S E C R E T O S [Ezarel]

Capítulo 19: Cerca de ti

No he tenido tiempo de pensar, me tuve que arrastrar unos cuantos metros mientras soportaba el dolor y tomaba mi espada. Me levanté con dificultad y limpie la sangre que salía de mis labios con mi brazo. Mientras la hydra seguía retorciéndose, comencé a caminar hasta acercarme, Envidia sostenía su espada pero podía ver el miedo en sus ojos.

Cuando me acerqué comencé a enterrar la espada en sus piernas, tal vez no estaba haciéndole mucho daño pero al menos podía herirla.

De pronto, una espada salió del estómago de la hydra y una gran cantidad de sangre salió de esta, haciendo que me salpicara también. Ira salió dando cortes dentro de ella, se había dejado tragar a propósito para atacarla desde dentro.

La hydra hizo otro movimiento brusco, logró levantar la cola y darme un fuerte golpe, me alejé rápidamente y la hydra cayó.

Levanté mi mano y me di cuenta que mi nariz comenzó a sangrar, definitivamente iba de mal en peor. La hydra había dejado de moverse, parece que Ira logró vencerla.

Nuestro entorno comenzó a distorcionarse y lo único que escuché, fue una ola de aplausos, habíamos regresado al estadio, Ira se limpiaba la sangre que tenía y Envidia tenía sus manos en el suelo, esto no era un campeonato, era una pesadilla, me quedo con los de la tierra. Solté la espada y caí al suelo.

Ezarel apareció al frente de mi y se inclinó, lo primero que hizo fue mirar mi pierna.

— No traje ninguna poción anti-dolor, será mejor que respires profundo. —Él levantó mi pierna y apenas eso me hizo sentir un mar de dolor.

He sentido mis manos frías, estaba perdiendo mucha sangre.

Ezarel tomó la rama que atravesaba mi pierna y esperó unos segundos, luego quitó la rama de un sólo movimiento.

— ¡Agh!. —No he podido evitar gritar.

Ezarel ha dejado a un lado la rama y aún inclinado, me ha levantado un poco entre sus brazos. No he podido evitar toser mientras lo miraba. Su rostro mostraba mucha preocupación y me abrazó. He recordado las palabras de Nevra sobre que no le gusta que lo toquen, así que traté de separarme de él.

— Espera, no es bueno que te toque ..

— No digas nada. —Él me abrazó aún más, su voz sonaba como a segundos de querer romper en llanto, no lo creí posible de él pero mi idea se hizo más fuerte cuando sentí unas lágrimas tocar mi hombro.— No quiero perderte.

"Ella moría en sus brazos, cuando lo tocan, recuerda la sangre de Emilia y todas esas pesadillas"

He sentido mi corazón partirse, estoy casi en la misma situación que Emilia y entiendo que Ezarel este entristecido .. afligido o quizás más. 

Él se separó un poco de mi y plantó un beso en mi frente, es la primera vez que lo veo así, no he podido evitar sonreír, sé que no es el momento pero me hace feliz que sea así conmigo.

He sentido los ojos pesados y todo se oscureció.

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He abierto los ojos y mi visión se encontraba nubosa, lo primero que alcancé a observar fue a alguien que llevaba una túnica negra y empezó a extender su mano hacia mi.

— ¡Ah!. —Me he sentado asustada después de mi visión.

— ¿Qué sucede? ¿Te duele algo?. —Solo se encontraba Ezarel conmigo.

He parpadeado perpleja, no sé que fue esa visión que tuve, he suspirado de alivio, tal vez no era nada.

— Estoy bien .. Ah. —He sentido un dolor por todo mi cuerpo, aparte de las heridas graves que tenía.

— No te muevas mucho, logré que Eweleïn trajera algunos de sus mejores ungüentos. —Dijo Ezarel.

— Ya veo ..

La puerta se abrió y enseguida reconocí a los chicos junto a Miiko.

— Gracias al cristal, te encuentras bien. —Dijo Leiftan.

— ¿Necesitas algo?. —Preguntó Miiko.

— No, estoy bien, gracias por preocuparse. —He mirado a Nevra y a Valkyon, parecían los más afectados.

— No nos vuelvas a asustar así. —Nevra se acercó a mi y me abrazó con cuidado.

He visto de reojo que Ezarel volteaba la mirada hacia un lado.

— Nos alegra que estes bien.

— Gracias Valk. —Había olvidado por completo el asunto del campeonato.— Por cierto, ¿Quien ganó?.

— Ira, fue la última en estar en pie. —Dijo Miiko un tanto molesta.— La buena noticia es que estas bien.

— Algunos esperan que el cristal esté en buenas manos. —Volvió a decir Leiftan.

Me ha dado curiosidad, si el cristal antes estaba dividido en siete partes y todo estaba en armonía, ¿Por qué tuvieron que unificarlo?. Este no era el mejor momento para pedir alguna explicación, así que será mejor que guarde mis dudas para después.

— Será mejor partir antes de que anochezca. —Dijo Valkyon.

— ______ el dolor ya no será un problema pero las heridas graves son más difíciles en sanar, no hagas ninguna locura. —Dijo Ezarel, al menos no ha perdido el sentido del humor.

Todos salieron de la habitación, me he levantado con cuidado y me he dado cuenta de que ya no sentía dolor en mi cuerpo, excepto la de mi pierna, esa seguía doliendo.

He tomado mis cosas y las guardé, caminé con cuidado y me acerqué a la ventana, había muchos celebrando por las calles y otros tenían una mirada perdida, es como si estuviera viendo una escena después de algunas elecciones a la presidencia.

He bajado por las escaleras lentamente y cuando salí, todos se encontraban ahí, esperándome.

— Vamonos ya. —Dijo Ez.

Sin embargo, hubo una multitud que estaba al frente de nosotros y estaban celebrando, entre todos ellos, se encontraba Ira, tomando un jarro de cerveza.

Escojan
A) (Voy a felicitarla por su victoria)

B) (No me apetece hablar con ella, será mejor que la ignore)