Capítulo 44: La enfermedad

2.2K 250 152
                                    

Sería mejor que se lo preguntara.

— Nevra .. ¿Tú brazo esta bien?.

Nevra volteó su mirada hacia mi y miró su brazo  como sino hubiera ocurrido nada.

— Que linda que te preocupes pero estoy bien.

Él sonrió pero algo no me convencía, tal vez porque era una sonrisa falsa, podía notar algunas gotas de sudor que caían por su mejilla, definitivamente no se encontraba bien. Madame Levi pareció escuchar nuestra conversación, así que acercó su brazo a una pequeña mesa y tomó unos pequeños anteojos que no tardó en colocárselos. 

Ella estiró su mano hasta Nevra.

— Dejame ver.

— Ya les dije que est.. —Nevra se detuvo cuando Madame Levi lo miraba con una aura oscura. Si fuera él, me la hubiera quitado enseguida.

Sin más, Nevra comenzó a quitarse la bufanda poco a poco y todos abrimos los ojos cuando vimos que tenía una herida, una grave y horrible herida.

 Era como una gran quemadura, la piel estaba abierta y se encontraba sangrando, no sólo eso, también estaban algunas partes negras, como si se estuviera contaminando.

— ¡Idiota!. —Le gritó Madame Levi y lo abofeteó, fue tan fuerte el sonido del golpe que probablemente se habrá escuchado por toda la casa.— ¡¿Tienes una herida abierta y te atreves a exponerte a eso?!.

— Nev .. —Dijo Karenn con una voz triste y preocupada.

Nevra miró al suelo, parecía que se estuviera culpando de todo.

— Eso significa .. ¿Qué Nevra está contagiado también?. —Pregunté.

— Con una herida así, era normal que se infectara de esta enfermedad en segundos. —Ella se levantó y se acercó a una estantería que parecía tener algunos ungüentos y otros extraños frascos, tomó algunos bálsamos y regresó para colocárselo en la herida de Nevra.— Esto te ayudará en la herida pero la enfermedad .. eso es otro tema.

De pronto, vemos visto como las marcas negras se extendían por su brazo y Nevra comenzó a toser sangre.

— ¡Nev!. —Gritó Karenn.

No sabía que hacer, si Nevra estaba contagiado también, a causa de la herida por tocarme, eso significa que no podrá ayudarnos y tendría una muerte segura. Tengo que hablar con Madame Levi, ella tal vez pueda explicarnos mejor la situación, necesito encontrar rápido esa cura.

— Karenn, lleva a tu hermano a una de las habitaciones arriba. —Le indicó Madame Levi y Karenn con esfuerzo, sostuvo a Nevra y subió por las estrechas y largas escaleras.

Un momento ¿Hermano? ¡¿Karenn y Nevra son hermanos?!, vaya .. pero comienza a tener sentido.

Madame Levi se lavaba las manos luego de haber tocado la herida, este era el momento para hablar, así que me levanté y di unos cuantos pasos para acercarme a ella.

— Madame Levi, estamos aquí para encontrar alguna cura. —Dije y ella me miró.— Si nos podría contar todo lo que sucede, le estaríamos agradecidos.

— Veo que eres valiente, pequeña. —Ella se secó las manos con una toalla que se encontraba cerca.— ¿No te dan miedo los vampiros?.

— No, empiezo a acostumbrarme aquí y asimismo también me preocupo por ustedes.

Pareció haberle sorprendido mis palabras.

— Te haces más eldaryana. —Ella esbozó una sonrisa.— Subamos, les contaré todo lo que sé.

Asentí y ambas comenzamos a subir por las escaleras. Aunque no lo pareciera, la segunda planta se veía mucho más grande que abajo, tenía largos pasillos y a su vez, muchas habitaciones. He visto algunas flores marchitas en las esquinas, como una especie de decoración.

Llegamos hasta una habitación que se encontraba a la izquierda y entramos.

Nevra se encontraba entre las sabanas mientras respiraba de manera entrecortada, me sentí muy mal en ese momento y el rostro de Karenn no era nada alentador, no importaba como, esperaba poder encontrar la famosa cura.

Madame Levi y yo nos hemos sentado en otros sofás que estaban a una esquina mientras Karenn no se alejaba de Nevra.

— La enfermedad comenzó hace unos días. —Dijo seria Madame Levi, pero preocupada.— Nadie sabía nada, sólo que una nube oscura envolvía las calles de vez en cuando y la gente comenzaba a ser envuelta por unas manchas que los hacia agonizar, toma alrededor de tres días para que la enfermedad llegue a matarte.

Eso significa que tengo un límite, tengo sólo tres días.

— Pero cuando llegamos, no había nada. —Dijo Karenn con algunas lágrimas.— ¡No había nada!.

— Aunque no lo parezca, la nube aparece de vez en cuando, viene y se va, como las olas, algunos han preferido encerrarse en sus casas pero otros deciden continuar saliendo, necesitan trabajar.

No puedo ni imaginar a los que viven aquí, encerrarse a morir de hambre o salir, trabajar pero morir en cualquier momento.

— Debe ser duro .. —Dije.

— Lo es. —Madame Levi se quitó los anteojos.— Aún no sabemos como llegó, sin embargo, hay algo que nadie ha entendido .. hubo un vampiro que se libró de aquella enfermedad.

— ¡¿Se libró de la enfermedad?!. —Dijimos Karenn y yo al unísono.

— Si, un vampiro joven pero desde que se curó, no ha salido de su casa, alguien creó el tonto rumor de que si bebes la sangre de un vampiro, la enfermedad se va. Así que si el sale ..

— El resto de vampiros querrán matarlo .. —Coloqué la mano en mi frente, a esto es lo que llamarían canibalismo.

Madame Levi suspiró y miró hacia un lado.

— Podemos ir mañana y sólo si la neblina se ha dispersado, ahora ya ha oscurecido y no podemos hacer mucho, pueden quedarse en alguna de las habitaciones.

— Muchas gracias por el hospedaje. —Agradecí que tuviéramos un lugar donde dormir, además no podíamos llevar a Nevra de un lado para otro.

— Gracias Madame. —Dijo Karenn limpiándose las lágrimas.

La información que nos había dado Madame Levi era más que suficiente, tal vez ese vampiro pueda contarnos que hizo para librarse de la enfermedad, aunque hacerlo salir o dejarnos pasar a su casa, será el verdadero reto.

Sólo espero que el tiempo no se venga en nuestra contra.

— Por cierto Karenn .. ¿No han ido a visitar a sus padres?. —Preguntó Madame Levi, sin embargo, Karenn no respondió.

Escojan
A) (Insistir que hable)

B) (No insistir)

S E C R E T O S [Ezarel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora