Capítulo 58: Reinicio

2K 260 292
                                    

— Eres tan lindo .. —Creo haber sentido mis mejillas muy sonrojadas.

— Lo sé, soy magnífico. —Mostró una gran sonrisa.— Pero ahora no estas en tus cinco sentidos, así que mejor ve a dormir.

Luego sentí como ligeramente me empujaba hasta la cama pero antes de caer en esta, no sé porqué quería estar cariñosa con él, así  que pasé mis brazos alrededor de su cuello y lo atraje conmigo mientras caíamos en mi cama. Es algo que nunca hubiera hecho, no sé que me pasa.

— _____ .. —Ezarel quería levantarse pero aún así no lo solté, pude escuchar como suspiraba y eso ocasionó que se formara una sonrisa en mis labios.— Ya está, no volverás a beber sin mi permiso.

— Si, jefe ..

Sentía los párpados más pesados pero alcancé a escuchar con claridad como empezó a reírse, tal vez por mi comentario o por como me veía.

Después de unos segundos, lo separé un poco de mi y levanté la mirada hacia él.

— Ez ..

No sé si mis ojos me estaban engañando pero pude verlo como me sonreía con ternura, realmente se veía muy apuesto, incluso hizo que me sonrojara aún más. A veces todavía me sigue sorprendiendo como pudo enamorarse de mi, si todavía sigo siendo mitad humana .. y es lo que me frustra un poco.

A pesar de seguir maravillada por su sonrisa, pude ver como una extraña chispa de color rosa, apareció de manera fugaz en sus ojos.

No entendía muy bien lo que acababa de ver, pero justo en ese momento, Ezarel logró salir de mis brazos y empezó a caminar hasta la puerta, sin siquiera mirarme a los ojos.

Atónita, intente llamarlo para que me explicara que era lo que le pasaba, tomó una actitud muy diferente a la habitual, pero él sólo salió de mi habitación sin decir ninguna palabra. Intenté levantarme pero mi mareo seguía intacto, así que volví a acostarme en la cama.

Tal vez pueda preguntárselo mañana.

Finalmente cerré los ojos, esperando que aquel mareo ya no fuera una molestia mañana.

Aquel día desperté temprano y con un fuerte dolor de cabeza, Eweleïn me dió un líquido dentro de una flor, un tanto amargo, que podría ayudarme con la resaca y el dolor desapareció en cuestión de minutos. No pude ver a Ezarel en todo el día, cada vez que trataba de buscarlo en un lugar específico, él desaparecía. Estuve toda la tarde queriendo buscarlo, para hablarle sobre lo que había ocurrido ayer pero fue en vano. El día había transcurrido muy rápido y yo todavía no podía verlo, sólo esperaba que no estuviera molesto conmigo por lo que hice. Pero ese extraño brillo que apareció en sus ojos, me dejaba un extraño sentimiento de inquietud.

Al día siguiente a ese, me levanté temprano y empecé a guardar algunas cosas para la misión que teníamos.

— El arco, las flechas, las raciones .. —Murmuré mientras guardaba todo en una pequeña mochila.— Creo que tengo todo listo.

Guardé todo rápidamente y una idea había pasado por mi cabeza. En la misión iba a poder ver a Ezarel, así que ..

¡Esta vez no te escaparás de mi!

Tomé mis cosas y salí de mi habitación a toda prisa, debía dirigirme hasta la gran puerta y encontrar a los demás. Podía sentir algo de emoción por volver a hablar con Ez pero algo preocupada sobre como se encontrará, en todo caso, no iba a esconderme de él para siempre.

— Siento la tardanza. —Dije después de que había llegado.

— Justo a tiempo. —Respondió Valkyon.— ¿Te despertaste tarde?

S E C R E T O S [Ezarel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora