Begin Again; bm.

29.

Cinco de Junio, era la fecha que marcaba mi calendario, ¡Por fin! Oficialmente, era legal ante la sociedad.

Escuche que tocaron la puerta de mi habitación, ¡Adelante!

Por la puerta entro, mi mama con un pastel que parecía de galleta Oreo, mi papá detrás de ella con un gigante oso de peluche y un globo, y detrás del de ellos Freddy, con una pequeña caja. ¡feliz cumpleaños!, fue lo primero que dijeron los tres al mismo tiempo.

–Mi bebe, ya eres grande–escuche a mi papa decir–Pero, eso no impide que no te demos un peluche de tu animal favorito...–me entregó el gigante peluche–¡Felicidades mi niña!.– me envolvió en un abrazo.

–Tú pastel favorito, lo sé no lo hice yo por falta de tiempo ¡Perdón!–explicó mi mama, dejando el pastel en una mesita–Hace 18 años, llegaste a nuestra vida; llenando la casa de alegría... mi bebe, mi niña, aún recuerdo cuando andabas por toda la casa corriendo con tus dos coletas, o jugando con tus nenucos y barbies....–si no paraba, lloraría–No se en que momento creciste tanto, siento que no te aprovechamos del todo, por trabajar y trabajar.

–Basta mami, eso no es cierto, gracias por esas lindas palabras ¡Los amo, a ambos!

carraspeó la garganta, la otra persona que estaba en la habitación.

–¡Feliz cumpleaños!–gritó muy efusivamente–Ya estás vieja, hermana–depositó besos en mi cara–Te amo, tarada; aunque últimamente hemos peleado un poco, quiero que sepas que todo lo que hago por ti, es por qué me preocupó y simplemente, necesito verte feliz, siempre.

–Ahhh gracias baboso–me lancé a abrazarlo–Te aaaamooo.

Después de los abrazos, siguió comer pastel y prepararnos para ir a desayunar, a nuestro lugar favorito.

•••

Siete de la tarde, era la hora que aparecía en la pantalla de mi celular.

Freddy, Alan y Alonso se habían quedado de ver en una tienda, para comprar ciertas cosas para la fiesta.

La fiesta, empezaría a las 7:30 y aún, no me decidía por cuál outfit usar.

Estaba entre un vestido o una falda, que difícil decisión.

Escuche el timbre de la casa, maldicion; tome rápido un short y baje corriendo por las escaleras para abrir, suponía que era alguna de mis amigas.

–¿Piensas que vas a estar así en tu fiesta?.

–Si hola, gracias.

–Perdón amiga, pero te ves fatal.

–Acabo de salirme de bañar idiota.

–Vamos a arreglarte, corre.

Frida, se veía muy bien, como siempre.

–¿Que piensas usar?–me cuestiono, cuando entramos a mi habitación.

Señale hacia la cama, para que ella observará.

–El vestido, sin dudarlo.

Se acercó a mi y puso el vestido en frente de mi.

–Se te ve bien, amiga.

–Te haré caso–empecé a bajarme el short y a quitarme la playera.