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–¿Dime que traen tú y Jos?–fue lo primero que dijo, cuando abrí la puerta de mi casa.

–Si hola, ¿cómo estás? Yo bien, gracias–respondí con sarcasmo.

–No estés de graciosa Estefanía, contéstame–su rostro denotaba fastidio.

–Solo somos amigos.

–¿Entre amigos se mandan mensajes de «Tú no te has ido de mí, aún me aferro a ti.» ?– me cuestiono con ironía.

–¿Que? ¿Como sabes eso?– pregunte un tanto sorprendida.

–Hace una semana, cuando estábamos en tu casa, el te mando ese mensaje.

–Y tú ¿Por qué andas viendo mis mensajes?–ahora fui yo la que pregunte enojada.

–No era mi intención, solo llego y tú celular estaba en frente de mi. Fue inevitable no leerlo.

–Aunque estuviera ahí, tú no tenías derecho de leerlo. ¿quien te crees que eres?

–Tú novio, eso soy–escupió eso en un grito–Y no me gusta que tú y el cada vez, estén más juntos. Lo detesto.

–Pues es algo que deberás aceptar, ya que el y yo no nos vamos a separar solo porque a ti no te parezca.

–¿En que momento pasó a ser tu amigo?

–Siempre lo a sido.

–Pero últimamente lo veo siempre contigo. ¿cuando pasó eso?

–En el momento que tú te fuiste de aquí, por unos días ¿feliz?

–Yo no estoy y lo primero qué haces es correr a los brazos de ese idiota–el clima de la discusión volvió a subir.

–El no es un idiota. Y no corrí a sus brazos.

–¿Ahora lo defiendes? ¿Después de todo lo que te hizo?

–Tuvo una razón para hacer eso–si, lo estaba defendiendo.

–Y ¿Tú le creíste?

–Si.

–¿Que mentiras te dijo?

–No fueron mentiras, más bien el mentiroso aquí eres tú–golpee con mi dedo índice, su pecho.

–¿El no es mentiroso?

–No, solo me dijo la verdad. Algo que tú no haces.

–Dime, quiero saber.

–No es de tu incumbencia. Y dime ¿cuando me ibas a decir la verdadera razón de tu viaje a Querétaro?

–¿Que? Eso ya es pasado.

–No para mi Bryan.

–¿Que quieres saber?

–Solo, quiero saber porque mentiste de tu ex novia.

–¿Que? Yo no te he mentido nada.

–"Ya no forma parte de mi vida" ajá. Y tienes muchas fotos de ti con ella en tu cuarto.

–Hay una explicación para eso.

–Y el "ella falleció", eres un idiota Bryan– lo había dicho.

En cuanto la mencione, cambio por completo. Parecía que era otro.

–No hables de ella.

Se acercó a mi, prácticamente acorralándome contra la pared. Poniendo sus brazos a mi costado. Tenía miedo.

–Se que la fuiste a ver.

Mala idea decir eso.

– ¿Que parte no entiendes? no hables de ella–soltó eso en un grito. Sus ojos parecían que sacaban fuego.

Begin Again; bm.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora