, al fin era su problema.

–Salgamos el viernes... tiene años que no salimos y no acepto un no, por respuesta–anunció Freddy–Así que si, ya tenían planes, los cancelan.

–Está bien, papá–dijimos los seis al mismo tiempo, como en los viejos tiempo haciendo que risas de cada uno.

•••

Al terminar las clases, los chicos y yo nos fuimos a mi casa, ya que según ellos tenían algo muy importante que hacer.

–Y ¿Que harán?–les pregunte cuando estaban los cuatro aplastados en la sala–¿Tarea?–ellos empezaron a reír demasiado, haciendo que sintiera que se estaban riendo de mí–Okey, ya me quedo claro que no harán tarea, así que al rato los veo, yo si tengo cosas que hacer.